Cap 30: Despertar: Rayo de Sol

Capítulo 30: Felicidad en la oscuridad

Narrado por Renesmee:


La oscuridad puede doblegar al sol; pero no puede sostener los rayos eternamente


- Tía Alice - comencé a decirle - En verdad ¿todo esto es necesario?
- Ah no Nessie, tu no vas a decirme como Bella o ¿si? - suspire mientras ella seguí ocupada con mi maquillaje. Aun así me sentía preocupada con la guerra - No te preocupes - dijo tía Alice como leyendo mi pensamiento - por ahora durante estas hora no hay guerra alguna. Solo una boda, ¿ok?
- Muy bien... - acepte suspirando y alejando eso de mi mente
- No comiences con la melancolía o tendré que ir con Jacob y decirle que te arrepentiste - me sentencio

Salte ante su comentario.

- No te metas con tu tía Alice, que puede tragarte si no resulta la boda como ella quiere - tercio tía Rosalie con buen humor
- Está bien tía Alice, pero...es que yo solo quería una boda sencilla - comencé a reprochar cruzando las manos - estamos en guerra como para hacerlo todo tan,... - comencé a buscar la palabra - tan, normal y tan grande todo esto
- Que te dije - me regaño - No existe guerra alguna durante estas horas - volvió a repetirme. Olvídalo, además...ningún miembro de mi familia será solo normal - dijo Alice - Todo lo referente a fiestas y vestimenta es de mi incumbencia y nadie hará que eso cambien. No permitiré que tu boda sea solo una boducha cualquiera... sobre mi cadáver

Rosalie tocio

- Bueno ya saben lo que quise decir - sonrió mi tía

Después de una hora entera arreglándome mis dos tías en el baño, llego mi madre Bella.


- Hija te ves linda - me aseguro casi con un chillido de alegría - Nunca pensé verte así
Yo hice una mueca
- Porque nunca quisiste creer que yo ya había crecido - le dije mirándome en el espejo. La verdad me veía muy linda con ese vestido.


Mis tías se fueron y cuando quedamos solas ella me dio un obsequio
- Mamá, ¿cuando fuiste a comprar esto? - le pregunte curiosa por el detalle
- En realidad ser un Cullen tiene sus ventajas respecto a la rapidez y al dinero que le das a las tiendas que te traen obsequios como estos - hizo un mueca graciosa - no es mi obsequio es de tu padre más que mío pero digamos que él quería incluirme en la tarjeta


Cuando lo destape vi un hermoso collar de oro y con él un dije donde estaban en mi miniatura una foto con mis padres y yo, cuando estaba más pequeña, era realmente hermoso y del otro lado estaban en pequeña foto todos los Cullen.


- Creo que tu padre quería decirte con ese obsequio que todo seguiremos aquí para ti - dedujo con una sonrisa - La guerra que se aproxima no es escusa para que lo hagamos formal todo
- Mamá - comencé a decirle que no era necesario
- Si vivimos entonces, seré mucho más feliz - admitió -Casi olvidaba lo que es ser más joven
- Mamá pero si eres joven aun - le hice una mueca - Si fueras humana solo tendrías 24 años
- Creo que 25- corrigió mi pequeño error - Como sea - prosiguió - Quiero darte esto, que tus abuelos me dieron el día de mi boda - extendió la mano y me ofreció un caja azul. La abrí y adentro había dos pesadas peinetas de plata. Sobre los dientes entre los intricados diseños florales, iban unos oscuros zafiros azules.


Tome uno en mi manos y realmente eran hermosos. Antiguos, pero muy hermosos.
- Eran de mi abuela Swan y mis padres me lo dieron el día de mi boda - me platico mientras yo aun seguí observando las peinetas - ¿espero que te gusten?
- Gracias... - solo eso pude pronunciar y abrace con fuerza a mi madre


- Oye, bella! - le regaño Alice cuando entro - ¿No recuerdas que debes ir por la flores? Edward ya esta aquí afuera.
- Claro que lo recuerdo, oye en verdad Alice no sé como lograste hacer todo una fiesta en solo unas cuantas horas - dijo mi madre desasiendo nuestro abrazo
- Eso es porque soy fabulosa y maravillosa - expreso mi tía riendo y arreglo unos cuantos toques a mi cabello y a mi vestido.
- Te esperare allí abajo - agrego mi madre antes de salir
- Si...


Después de que Alice pusiera las peinetas en mi cabello, me dijo que era hora de salir.
- ¿estas lista? - me pregunto
- ¿Bueno si tú crees que estoy lista? - le espete mirándome en el espejo
- Me siento alagada que preguntes - expreso Alice - Pero quiero decir si estas lista para casarte
- Tía Alice, eso ni se pregunta - le dije con voz ofendida - claro que quiero casarme
- Aunque sean con un lobo peludo, o mejor dicho con un perrito faldero - tercio mi tío Emmett asomándose por la puerta
- Oye! - comencé a reprocharle
- Tu sabrás sobrina - cerró la puerta riéndose
- A no le hagas caso, nena -dijo tía Alice - entonces, ¿lista?
- Si.. - dije muy segura


Aun así sentía que mi corazón se agitaba y tenía un poco de nervios. Pero luego me recordé a mi misma que en los peores casos podría no haberse repetido o podría no haber pasado nunca esto.


Yo en verdad quería casarme con Jacob Black.


Y pensar todo lo que tube que hacer y todo lo que tuvimos que pasar para estar en este momento...


...Flash Back...


Siempre tenía la idea de nunca perder una esperanza, porque mis padres vivieron en sus tiempos de tinieblas de fe y amor. Entonces, ahora que yo me encontraba en una situación difícil tenía que creer que todo mejoraría y que pronto regresaría con las personas que amaba.
En realidad nunca pensé que sería tan rápido. A muy entrada la madrugada sonó el celular de Richard. Todos dentro de la cabaña se alteraron e incluso se pusieron tensos, pero cuando este vampiro nos platico que había cambiado los planes estallo discusiones entre los hermanos de la luna.


- ¿Como que los planes han cambiado? - preguntó ese chico de cabello rojizo se llamaba Federico
- Federico, no comiences de nuevo, ok... - tercio esa chica que era descendiente de Richard
- Pero, Griselda... - le llamo la atención un chica alta, la tal Wendy - ¿porque debemos seguir a lado de Avril?


Todos esperaban respuesta, atentos a los que Griselda iba a decir.


- El motivo que estemos de lado de Avril, es porque deben saber que solo ella puede ayudarnos de salir de esto y solo uniéndonos con los Cullen tendremos una leve posibilidad de ganar esta batalla - intervino Richard mirando a los demás que se encontraban sentando en la cabaña - ahora vendrán los licántropos de Inglaterra y es hora de que les demuestren que ustedes son mejores
- Y así será - sonrió Wendy levantándose con orgullo - No se nos ira ninguno, ¿no es así hermanos?


Los demás asistieron un poco mas clamados, pero aun podía ver que tenía dudas y por lo mismo creo que Griselda comenzó a hablar.


- Hermanos, todos nosotros hemos perdido a un ser querido por los Vulturi, nos hemos escondido en Italia y en diferentes partes del mundo - se detuvo cerró los ojos - No podemos permitir que seguimos escondidos en esta batalla, que nos abre la puerta de una venganza contra esos tres - apretó los dientes y abrió al instante los ojos. Pude ver como sus ojos violenta brillaron como el fuego - Han matado, solo por matar.... inocentes licántropos han sido asesinados solo porque unos de ellos nos teme. Cayo solo ha cazado por cazar, nos ha convertido en una especie en extinción, si nuestros amigos Ingleses creen las palabras de los ancianos de hielo entonces... se darán cuenta que están equivocados - respiro profundo - No podemos rendirnos contra ellos y mucho menos dejar que maten a una familia inocente solo porque se les da la gana. - sonrió a los demás - Es hora de hacer que nos teman de verdad los Vulturi, de demostrarles que es un licántropo de verdad


- Es hora de salir de la cueva - tercio Richard y este miro a Griselda - se que ustedes se contienen cuando sale la luna y que nunca han matado a un humano, pero en esta ocasión tendrán que matar a otro como ustedes, ¿creen que puedan hacerlo?


Los licántropos presentes se levantaron y se quedaron de pie.
- Claro - acepto uno de ellos
- Por supuesto - dijo otro el más lejano de mi


Los demás solo aceptaron con la cabeza y en ese momento se quedaron más tranquilos.


Es hora de irnos y comenzar con otro plan - nos anuncio Richard - Esto debe ser algo importante, ya que si no hubiera sido así Avril no se molestaría en reunirnos a todos


- ¿A todos? - pregunto curiosa Griselda


Richard sonrió
- Quiere reunir a todos en la casa - le informo - ella está planeando otro plan, dijo que esto nos ayudara a todos ganar o a menos tener la posibilidad de salir con vida de esta guerra con Vulturi


Así después de salir de esa cabaña al Este de Canadá, nos fuimos en cinco autos últimos modelos, los licántropos iban mas pegados de lo normal dentro de cada uno y si alguien hubiera visto eso se quedarían con serias dudas, ya que mis amigos licántropos se vestían con ropa vieja y sucia.
No olían mal, pero su ropa era igual que un vagabundo.


Cuando entramos a la zona de Forks, puede reconocer inmediatamente los árboles y el aspecto sereno de esa pequeña población donde había nacido, pero donde solo pocos llegaron a conocerme como prima de Bella (y no su hija), al menos mi abuelito Charlie ya sabía la verdad, pero el poblado no sabía nada de mí absolutamente. Ese era el precio de ser alguien "especial" como una vez me dijo mi madre cuando era pequeña.


Siempre había tenido amigos que fueran lobos, vampiros o ahora licántropos (o un humano que supiera de nuestra existencia por ser familia), pero nunca un amigo humano normal y común. Nunca sabré lo que es ser alguien normal.


Suspire y eso hizo llamar la atención de Richard que se encontraba manejando.


- Que te sucede? - me pregunto curioso mientras manejaba
- No sé, solo que creo que si no salimos con vida - los que estaban a mi lado se tensaron ante mi comentario nada bueno ante una batalla - Claro, quiero decir hay una posibilidad, ¿no? - quise componer pero fui inútil y seguí platicando sin prestar atención a los demás - Lo que quería decir es que me preocupa no haber hecho lo que quise hacer...


- Entiendo - comprendió Richard - Pero, ¿Porque no lo hiciste a su momento?


Lo pensé un momento y suspire.


- Creo que fue culpa mía y un poco de mis padres por mantenerme en una burbuja de cristal - bufe al recordar - Aunque el día que quise cambiarlo me secuestran y luego me dicen que los Vulturi quieren matarme - hice una mueca


Richard comenzó a reír.
- Si, aunque no fue un secuestro en sí - dijo


Sonríe mirando la ventana de mi izquierda. Quería solo estar con mis familia y con ansias quería tener a mi lado a Jacob


Nos adentramos al bosque con todo y autos. Subíamos y bajábamos cada vez que encontrábamos piedras o uno que otro árbol con raíces gruesas y sobresalidas.
Muy deprisa llegamos a un gran claro. Lo reconocía y sentí una especie de escalofríos por todo mi cuerpo. Recordé una escena donde vi como llegaron los Vulturi.


Cuando llegamos puede ver a la distancia a mis padres entrelazados en un beso que sacabas chispas con solo verlos. No puede evitar emocionarme al verlos.


- Mami, papi - grite y corrí hacia ellos
- ¡Hija! - expresó m madre casi chillando de alegría y me abrazo fuertemente. Mi padre nos abrazo a las dos y sentimos que por fin volvíamos ha ser una familia otra vez.


Después algunos minutos más tarde me encontraba platicando con mi padre.
Bueno si al platicar lo defines como solo el hablando y tu solo pensando.


- No, no Nesiee - negó rotundamente ante mi pensamiento


¿Pero porque?


- Porque no estoy dispuesto a ceder ante esta petición tuya - respondió un poco molesto
- Pero, como sabes que no moriremos, ¿cómo? Quiero al menos estar con él. Quiero al menos juntar más nuestras almas ante lo que sea que encontremos en el otro lado de la muerte


Trataba que mi padre entendiera, la necesidad que tenia ante mi petición. Pero no solo era una petición o mi último deseo o algo por el estilo. Era más bien algo que siempre anhele, algo que ya esperaba con anticipación y algo que querían antes de morir. Si no moría como mi padre decía, entonces no me molestaría con esta decisión. Porque era mi sueño hecho realidad... estar con Jacob. Con mi Jacob.


- Olvídalo, Nessie - volvió a rechazarlo
- ¿como puedes hacerle esto a tu hija?
- No puedes tomar una decisión tan abrupta y menos en esto momentos - expreso casi regañándome - Estoy de acuerdo que lo ames, pero en estos momentos no piensas con deberías por todos los problemas que tenemos, pero te aseguro que todo saldrá bien.
- Y vuelves a estar muy seguro. ¿como puedes asegurármelo? Yo solo quiero hacer esto. Además podría ser mi ultimo día y juro que no te lo perdonare ...
-
Mi padre saco aire por la molestia de nuestra discusión. Volvió a negar con la cabeza


- No ... no te dejare.


- ¿Que sucede? - tercio mi madre rápidamente de donde se encontraba - ¿que discuten?
- No es nada mi amor - respondió mi padre rápidamente y yo cruce los brazos molesta


Casi rechine los dientes.
- Nessie, ¿qué pasa? - ahora me pregunto a mi.


Sabía que le ocultábamos algo y si yo le decía lo que mi padre no, entonces mi padre tendría dificultades con ella. Al menos por un par de horas.


- ¿Le digo yo o le dices tú? Le di a elegir a mi padre.
- Nessie quiere casarse con Jacob - le soltó sin prepararla para esa clase de información. Mi madre se mordió un labio y luego suspiro.


- No, es absurdo - negó - Absolutamente no...


- Ash. miren quien me lo están negando - les reproche a los dos. Por primera vez les contestaba. Mi primera rebeldía por todos esos seis años de niña buena. Pero la verdad no me importaba en lo absoluto. - Según mi abuelo Charlie me contó fue que tu mamá te encaprichaste a casarte con mi padre cuando tenias 18 años y casi te suicidas si él no aceptaba - le asegure - Además según mi abuelito ustedes casi querían morirse por el otro. Me dijo también que casi parecía un amor trágico como Romeo y Julieta, que por eso te dejo que te casaras madre - ella abrió mucho los ojos y mi padre comenzó a reír
- ¿Eso es cierto, Edward? - le pregunto Bella
- Si - acepto mi padre divertido - Tu padre temió que yo te raptara o que fuera peor que te suicidaras por mí, o algo por el estilo
- ¡Vaya! - expreso pensativa mi madre ante esa revelación


- Es la primera vez que les pido que me apoyen en este amor que tengo por Jacob - seguí - Saben que Jacob ni siquiera ha querido besarme por culpa suya - tal vez en otro momento estaría muriéndome de la vergüenza, pero en ese entonces solo quería que comprendieran mi punto de vista y me apoyaran - Teme que mi padre le lea la mente y que en sus pensamientos salga nuestro primer beso, es tan incomodo... - ahora mi padre hizo una mueca - Solo quiero casarme... ¿que tan difícil es eso?


- Es que hija, no lo digo por Jacob - inquirió mi madre - lo digo porque es algo muy serio y muy importante
- Según tía Alice - volví atacarle - tu quería casarte solo con una camiseta a cuadros y unos pantalones vaqueros


Allí la bomba explotó. Mi madre quedo invulnerable, pero todavía quedaba mi padre.


- Aun así, no creo que sea el momento justo para una boda - siguió mi padre - no lo harás. Nessie


- ¿No es el momento justo? - salte casi ahogando un grito de impotencia - ¿entonces cuando? Estas esperando que muera y así ya no podré casarme ...


Eso altero a los dos.
- No digas tonterías, hija - tercio de nuevo mi madre
- Quiero a Jacob. quiero casarme con él antes de morir y quiero que mis padres me apoyen en esto - les espete casi suplicándoles - Solo quiero casarme con Jacob Black. - suspire - Se que para ustedes es difícil de entender, después de todo para los padres es difícil de comprender que sus hijos han crecido y para ustedes aun mas porque solo tengo 6 años desde que nací, pero si calculan ya tengo 25 o 27 años...
- Solo si supones - interrumpió mi padre
- Esa es la edad que tengo, ya sea físicamente - me señale mi cuerpo - y mentalmente - señale mi cabeza - ¿como pueden mantenerme como niña?


Ambos se miraron y supe que estaba recapacitando.
- Si no me ayudan - los sentencié - Nunca se los perdonare, si es que vivimos... pero eso no quiere decir que los obedeceré esta vez, porque quieran o no me casare con Jacob Black


- Está bien - respondió mi padre rindiéndose al fin - pero. ¿me dejaras hablar con él antes de la boda de esta tarde?
Dude por un momento. ¿Qué tal si me dejaba plantada por mi padre?


Sonrió mi padre y negó con la cabeza divertido.


- Muy bien - acepte - Pero será después de que yo le proponga matrimonio


- ¿Qué paso con esos días que el hombre pendía matrimonio a la mujer? - pregunto mi padre para sí mismo como si fuera una aberración
- Yo te diré que paso - le respondí - Los padres tienen la culpa que los novios se sientan tan agobiados con la responsabilidad y con el mutuo miedo que no se atreven a hacerlo ellos mismos.


Bufo mi madre por lo bajo.
- ¿Jacob, miedo? - pregunto riéndose - No lo creo
- No, yo nunca dije que él tuviera miedo de ustedes - les recalque - Jacob tiene miedo que ustedes no lo dejen verme.


Creo que con eso último gane la conversación de convencimiento con mis padres. Cundo volvimos a casa de mis abuelitos Esme y Carlisle, tía Alice salto a saludarme y me llevo directo a su cuarto.


- Por todos los santos, Alice - intervino mi madre casi leyéndole la mente acertando a lo que iba a ser mi tía


- No digas nada - le espeto Alice jalándome hacia su cuarto
- Alice.. - comenzó a protestar mi padre


Esa fue la señal para saber que tía Alice se había enterado antes de mi repentina boda.


¿Pero cómo?... si unos días antes en mi mente no cabía esa posibilidad.
Pero si la pensabas... - una pequeña parte de mi cerebro dijo eso - No niegues que querías que Jacob te lo propusiera


Sonreí ante mi pensamiento


- No tenía tan claro tu futuro, - comenzó Alice a decir - Pero he aprendido a ver al rededor, además antes de que comenzara todo este asunto, me tome la libertad de hacer un par de preparativos


Abrí muchos los ojos.


- ¿Preparativos? - repetí en voz baja
- ajam - sonrió feliz y casi voló por una caja grande de color dorado - ¡Felicidades!
- ohh, gracias - le dije pero no lo abrí - Pero Tía Alice, aun no estoy segura ya que no le he dicho a Jacob y no sé que podrá responder...
- No te preocupes - interrumpió - Ese lobito dirá que sí. ¡Ábrelo! - me insisto para que viera el interior de esa caja. Suspire y lo abrí. En interior había un vestido de tela muy suave y lisa. Su color blanco lo hacía ver puro y fresco.


- Sácalo - dijo Alice casi emocionada
- Si...


Lo tome de la cintura y descubrí que era un vestido de novia. Pero no tenía tirantes ni mangas, era de pecho descubierto y con un corte largo que llegaba hasta el suelo. Su suavidad y textura era liso. Había pequeñas figuras tejidas en la cintura de los demás todo era liso. Cuando un rayo de sol le dio, puede ver que brillaba como una estrella, como un diamante y como los vampiros cuando se ponían a descubierto del rayo del sol.


- ¿Te gusto? - pregunto impaciente mi tía


Yo la abrace y solo asistí con la cabeza.
- Sabes nena, eres mejor en esta situaciones que Bella - lo tomo y volvió a guardarlo - Ahora tu ve a decirle a tu querido lobito que quieres casarte con él - volvió a verme y dijo - Estas genial!, no creo que diga que no - me puso un poco de brillo en los labios - Lista, más que genial - me giro hacia la puerta - Ahora ve por él, lo mas rápido que puedas
- Pero primero debo llamarlo - inquirí
- Créeme, será mejor si vas a la cabaña - me informo mi tía
- Pero...
- Jasper, - llamo a su esposo
- Hola linda - me saludo con cariño mi tío
- Hola tío...
- Si, si, fuera los saludos - dijo desesperada Alice - Querido ve y llévala a la cabaña
- Claro - acepto tan fácil mi tío - Vamos Nessie - abrió los brazos para que yo subiera
- Ok... - acepte - tía Alice, pero Jacob
- Ah, no te preocupes nena - me tranquilizo - Él llegara en unos cinco minutos.
Entonces porque?...
- Debes irte, creo que será más romántico y más ammm - bajo la voz y me lo dijo en el oído - más intimo. Le diré a tu mamá que lo lleve ante ti.


- Ya te escuche Alice - tercio mi madre desde el piso de abajo. Yo apenas y escuche, pero mi tío Jasper me lo dijo "tu madre ya respondió". Me puse en posición para que tío Jasper me cargara en sus brazos.


- ¿En verdad te casaras, Nessie? - me pregunto en el trayecto
- Si - le asegure
- Entonces mucha suerte, querida - me respondió sonriéndome
- Tío, crees que podremos sobrevivir a la guerra - le comente mis preocupaciones
- Claro, - me aseguro - Pero no creo que pueda estar en tu boda, - me dijo seriamente - Iré a ver los planes con Avril y los demás. No te preocupes...


Y después llegamos a la cabaña. Donde él me dejo y salió corriendo.
Segundos después vi desde la ventana interior que Jacob se encontraba allí afuera con mi madre.
Salí y me quede mirándolo un largo, largo tempo...


Sus labios, su cuerpo, su cabello... todo en el desprendía calor y sexualidad. Sus ojos... todo.


...Fin del Flash Back...


Sonreí para mi misma en el espejo y di media vuelta y dije:
- Estoy más que lista - le anuncie a mi tía


Ella salió deprisa y fue hacia abajo. Sabía que iría a preparar a Rosalie o decirle unas cuantas instrucciones sobre la música.
Al salir, vi a mi padre con traje de etiqueta. Se veía tan feliz que solo pude pasar saliva.


No tenía palabras, pero no las necesitaba con él. Nunca las necesite.
- Te vez hermosa - me extendió un ramo de flores - Este día me hizo recordar tanto a tu madre - dijo y luego me coloco la mano sobre su brazo y la sujeto con fuerza.
- Papá, no soy como mi mamá que se tropezará en cualquier momento como para que me tomes fuertemente - le exprese con una media sonrisa
- Solo por si acaso.


Olía a diferentes flores silvestres y levante levemente la nariz. ¿Como había diferentes fragancias en la casa?
- Creo que te dará un infarto al ver lo que hizo tu tía Alice allí abajo - me platico mi padre aun sonriendo
- ¿Qué? Tuvo tiempo para arreglar la casa
- Si


Me quede pasmada al saberlo. En verdad tía Alice era muy ...
- Si lo sé - admitió mi padre ante mis pensamientos


La música comenzó. Y delante de mí desfilo mis primas Denalí (las cuales iban a ser mis damas de honor.


Con eso comenzamos a bajar las escaleras, cuando por fin mis pies tocaron el suelo. Fue cuando me di cuenta del cambio de la casa.
Todos los muebles no estaban, cada uno de los vampiros vestían adecuadamente para la boda (lo cual me hizo preguntarme ¿De donde los habían sacado?)


La casa estaba decorada de diferentes flores campestres, lo que me hacia recordar al bosque y un olor a frescura que no podía distinguir.


Aunque todo me abrumo decidí que no me molestaría, de pronto la canción cambio, la marcha nupcial sonó de fondo, esa era la señal, esa era mi entrada... Con el corazón latiéndome a una velocidad que parecía increíble de creer empecé mi camino hacia aquel hombre que le entregaría mi vida, al que le entregaría mi alma, el único que hacía que mi vida tuviera sentido.


Con la mirada baja entre en el pasillo, en el cual estaría mi Jacob esperándome, mi padre noto mi nerviosismo y con su mirada me transmitió el valor que necesitaba para seguir el camino a mi destino, tomo mi mano y volteo nuevamente hacia el frente. Seguí la dirección de su mirada y fue ahí cuando lo vi...
Por alguna razón que no es fácil de describir quería arrojarme en sus brazos y besarlo como si esa fuera la última vez que probaría su dulce sabor, sin importarme poco el lugar donde nos encontrábamos y mucho menos de las personas que nos rodeaban, el era lo que más quería, lo que más deseaba.


Pero me detuve, hasta ahí fui consciente del hermoso traje que llevaba, nunca lo había visto vestido de esa manera, supuse que había sido idea de mi tía Alice, después se lo agradecería, pero no me importaba la forma en la que él se encontraba vestido, me hubiera dado igual si él me estuviera en sus bermudas, era perfecto al menos para mí.


Me regalo una sonrisa, aquella que era capaz de detener el frenético ritmo de mi corazón, un corazón que desde este momento solo latiría por estar con él, que se detendría por mantener con vida el de él. Reí para mis adentros y comencé de nuevo mi marcha, me sentí un poco apenada con mi padre, por que se que pudo "escuchar" todo lo que pensé de Jake, mis mejillas se sonrojaron, Apretó mi mano para darme a entender que no había problema. Agradecía que mis padres me dejaran cumplir este deseo, porque estaba segura que sin Jake yo no podía continuar mi vida.


La música termino y por fin nos encontrábamos frente a frente, su mirada tan llena de amor me aturdió por completo, sentí un extraño calor recorrer lentamente mi cuerpo, sus labios se veían más apetecibles de lo normal, mi padre carraspeo para sacarme de la burbuja en la que me encontraba, el color de mis mejillas se volvió más rojo de lo que se encontraba, agache mi mirada en un intento de alejar esos pensamientos de mi mente.


- Jacob - comenzó a hablar mi padre - te entrego uno de los tesoros más preciados que tengo en mi vida, se de tus sentimientos hacia ella y que harás todo lo necesario para que ella sea feliz - a nuestras espaldas se oyó un leve sollozo, era de mi madre, estaba segura que si pudiera llorar ese sería el momento - cuídala con tu vida hermano - extendió su mano para ofrecérsela a mi Jake, se estrecharon sus manos, sentí que no cabía mas emoción en mi, ahora mi padre me miraba - Renesmee, mi Nessie, eres el más hermoso regalo que tu madre me ha dado, y para mí siempre serás mi pequeña, te amo con todo mi corazón - antes de que pudiera responderle algo más, me dio un beso en la frente y se alejó de mi para reunirse con mi madre.


Jake tomo mi mano y nos miramos fijamente, por fin sentía que todas las piezas del rompecabezas de mi vida encajaban, el estaba destinado para mi, era el sendero por el cual debía continuar mi vida. Ya no había marcha atrás, el ministro comenzó la ceremonia, en ningún momento aparto su mirada de la mía, esta era la forma en la que nos demostrábamos nuestros más profundos sentimientos.


Llego la hora de nuestros votos, le había pedido al ministro que me diera la oportunidad de cambiar mis votos, lo dudo por un momento pero mis tíos Alice y Jasper me ayudaron a convencerlo, los había repetido en mi mente desde el momento en que decidí casarme con él.


- Por favor Jacob repite después de mi - le dijo el ministro mi Jake solo asintió con su cabeza.
- Yo Jacob Black, te tomo a ti Renesmee Carlie Cullen para amarte y respetarte, en la salud y en la enfermedad, tanto en la riqueza como en la pobreza, durante todos los días de mi vida - mi corazón latía como un corcel indomable dentro de mi pecho, sus palabras iban cargadas de tanto amor y compromiso que sentí estremecer cada parte de mi cuerpo, poco a poco deslizo el anillo sobre mi dedo, con el cual sellaba la promesa que me había realizado hace unos pocos instantes, sus palabras fueron la más dulce melodía para mis oídos, estaba tan enamorada de ese hombre, unas traicioneras lagrimas amenazaban con formarse en mis ojos pero aun no era el momento.


- Ahora usted señorita Renesmee. Mi turno había llegado, aclare mi garganta para que escuchara con claridad mis palabras, quería que supiera todo lo que guardaba tan celosamente en mi corazón - Jacob Black, te tomo a ti como mi compañero, mi mejor amigo, mi esposo, y amante, porque quiero compartir contigo todas mis alegrías, tristezas, esperanzas y sueños, quiero que me acompañes como hasta ahora lo has hecho en cada paso que dé en mi camino, porque desde ahora te entrego mi vida y la esencia de mi ser, porque desde ahora seremos uno hasta que el destino nos separe, te amo con todo mi corazón - fue lo último que le dije y deslice con cuidado el anillo que representaba la confianza y las esperanzas que depositaba en el, definitivamente no se esperaba todas mis palabras, el no pudo evitar el llanto y vi correr una lágrima por su mejilla, con la mano que tenia libre la limpie con delicadeza. Este era mi esposo, el hombre sensible, amoroso, tierno que yo tanto amaba, que no dudaría en entregar su vida por mí, siempre tan él, y yo siempre tan suya.


- Pues bien, yo los declaro marido y mujer - dijo el ministro - Jake ya puedes besar a la novia - no nos lo dijeron dos veces, me tomo de la cintura y con ternura estampo sus labios contra los míos, era un beso urgente, pero también paciente, lleno de amor, nostalgia, cariño, deseo y pasión, sentimientos que no creí capaz de experimentar jamás y que ahora Jacob los hacía posibles .
Todos estallaron en aplausos a nuestro alrededor, y se acercaron para felicitarnos, para ser sinceras eso me molesto un poco, ya que yo no quería despegarme de él.


Las cosas pasan cuando crees que nunca pasaran y cambian en solo segundo toda tu vida. Un cambio del que no me arrepentiría en toda mi vida y un amor que yo solo quería tener más cerca como pudiera.
Cuando tu sol ilumina todo tu ser, sabes que nunca dejara que te conviertas en tinieblas, porque incluso en la oscuridad total hay un rayo de esa pureza de ese Sol divino que es amor y la esperanza ante todo problema y desesperanza.