Twilight Tuesday - Si le duele, se aguanta. Y ya deje de llorar.

[caption id="" align="aligncenter" width="224"] El sudor se seca, la sangre coagula, los huesos sanan. Aguántate y baila.[/caption]

Hola, adorados.

No sé si en algún momento de la vida les comenté, pero yo padezco de dancitis aguditis, un profundo e inmenso amor por la danza, y he buscado prepararme en varios ritmos. Todo esto viene al caso por una anécdota que les voy a contar, que ocurrió el sábado en clase de ballet.

El dolor es algo presente en cada momento de la danza, pero es probablemente el único dolor que se goce. Aún así, hay momentos más difíciles. Mi maestro en particular es muy intenso, y cuando vio a algunos en clase hacer caras de dolor tras un ejercicio en barra, bueno, le dio el ataque y comenzó toda una disertación acerca del dolor y nuestro deber como bailarines de ocultarlo. “¡No me haga caras! Si le duele, se aguanta. Nosotros nunca hacemos caras ni gestos ni muecas. Que el dolor no se note, el dolor nunca debe notarse. Si te quema, baja el pie y rótalo así, suavecito, sin que se vea, nada de hacer esas caras. Por mucho dolor que sintamos, la gente no debe darse cuenta. ¡Nunca podemos mostrar dolor, nunca! Y ya deje de llorar.”

No lo tomen a mal, yo adoro a mi maestro y sé que dice esto por nuestro bien. Puede sonar duro, pero es la verdad. Es imprescindible tener dignidad y clase en todo momento (frase célebre de otra maestra mía: “siempre baja con dignidad”.) En cualquier tipo de danza encontrarán una doctrina similar. Cada maestro la manejará de forma distinta, pero al final del día la filosofía del dolor es una sola: que no se note.

A lo que voy es, existen muchísimas formas de tratar el concepto de dolor y lo que nosotros vivimos con él. ¿Se nota el dolor en nuestros vampiros? La mayoría de ellos han pasado por experiencias muy fuertes que les han dejado huella. ¿Cómo lo manejan? La gran mayoría de los vampiros en Twilight pasaron por situaciones extremadamente dolorosas, es más, esa tragedia fue en muchos casos la causa o el motor de su transformación. Maggie, Siobhan, Rosalie, Esme, todas ellas dieron el paso hacia la inmortalidad en situaciones particularmente difíciles. Hoy nos enfocaremos en cómo nuestros queridos chupasangre han afrontado la presencia del dolor en sus vidas.

Veamos los dos ejemplos más claros: Bella y Rosalie. Ambas pasaron por dolores muy fuertes, pero la manera en que los manejaron fue muy distinta. Si bien la experiencia de Rose fue mil veces peor, supo lidiar con ello mejor que Bella. Rosalie tuvo desde un principio bastante claro quién (quiénes) eran los responsables del daño y supo vengarse correctamente. Después, conservó un cierto rencor a la vida en general, por el daño más profundo (la pérdida de su humanidad y por consecuencia la esterilidad) y por lo que ella percibe como una condena eterna. El sufrir de Rosalie es perpetuo, porque el simple hecho de estar viva le es desagradable, y en todas estas décadas ha empezado a reconciliarse con ello y encontrar una forma de superarlo. Ayuda que tenga el apoyo de Emmett, y, aunque sabe que su belleza fue “su maldición”, tal como ella misma lo expresa, ha encontrado un poco de consuelo en su indudable perfección.

Dependiendo de nuestras experiencias amorosas personales es debatible si Bella exageró o no su reacción ante el abandono de Edward. Hay quien dice que ningún hombre merece que se le dedique tal cantidad de sufrimiento, mientras otros sostienen que, tratándose de un amor tan absoluto y supremo, la devastación es justificada. Cualquiera que sea nuestra percepción, la verdad es que Bella no supo sobrellevar su dolor. Se dejó caer en una profunda depresión, el “hoyo en el pecho” y la gran cantidad de pesadillas que la atormentaron durante meses. Ella misma describe la sensación como agua cubriéndola completamente y sin que ella resurgiera. De hecho, nunca pudo salir del bache depresivo por sí misma: necesitó de Jacob, de multitud de recursos imprudentes, y finalmente del regreso de Edward, para recuperar el equilibrio de su vida. Eso sí, una vez que lo tuvo no lo dejó ir: a partir de Eclipse, y sobre todo Breaking Dawn, pudimos ver a una Bella muchísimo más fuerte, autónoma, capaz de resistirse y decir no, de tomar sus decisiones y prescindir de alguien sin dejar que eso la consumiera. Y claro, una vez que entró en su faceta de madre el cambio fue total, una auténtica mujer dispuesta a todo por su niña. Bella supo aprender de los episodios dolorosos de su vida.

En algunos sentidos ella y Edward son muy parecidos: masoquistas, les encanta sufrir. Y gran parte de los padecimientos de Edward tienen origen en él mismo, en los retorcidos conceptos que tiene de su propia imagen. Gran parte de su pena nace dentro de él: de su concepto de yo-monstruo, de yo-sin alma, de yo-terrible. Impresionan las tormentas emocionales que este joven puede causar en sí mismo y para sí mismo. Lo malo de este caso es que sí llegó a ser tan fuerte este trauma que hirió a alguien más, para colmo el amor de su vida: Bella. Fue tal su concepto de auto horror que en su afán de proteger a la mujer que amaba la abandonó y le provocó los grandes daños que acabamos de discutir. E incluso cuando ya estaban casados, en vez de dar a Bella todo el apoyo que necesitaba en su embarazo, se dedicó a seguirse torturando él solito, una vez más lastimando a su mujer, y ahora hasta a su hija, a la que incluso quiso eliminar. Un ejemplo de alguien que no sólo no sabe lidiar con el dolor, sino que acaba haciendo de él su estilo de vida y provocándose más, hasta crear un círculo vicioso.

Nahuel es otra alma que se atormenta a sí mismo. Huilen jamás le ocultó los detalles alrededor de su concepción y nacimiento, lo que le generó una enorme sensación de culpa por la muerte de su madre. Sin embargo, no se equivocó de malo, y jamás permitió que el resentimiento hacia Johan, su padre, se extendiera a sus tres hermanas, por mucho que ellas estuvieran de acuerdo con los experimentos e ideas de Johan. Nahuel no estuvo nunca molesto con la vida en sí (como, por ejemplo, Rosalie), y poco a poco, sobre todo después de conocer a Bella y a Renesmee, empezó a darse cuenta de que no era el monstruo que pensaba, y que claro que merecía darse una oportunidad para ser feliz y tener la conciencia tranquila. Él no tiene la culpa de nada de lo que pasó, y por fin ha logrado darse cuenta de ello.

Otro que también podría seguir el ejemplo de Nahuel es Jasper, que al más puro estilo Edward insiste en pensar que es un ser deleznable. Alice hace todo lo posible por apoyarlo, pero él no consigue liberarse del todo de un pasado que lo atormenta; quiere cambiar por amor a su esposa pero una parte de él siempre vuelve a los orígenes, eso es lo que lo lastima. Sabemos ya que la vida con los Cullen nunca fue su primera opción, pero por Alice está dispuesto a esforzarse. Le cuesta mucho, hay partes de su naturaleza que no logra reconciliar con este nuevo estilo de vida, y por ello se odia a sí mismo. Si a eso le sumamos el dolor físico de resistir el llamado de la sangre humana… bueno, se dan una idea. La mejor de las suertes para Jasper, al menos él tiene la voluntad de superarse y  tiene también una mujer maravillosa a su lado.

Quien reaccionó de una forma algo similar a Rosalie fue Jane, aunque sus experiencias fueron distintas. Recordemos que Jane y Alec fueron quemados en la hoguera bajo el cargo de brujería, y gracias a Aro consiguieron una nueva oportunidad y una nueva vida. Mientras se quemaba, el único pensamiento de Jane era devolver a sus torturadores el mismo dolor que ella sentía en ese momento; eso fue lo que le dio su talento tan particular cuando Aro la transformó. Por el contrario, su hermano buscaba huir de la agonía de las llamas, y de ahí su capacidad de despojar de los sentidos a las personas. La suya es una naturaleza más evasiva, más discreta, y probablemente menos resentida. Definitivamente no tiene un lado sádico como su hermana, y es quizá más diplomático. Pero Jane es un poco retorcida, es cruel, da la impresión de que busca que todos paguen por lo que algunos le hicieron, hay bastante resentimiento hacia el mundo en general. Lo interesante con Jane es que ella encontró una forma de canalizar todos esos sentimientos: rencor, coraje, apatía generalizada, etc., y transformarlos en un aura de poder, de autoridad, que le ha conseguido ese status tan alto dentro de los Volturi, y que la ha hecho tan temida entre los inmortales. Alec es bajo perfil, y él ha transformado sus experiencias en un control mucho más sutil, aunque no por ello menos efectivo.

Es Marcus el más lastimado de los Volturi. Bien sabemos que el dolor de perder a una pareja es el peor que un vampiro puede conocer, uno del que nunca podrá recuperarse. Y sí, tras la muerte de Didyme a manos de Aro Marcus nunca volvió a ser el mismo. Siempre se le ve con una expresión de total aburrimiento y apatía, y es que sin Didyme la vida carece de sentido para él. Hace lo posible por cumplir con sus funciones como miembro del gobierno, pero sabemos que ya no encuentra placer ni alegría en ninguna actividad. Probablemente desea la muerte, en todo caso si ésta se presentase él no la rechazaría. Está cansado, harto, y, a diferencia de Victoria, Marcus no busca venganza, sino paz, la posibilidad de liberarse de todo y reunirse con Didyme. Es imposible juzgarlo, ya que un dolor semejante no tiene comparación.

Alguien que supo manejar increíblemente bien su dolor y hasta sacarle provecho es indudablemente Esme. Las suyas fueron penas singularmente fuertes, con pérdidas muy terribles; no hay dolor más grande que el de perder a un hijo, y en el caso de Esme fue tan terrible que prefirió suicidarse. Sin embargo, cuando Carlisle la salvó ella vio la gran oportunidad que tenía de intentarlo otra vez, de ser feliz junto a un hombre al que amaba y la amaba también, más que a nada en la vida. Carlisle la salvó y ella, a su manera, esa forma tan especial de Esme, lo salvó también a él. En vez de sumergirse en el rencor tras su maternidad frustrada, como lo hizo Rosalie, ella buscó la forma de rodearse de quienes pudieran cubrir esa necesidad que tiene de amar, y de paso logró mejorar las vidas de todas estas personas. Bueno, hasta Jacob se vio beneficiado con la bondad de Esme. Toda esa fuerza la sacó de su dolor original, convirtiéndose verdaderamente en un ave fénix, que renace de sus cenizas.

Y ya que hablamos de nuestra mamá gallina vampiro, algo que llama la atención y en lo que vale la pena fijarnos es que al menos cuatro de las mujeres de la Saga fueron víctimas de abuso sexual, o estuvieron a punto de sufrirlo. Casos concretos son Esme, Siobhan, Rosalie y Bella; ésta última logró salvarse gracias a Edward, pero nadie acudió al auxilio de las otras. La manera en que cada una de estas mujeres lidió con estas agresiones fue muy distinta: Esme, por el tipo de sociedad en el que ella vivía como humana y debido a que su agresor era su marido, soportó las vejaciones en silencio durante años, hasta que el bebé que llevaba en su vientre le dio fuerzas para rebelarse y huir. Por supuesto que sufría, pero en ese momento dejó que el poder de su entorno fuera mayor. Eso sí, después no permitió dejó que estas experiencias marcasen su futura relación con Carlisle, ni que se modificara el carácter tan hermoso y dulce que la distingue. Ahora bien, en el caso de Siobhan vimos un despliegue de inmensa, inmensa fuerza personal, ya que, a pesar de que fue un ataque súbito y el hombre que la agredió fue también quien la transformó, ella no aguantó nada, ninguna tontería, y en cuanto pudo se deshizo de él. Siobhan es una gran mujer, imponente, y jamás permitió que ningún hombre asumiera control sobre ella, mucho menos quien le hizo un daño semejante. Al igual que Esme con Carlisle, Siobhan nunca permitió que este primer encuentro perjudicara su convivencia con Liam, a quien finalmente se unió, pero por amor.

Rosalie, sabemos bastante bien cómo se manejó. El suyo fue el ataque más brutal de todos, pues, aunque Esme también fue agredida por una pareja, ella nunca amó a Charles, mientras que Rose quiso genuinamente a Royce y por esto es aún más dolorosa su traición, eso sin olvidar que además se trató de una agresión tumultuaria. Ella se vengó, se vengó con la misma crueldad con que ella fue tratada, y dudo que haya alguien que pudiese juzgar o condenar sus acciones. Creo que cualquier mujer en su situación habría hecho lo mismo. Pero en cierta manera sí ha dejado que esto la persiga, y por mucho que ame a Emmett siempre habrá un dejo de amargura en la forma en que Rosalie ve su matrimonio. Tendrá para siempre la satisfacción de haber hecho justicia, de haber dado castigo y muerte a los hombres que la lastimaron, pero cuando le contó su historia a Bella fue posible ver que aún no lo ha superado del todo. En el caso de Bella y el episodio de Port Angeles, afortunadamente se trató sólo de un connato de agresión, y por eso no quedó tan profundamente marcada, aunque todavía en New Moon se veían algunos estragos. Dada la peculiar naturaleza de Bella, digirió todo el asunto velozmente y pudo verlo con cierta frialdad y hasta piedad, llegando al punto de interceder ante Edward por la vida de sus cuasi-agresores (que si Rosalie hubiera estado ahí otra sería la historia, pero bueno).

Si se fijan, en la mayoría de los casos, excepto Esme y Siobhan, es todavía posible notar el dolor, sólo que en algunos hay más capas que en otros. Pero son justamente esas capas las que delatan todo el sentimiento detrás. Jane y Rosalie han sido tan heridas que construyeron una barrera enorme a su alrededor, en parte para protegerse y en parte porque sinceramente ya no les interesan los demás ni quieren tener nada que ver con ellos. Edward sigue atrapado en su dolor auto infligido; esperemos que con la nueva felicidad que ha hallado en su familia logre superarlo, así como Nahuel y Jasper han empezado a hacerlo. Esme y Siobhan tienen que ser fuertes por sus familias, ellas son sinónimo de seguridad y fortaleza, y por su personalidad inherentemente buena y dulce consiguen salir adelante.

Y así hemos de salir adelante nosotros también. Mientras tanto, no dejen de expresar sus opiniones, ideas, comentarios y quejas, están en su casa. Cuídense mucho, sean felices, y hasta el próximo Twilight Tuesday.

XOXO

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Recomendación de la Semana

The Twilight Saga: The Official Illustrated Guide

Podrá parecer tonto o innecesario que recomiende esto, pero por desgracia no lo es. Acabo de descubrir en Facebook una aberración terrible en un concurso de preguntas y respuestas de la Saga en que alguien ganó, ganó, por decir que Alice y Jasper fueron transformados por Carlisle. … … … ¿se dan cuenta de la gravedad de la situación? Gente ignorante diciendo esas cosas y gente aún más ignorante premiándolas. Por eso, amados míos, lean, lean, LEAN. Esta Guía les dirá todo lo que necesitan saber acerca de la Saga: las familias, las organizaciones, los detalles, cada cosa que nos enamoró está explicada aquí. Habría sido justo y bueno que nos diesen el nombre del doctor que sacrificó su vida por Alice, pero aparte de eso la Guía está muy completa. Árboles genealógicos, biografías, descripciones hasta de los coches, y una gran entrevista con Stephenie. De verdad, este libro no puede faltar en sus colecciones. Hay que leer, que buscar toda la información posible, si no por eso hay gente diciendo “Vulturi”, “Stephanie”, incluso “Stephany”… o que Carlisle transformó a Alice y Jasper. La lectura es cultura.