Cap 32: Eterno Amanecer

Por DiarioTwilight   Publicado a las  8:21 p. m.   0 comentarios



CAP.32 – SITUACIONES COMPLEJAS

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Leah POV

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Me había escapado de casa sigilosamente. Mama Sarah estaba luchando con Seth y la tarea de algebra, mientras que Jake estaba en cama. Pobre! Ya hacia días que estaba con una fiebre que no se le quitaba y a Papa se lo veía preocupado. Lo mismo a Sam que venia todos los días y hablaba por lo bajo con Billy.

Así que como todos estaban ocupados me fui a mi lugar favorito en todo el mundo, a terminar de leer uno de los tantos libros que tenia en mi lista de Literatura este año. Ya habíamos pasado por Romeo y Julieta, y ahora le tocaba el turno a Jane Austen con su Orgullo y prejuicio.

Saque una manta de mi mochila y la dispuse en mi perfecto lugar bajo los enormes helechos junto a la orilla del gran río. Ahí estaba totalmente camuflada entre lo frondoso de la vegetación de la cual cada día me sentía mas parte.

Ya casi terminaba la historia, y sentía en mi parte del espíritu de Elizabeth Bennett. Aunque no creía ser tan inteligente como ella, me encantaban sus diálogos con . Y ahora estaba en la parte en que ella visita Pemberley y su encuentro casual. Ah! Es tan romántico!

Me tire boca arriba a recrear en mi cabeza las imágenes de lo leído con algunos agregados... Por ejemplo que cuando ellos se encuentran, se abrazan y se besan apasionadamente. Aunque eso seria muy impropio de la época y de una señorita de buena educación como Elizabeth. Pero no me importaba! Era mi fantasía y en ella yo era Elizabeth aunque no encontraba a quien poner en lugar de .

Como era mi Darcy? Alto, inteligente, de una masculina belleza sin dejar de lado su orgullo y su arrogancia, pero en el interior increíblemente tierno y amoroso... Cuando llegaría? Repase mentalmente a mis compañeros del colegio, que no eran muchos, y a los amigotes de Jake y no... No estaba allí!

Como se sentiría eso de ser abrazada y besada por el hombre que amas?

Deje de imaginar tonterías porque de lo contrario no terminaría la tarea y además llegaría tarde a casa. Me senté en la manta y una ráfaga fuerte llego desde el río, moviendo los helechos que dejaron caer sobre mí gotas heladas concentradas en sus hojas. Estaban frías! Aunque también trajo un perfume dulce e invasivo con notas de miel y fresa, que lleno gratamente mi nariz. Escuche ruidos de rocas deslizarse y me asome lentamente tras la vegetación para observar. Si era un oso debía correr!

Para mi sorpresa me encontré con un muchacho sentado de espaldas sobre una roca, en el fondo del cañón. Y se estaba desvistiendo! Gire el rostro para no mirar, pero la tentación era mas fuerte. Se descalzo, dejo caer su abrigo y retiro su suéter, dejando al descubierto una espalda atlética y definida. Su piel era muy blanca, pero sus músculos parecían cincelados por el mejor de los escultores. Ya solo en su ropa interior se lanzo al agua con estilo. Estaba loco! Seguramente estaría helada... pero el parecía disfrutarla. Se dejo flotar boca arriba y no podía dejar de observarlo: su torso marcado y fibroso, la "v" perfecta que formaban sus caderas dejando poco a la imaginación tras su ropa mojada, y su rostro... parecía un ángel! Mi cuerpo y mis ensoñaciones de hace un rato pudieron mas y entonces un suspiro se escapo de entre mis labios... Y eso pareció alertarlo!

Salto ágilmente sobre una roca y en un segundo todos los sonidos del bosque se callaron. Me sentí encerrada en un lugar enorme y vacío, y repentinamente empecé a flotar. Por Dios, que diablos es esta magia!?

Me vi suspendida por encima de la vegetación, inmóvil en mi prisión invisible descendiendo por el cañón, cuando mis ojos se cruzaron con los suyos. Su mirada, profunda y verde como mi bosque, creó una energía extraña que recorrió toda mi piel.

Advertí en mi cuerpo la adrenalina de la caída libre en la profundidad de sus ojos para volver a respirar la tierra, el aire, la resina y los pinos... Para ver brotar de allí el rayo de sol más puro y potente que pude haber visto algún verano. Todo era paz y alegría. Experimente el borboteo de su sangre corriendo en mis venas y como mi corazón acomodaba sus latidos a los suyos.

Era como ver el Universo todo saliendo de el... Y mi corazón se rindió y lo sentí parte de mí. Y un profundo sentimiento de afecto, hermandad, amparo y defensa surgió hacia este completo desconocido que me miraba desconcertado y sobrecogido al mismo tiempo.

La burbuja me acerco a unos dos metros de el y apoye mis manos en la pared invisible para mirarlo con mayor confianza. Para validar que el no era un sueño en mi ilusión por encontrar a alguien que me hiciera vibrar...

Y de pronto la burbuja desapareció y caí al agua, cosa que me despertó de mi ensoñación. Estaba fría y el desplome sorpresivo había provocado que me golpeara una rodilla con las rocas del fondo. Empapada y todavía agitada intente levantarme como podía, procurando despejar de mi cara la cortina empapada que era mi pelo.

El encantamiento pareció desocupar mi cabeza por un instante, y escupiendo agua lo mire nuevamente. Si, era real y el también me miraba algo aturdido.

-Pero que... que has hecho? – tartamudee y el se enderezo, arrogante.

-Me asustaste! Siempre te escondes a espiar desconocidos?

-Ah... yo... – y ya estaba ofuscada – Yo solo me asome a ver quien era el tonto que se arrojaba al río. Nadie hace eso a esta altura del año! – conteste firme mientras intentaba no resbalar. Mis pantalones mojados pesaban una tonelada.

-Ja! Con que tonto, eh? Quien eres tú para decir eso de alguien que no conoces?

-Mi nombre es Leah Clearwater y estas en el limite de nuestra reserva! Así que no me vengas con eso de que quien soy yo! Quien diablos eres tú? – y su rostro cambio, cerrando los ojos como maldiciendo el momento.

-Yo... yo... Mi nombre es Anthony Cullen. – y lo mire detenidamente. Hermoso, cabello castaño oscuro, alto, aroma dulzón...

-Cullen? -y parpadee unos segundo intentando ordenar mis ideas mientras sus ojos me distraían – Eres algo de Carlisle y de Edward? – y me sonrió.

-Ellos son mi abuelo y mi padre – contesto con orgullo y altivez. Su actitud me irritaba. Pero si lo pensaba bien, el no podía ser uno de los bebes de Bella... eso era imposible! El chico que tenía frente a mi tenia por lo menos unos 17 años o tal vez un poco más.

-Pues no te han dicho que este río es el limite de un tratado? Como se te ocurre hacer esto así como así? Te das cuenta que si yo me hubiera puesto a gritar los otros hubieran aparecido? Podrían haberte atacado y estaríamos metidos en flor de lío! – el se ofusco, salto al cauce del río y se acerco a mi. Sus ojos parecían brillar con mayor intensidad y mi cuerpo no quería discutir. Su calor corporal golpeaba cada una de mis células como en olas.

-Y crees que eres la única que tiene quien la ayude? Seguramente en este momento alguien viene hacia aquí a ver como estoy! Y... y puedo estar en el río porque es un punto neutral, o no?

-Pues para ser un recién llegado tienes muchas demandas que hacer. No tengo idea si es un punto neutral! Tu... tu... aghhh! – era adorablemente exasperante.

-Yo que, eh? Yo que?

En medio de nuestra tonta discusión, empapados como estábamos, el me tomo de los brazos y nuestras miradas quedaron enlazadas. Escuche su corazón haciendo eco en el mío en total sincronicidad. La respiración se volvió inconstante. Entonces me arrastro hacia el y me beso... Me beso!

Su boca calida entreabrió la mía y sentí la turgencia de sus labios volverse fuego en los míos. Velozmente me soltó para envolverme en sus brazos y presionarme contra el, e involuntariamente los míos hicieron exactamente lo mismo. La sensación de vértigo era arrolladora mientras sus manos acariciaban mi espalda y mi nuca. Yo, como un reflejo, enredaba mis dedos en su cabello mojado y en sus orejas.

Cuando ya no podíamos respirar nos soltamos perplejos a observarnos. El frunció el ceño, turbado y dio un paso hacia atrás. Al verme libre de la dulce prisión de su abrazo, corrí con todas las fuerzas hacia mi lado del río para escapar de el.

Me sentí fuerte y ágil, y alcance mas rápido de lo que creía el lugar donde estaban mis cosas. Tome la manta con libro y todo, la tire dentro de la mochila e inicie el regreso.

Mire atrás una vez mas, para verlo parado cerca de la orilla con la mirada dirigida hacia donde me encontraba. Mi corazón aun latía muy fuerte y de repente me faltaban las fuerzas. La impronta de sus labios se sintió como una quemadura en mi boca y sin darme cuenta me costo respirar.

Una furia incontenible me invadió que me hacia temblar, mezcla de excitación y de impotencia. Y por un momento sentí un mareo y muchísimo calor. Debía llegar a casa... debía llegar a casa!

Bella POV

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Ya habíamos terminado de acomodar los libros en la biblioteca y me había divertido haciendo bailar a Edward sobre la escalera mientras se los lanzaba.

Había traído desde mi baúl y también de entre las cosas de Esme todos los portarretratos familiares que teníamos en casa. Hermosos recuerdos de reuniones familiares: navidades, cumpleaños, aniversarios... Todos estaban allí. Alice también me alcanzo unos floreros, aunque me advirtió que no acomodara más porque en breve tendríamos más libros para poner aquí.

Edward la miro serio y luego río para decirle "Eres incorregible". Ella se sonrío picara, me guiño un ojo y salio de la habitación cerrando la puerta. Edward había tomado, de no se donde, un bello cofrecito laqueado. De allí saco una pequeña llave y una pieza metálica en forma de larga U que luego me entere era un diapasón. Me advirtió que tal vez me molestaría el sonido. Al golpearlo suavemente genero un sonido de alta frecuencia que impacto directamente dentro de mi cabeza, como si fuera una gran caja de resonancia. Para nuestros sensibles sentidos sonaba intensamente molesto.

Tape mis oídos y el me sonrió para inclinarse sobre el arpa del piano y ajustar una de las cuerdas. A los 15 minutos ya lo encontraba probando las teclas, haciendo bellas escalas de graves a agudos en total armonía.

Me pare a su espalda y acaricie su cabello mientras tocaba mi lullaby al piano. Aquella hermosa pieza que me había regalado la última navidad que pasamos en esta casa y en la que aun era humana.

La música empezó a volverse más y más leve, más y más lenta, mientras mis dedos recorrían sus hombros y su pecho, recostándolo contra mí. Mientras su mano derecha ejecutaba notas cual cajita de música, la izquierda recorría mi pierna desde el tobillo hasta la rodilla, todo lo que su posición le permitía.

Dejo de tocar y semigiro su torso para tomarme de la cintura y suavemente deslizarme sobre su regazo.

Mientras me tomaba de la cintura y yo acariciaba su rostro perdiéndome en su mirada, el deslizaba su mano por debajo de mi falda. Jugo con el borde de mi ropa interior mientras nuestros labios se encontraban en un beso. Nuestras bocas se encontraban por primera vez, apasionadas y en pleno disfrute en el día de hoy. Su lengua acaricio la mía leve para luego volverse salvaje. Acomode mis piernas a cada lado de las suyas y su mano viajo hacia mi trasero para estrujarlo, empujándome mas contra su cadera. Nuestra respiración se volvió errática mientras el desabrochaba los botones del canesú de mi vestido, besando cada centímetro de piel descubierto hasta el valle entre mis senos. Dios! Nunca podría dejar de rendirme ante sus caricias!

Y entonces algo en mi interior me saco del momento. Una punzada en mi me dio la voz de alerta y salte de su regazo con total velocidad, quedando parada junto a la ventana mirando al bosque. Edward se paro al segundo tras de mi.

-Que sucede?

-Tony activo su escudo!

-Dios! Por que este niño siempre nos vuelve locos!? Alice! Alice! – Edward corrió fuera de la habitación.

-Edward! Vayan a buscarlo. El esta en el río pero desapareció de mi visión como si no existiera! Ya lo había visto mas temprano, pero el estaba aquí en casa. Lo cierto es que fue solo unos instantes! Pero esta mojado y su rostro denotaba sorpresa y desorientación.

-Ya mismo! – Edward me miro y salimos corriendo a toda velocidad

En segundos habíamos saltado el río tras la casa, y cruzábamos el bosque esquivábamos troncos en una sola dirección. Edward me dejaba ir delante, ya que nuestra conexión hacia posible que lo ubicara como un radar.

Cuando llegamos a la orilla del río, observamos y no se veía nada fuera de lo común. Las nubes habían hecho un claro y lo encontramos tendido sobre una roca secándose al sol, cual lagarto.

-Tony... – pronuncio Edward. El levanto la cabeza, se vistió velozmente y en dos saltos lo teníamos junto a nosotros. No pude más que acercarlo a mí para abrazarlo.

-Hijo! Estás bien? Que sucedió? Por que activaste el escudo?

Su actitud seguía siendo de desconcierto y entonces cerro los ojos, tomo mi mano e hizo que Edward también y nos lo mostró. Siempre que Tony nos envolvía en su escudo y nos contaba algo de esta manera, uno se sentía suspendido en el tiempo. Como metido dentro de la imagen cual espectador viendo las escenas con total claridad.

La bella joven flotando sobre el río, el dejándola caer... Un dialogo enervante y absurdo hasta la presentación. Leah! Por favor, cómo había crecido mi niña! Y luego el la beso! Me tape la boca asombrada de la reacción de ambos. Estaba desconcertada y Edward nervioso. Paso la mano libre por su cabello mas revuelto que de costumbre y lo miro con ceño fruncido, ya de nuevo en la realidad.

-Tony... – murmuro Edward por lo bajo

-Papa, te aseguro que yo no hice nada. Ella me asusto! Y luego todo sucedió muy rápido. No se por que lo hice, no se por que discutí con ella tonterías... Y sobre todo, no se por que la bese. Pero fue más fuerte que yo!

-Eres igual que tu madre! – Sonrió y yo lo empuje jugando - Cuando tu madre era humana, bastaba dejarla sola un segundo para que se metiera en líos. Y tú eres igual! Un imán para los problemas.-decía mientras meneaba la cabeza.

-Por que esto es un problema? – pregunto el muchacho mas desconcertado todavía. Yo también lo estaba.

-Volvamos a casa. Debemos hablar con tu abuelo en forma urgente

-Edward... – tome su brazo y abrí mi escudo para dejar que viera en mi y respondiera mi interrogante. El se inclino y me beso brevemente.

-No lo recuerdas, verdad? – y resoplo profundamente – Vamos a casa! Hablaremos allí. Y tú... no saldrás solo de ahora en adelante! – Tony bajo la cabeza y frustrado acepto su orden.

-Esta bien... Lo siento!

Edward se acerco a el y lo abrazo. Tony que no era muy afecto a las demostraciones con su padre hizo lo mismo y se quedaron así, abrazados unos minutos. La escena me genero gran ternura. El beso su frente y caminaron abrazados por un trecho, encarando el sendero para cruzar el bosque.

Empezamos a correr y volvimos a la casa enseguida. Alice nos recibió con una sonrisa, revolviendo el pelo de Tony y dándole un abrazo. Renesmee también estaba ahí esperándonos.

Edward y yo subimos las escaleras al escritorio de Carlisle y le contó lo sucedido en voz baja. Ahí fue cuando me di cuenta que posiblemente Leah se había imprimado de Tony. Dios! Y ahora que? Veía que tanto Edward como mi suegro no querían que todos supieran de la situación. Carlisle quedo algo preocupado y se dirigió al teléfono enseguida. El teléfono timbro tres veces y una voz grave sonó al otro lado

-Hola?

-Buenas tardes... con Billy Black por favor. Habla Carlisle Cullen.

-Mi querido amigo, como has estado?

-Billy! Encantado de escucharte! Disculpa mi pedido, pero necesito que nos veamos donde siempre. Ha sucedido algo y necesito que hablemos.

-Ya estas al tanto? – Carlisle quedo desconcertado.

-Es por los niños? Pues justamente...

-No, Carlisle. Nuevamente hay fríos rondando los bosques. No hemos podido seguir su pista. Se ocultan hábilmente y pareciera que desaparecen entre la niebla provocada por la humedad. Últimamente y a una velocidad alarmante, los jóvenes de la tribu han empezado a adquirir sus formas lupinas. Y te diré que en este momento estoy casi ciento por ciento seguro que Jacob esta en medio de ese proceso.

Félix POV

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La semana había sido un fiasco. Aro estaba más demandante que de costumbre y nos volvía locos mandándonos de aquí para allá sin saber realmente que hacíamos.

Aparentemente no tenia el rango suficiente para saber que era exactamente lo que estaba tramando, y el por que tanto desfile de los "Camici Nere" * en los pasillos del palacio. Esto no me gustaba.

Entre las fuerzas del Eje, Alemania era la que lideraba e Italia formalmente había declarado la "No beligerancia" tras el 1º de septiembre, por lo que formalmente se mantenía fuera de la guerra. Aunque Mussolini, que ya estaba alineado con Alemania desde 1935, no dejaba de tomar las políticas que le convenían u obtener rédito del caos que reinaba en Europa.

Una de las edecanes me acerco el cable que llegaba y me dirigí urgente hacia sus oficinas. Era lo que estaba esperando. Golpee y se tomo sus minutos para responderme "Avanti"

Al entrar encontré a Irina, una vez más. Esta escurridiza oficial entraba y salía de Volterra con gran facilidad, esquivando todas mis fuerzas de seguridad. No sabía que ella estaba aquí.

-Félix... – dijo Aro extendiendo la mano, viendo que tenía el típico papel amarillento en mis manos. Se lo acerque. – Ah, bien! Así que nuestros amigos están finalmente instalados! Responde el cable, Félix. Quiero al vigía de retorno en Volterra. Es más útil aquí.

-Si, señor – gire sobre mis pies pero no pude evitar retrasar alejarme tras cerrar la puerta. Previamente sondee los pasillos para ver que no hubiera gente por aquí dando vueltas

-Aro, los dejaras sin vigilancia? – preguntaba ella con tono sutil.

-No, "cara"! Alguien ira en su reemplazo. Alguien que puede pasar desapercibido. Solo espero que cumpla con sus funciones y no nos traicione.

-Si dudas, por que lo envías?

-Mi querida Irina! En más de una oportunidad, como líder y como estratega deberás tomar decisiones que implicaran una jugada riesgosa. Sabes muy bien cual es el precio a pagar por la traición aquí.

Me asome al balcón y en el patio interno no había nadie. Salte y caí suavemente. Volví a las oficinas y replique el cable para que Alec volviera cuanto antes. Además tenia muy inquieta a Jane que su hermano no estuviera.

Redacte las líneas y lo entregue a la humana que servia entre las ayudantes de las Edecanes. Marietta era una joven hermosa, de cara redonda y grandes ojos negros. Aun no entendía como esta dulce niña había caído entre nuestras redes. Y cada vez que la miraba, recordaba a Edward y a su gran amor por Bella cuando ella también era humana. Entendí como la calidez y la ternura de una humana podía haberlo afectado. La pequeña me movilizaba, pero distaba enormemente de que se convirtiera en un amor tan grande como el del matrimonio Cullen.

Eran un poco mas de las 6. El día gris, plomizo y ventoso provocaría que las calles quedaran vacías en cuanto anocheciera. Además, por cuestiones de seguridad, aconsejábamos a todos volver temprano a casa. Pero que seria de nuestro alimento sino fuera por los tontos borrachos y promiscuos que les gustaba surcar los callejones de Volterra?

Subí mi capucha y camine a paso firme por las calles hasta el murallón. Corrí escaleras arriba de prisa y no termine de salir del portal porque note unas voces lejanas. Contemple la tormenta crecer desde el alfeizar. Las nubes espesas y cargadas mostraban rayos silenciosos.

Me asome y note que en el extremo opuesto a mi posición estaba Renata perdida en una conversación con alguien más, que llevaba su capa y capucha puesta. Aproveche la distracción y salte por el muro para salir al bosque.

Corrí contra el viento y era una sensación que me era siempre reconfortante. El bosque se volvió tupido y encontré el rastro que buscaba. Seguí avanzando y las risas no se hicieron esperar. Pero al instante que me reconocieron estas cesaron. Me trepe al pino más cercano y revise el perímetro. No encontré a nadie más que a quien deseaba ver. Ya sabían que era yo y me aguardaban atentos. Les hice señas que debíamos ser silenciosos, por las dudas. Se ocultaron bajo una saliente de piedra del terreno y yo salte corriendo hacia ellos, una vez los vi ubicados.

-Buenas noches! – dije en un murmullo y los enormes brazos de Emmet me dieron la bienvenida

-Félix, gusto en verte! Aunque debido a tu gesto parecen no ser tan buenas. – Rosalie aferrada a su esposo me miraba atenta.

-Aro ha estado insoportable en la semana! Hay movimientos extraños. Muchos idiotas de los Camisas Negras rondando palacio... Y esa mujer me pone los pelos de punta: Irina. Me recuerda a Jessica. Y el no me confía nada. Pero algo importante que necesitaba contarte: Alec estaba en Forks – y los ojos de Rosalie se volvieron un volcán – Me dio orden para que volviera porque seria mas útil aquí, pero esta enviando a alguien a reemplazarlo.

-Sabes a quien?

-No... Te lo dije. No quiere confiar en mí. No entiendo su obsesión con ustedes, pero los mantendrá vigilados. Iras a la presentación oficial?

-Si, viajaremos a Paris pasado mañana. Es más fácil para nosotros deambular entre los humanos. Representare a Volterra e Irlanda, ya que son neutrales ante la firma del acta polaco - francesa.

-Por que haces esto, Félix? – pregunto Rosalie y su dulzura fue notoria.

-No estoy traicionando a mi señor, pero si dándole algo de protección a mis amigos. Ustedes, todos, siempre me trataron con respeto, como un verdadero amigo, no como un guardián o por pertenecer a la Guardia Real. Nunca me dejaron de lado, a pesar que saben que mi lealtad siempre estará con los Vulturis. Para alguien que ha estado solo desde que tiene memoria es algo valioso. Además, esos pequeños se han ganado mi corazón, lo mismo que Edward y Bella. – Emmet me palmeo el hombro y eso fue como un mimo.

-Te lo agradezco, hermano! Sabes que puedes contar con nosotros.

-Lo se. Ahora debo irme. Buen viaje.

Emmet me abrazo y Rosalie dejo un beso en mi mejilla regalándome una leve sonrisa. Partí de allí a toda velocidad, ya que en minutos comenzaría a llover. No traicionaría a Aro, pero tampoco dejaría que los Cullen fueran hostigados sin motivo. No era justo. Y ante mundo en la puerta de una guerra que amenazaba a todo, me parecía que apoyar la justicia era tan importante como sustentar las lealtades.

* Camici Nere o en italiano Camisas Negras: Grupo de militancia reinante en Italia llamados así por el color de su uniforme. Luego adquirirían el mismo color de uniforme los oficiales del Tercer Reich

HOLAAA!

Creo que quedan muchas puertas abiertas para seguir diversos sucesos tanto en Europa como en America. Que les parece? Y un poco de romance siempre es bueno para un viernes por la noche, verdad?

Perdon por esta semana por no responder los reviews pero estoy en cama. He aqui nuestro esfuerzo por seguir con la historia y con aquellos que les gusta leernos. Igual no tengo mas que palabras de agradecimiento para todos los que nos esperan, los que dejan reviews y los que no, ademas de todos los alertas.

Besos y abrazos para todos. Les deseo una gran semana y ya quedan 73 dias para poder ver la peli! Entusiasmados?

Micky

from Cullen's Girls Argentina

Acerca del Autor

Nos dedicamos a brindar información a todos los fans de la Saga Crepúsculo. Desde entonces nos hemos encargado de cubrir premieres, eventos, actualizar día a día nueva información sobre el cast. Después de que terminó la épica Saga en Noviembre del 2012, seguimos los proyectos de cada actor como corresponde.
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