CAPITULO 14
SU SANGRE (NARRADO POR JACOB)
En mi fase de lobo me era mas fácil encontrarla, pues había encontrado la parte del bosque que se hallaba inundada con su aroma y el de Perla.
Por favor, que este bien- pensé mientras corria, siguiendo el olor- moriré si algo malo le pasa.
Quise continuar, pero el olor se detenia en seco en un camino húmedo lleno de hojas secas, bajo mis pies, un charco de sangre aun fresco recorria la tierra. Senti mi corazón acelerarse del pánico, al confirmar que esta sangre era la de ella: Mi caro.
¡No! …!No!- pensé desesperadamente, sin aceptar lo que acababa de comprobar- ¡No, ella no!
Llene de aire mis pulmones y lance al cielo un aullido desgarrador que atravesó el bosque entero, llegando seguramente, hasta oídos de la manada; pero ahora, nada me importaba, el dolor de no tenerla a mi lado y de saber que corria peligro, era insoportable.
¿Jacob?- escuche la voz juvenil de Seth en mi cabeza
¡Seth!. Esto empeoraba poco a poco, pues no solo no encontraba a Carolina …tampoco encontraba a Perla.
¿Paso algo malo?- interrogo Seth
Debia decírselo, ahora.
Si Seth- respondi- una tragedia
Deja los rodeos hermano, me pones nervioso
Dude en entrar en mi fase humana, pues seria mas fácil decírselo como lobo.
Seth…Caro ha desaparecido y … Perla también- pensé, lentamente- he
encontrado un charco de sangre. Es de mi princesa; no hay mas rastro de Perla.
Luego de algunos segundos de silencio, vi aparecer de entre los arboles, un lobo de pelaje color arena, agitado y con la preocupación centelleando en sus ojos.
¡No! No puede estar pasando- pensó- ¡No puede!. ¡No quiero creerlo!
¡Yo tampoco!- interrumpi de golpe- yo tampoco quiero creerlo, pero tengo que hacerlo, para salvarlas.
La expresión de el rostro de Seth se transformo por completo, ahora olfateaba a pocos centímetros de el charco de sangre, minuciosamente.
¿Qué sucede?- interrogue
Continuo olfateando, cada vez mas despacio, hasta que topo con un aroma que lo hizo estremecer y echar la cabeza hacia atrás con un gesto de desdén.
Peste de vampiro- concluyo, mirándome
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*NARRACION DE BELLA*
- Bella, ve mas despacio- imploro Edward desde su auto, menejando a mas de 80km para seguir mi ritmo
Hasta que no me lo dijo, no adverti la gran velocidad que llevaba, no pensaba mas que en encontrar a Perla y a Caro; la media noche se acercaba. Una figura alta y musculosa me obligo a frenar en seco; era Jacob.
¿Qué paso Jake?- interrogue, asomando mi cabeza por la ventanilla
Ven, rápido
No proteste, me limite a obedecerle. Baje del carro ágilmente al darme cuenta de que el camino que indicaba Jake era por el bosque; Edward venia a mi lado, corriendo al igual que yo. Hubo un momento en el que Jacob se detuvo, observando junto a Seth un monton de hojas secas. No lo comprendia.
Acercate- susurro Jacob, al observar mi rostro de confusión.
El rostro de Seth estaba empapado por el llanto que aun luchaba por retener, y el de Jake estaría igual en poco tiempo. Con el temor apoderándose de la poca tranquilidad que me quedaba, avance hacia aquel sitio, para observar aterrada, sangre
No…no…!No!- grite, al haber pensando en la posibilidad de que esa sangre fuera de ella o de mi niña
No es de Perla- intervino Jacob, adivinando mi expresión- es de Carolina
¿Cómo lo sabes?
Los Quileutes tenemos sentidos agudizados
Aquella respuesta me extraño, pero ahora no me detendia a analizar los detalles. Las pequeñas gotas saladas comenzaron a descender por mis mejillas. No, No ¿Por qué mi hermanita?. Ella toda la vida había sido como una hija para mi, era uno de los seres mas importantes de mi vida.
No esta muerta Bella- dijo Jacob- creemos que alguien se la llevo
¿Como pueden afirmar eso?- conteste con la voz ahogada por el llanto
Si fuera asi- argumento- el asesino se habría encargado de no dejar rastro, y he encontrado esto
Alzo la mano, con una bufanda colgando de ella. Era de mi hermana, estaba impregnada de la loción florar que acostumbraba a utilizar.
Esto no confirma nada- proteste aun llorando
Puede ser- dijo Jacob- pero yo prefiero pensar que la mujer que amo esta viva
El optimismo de Jacob me dejo sorprendida
¿ Y que hay que mi hija?- interrogue
No tenemos rastro de ella- tercio Seth, retirándose las lagrimas- pero lo tendremos. Toda la tribu nos ayudara a buscarlas.
Edward beso mi cabeza y me susurro al oído
Ten fé mi vida
En ese momento, esa era la mejor opción, tener fé en que estuvieran sanas y salvas.
Iremos a la comisaria por ahora- añadió Edward- la policía tiene que enterarse
Me parece bien- convino Jacob
Edward me guio hasta mi auto, yo temblaba aun con lagrimas. Vi a Edward dirigirse al asiento del conductor.
Puedo manejar- intervine- estoy bien
No correré el riesgo
Edward, por favor…
Me miro durante una fracción de segundo, y se resigno finalmente, consciente de que era casi imposible luchar contra mi insistencia.
Ve despacio- fue todo lo que me dijo, antes de cerrar la puerta
Lo hice, maneje despacio, pues iba mas centrada en mis pensamientos que en la carretera. Mi garganta me ardia, tome la botella de agua a mi lado y vacié la mitad de su contenido en mi boca, calmado la sed, mientras nuevas lagrimas volvían a brotar inconscientemente de mis ojos. Mi mundo se iria al suelo si algo les pasaba a mis dos niñas.
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*NARRACION DE JACOB*
Era consciente de que extrañamente, el chupasangre no la había atacado, pues si lo hubiera echo, habria succionado hasta su ultima gota de sangre, y había una cantidad razonable en el suelo. Mi otro consuelo era la bufanda. Si el chupasangre hubiera pretendido atacarla, no dejaría ni el mas minimo rastro, y esta bufanda era un rastro enorme, pues poseía el olor de su victima.
Habiamos vuelto a la Push, a solicitar la ayuda de la única persona con la que era difícil tratar: Leah. Mientras Seth hablaba con su hermana, yo me encontraba sentado en la arena, mirando la bufanda, aspirando su olor mientras lloraba.
¿Qué quieres?- pensé- ¿Por qué te la llevaste? ¿! Porque al amor de mi vida!?.
No dejaba de pensar todo lo que le haría a ese chupasangre si lo llegaba a encontrar, y por otra parte, no dejaba de pensar en mi princesa.
Te amo- susurre contra la bufanda- te amo tanto
Y ella te ama a ti- escuche una voz dulce a mi lado. Al girar, vi a Dalila con los pies descalzos sobre la arena
¿ No deberías estar durmiendo hermanita?- interrogue al ver su pijama, la cual tenia un bello estampado de una enorme luna llena con la silueta de un lobo.
Lo intente- susurro- pero los gritos de Leah entran abiertamente por mi ventana.
Es imposible hablar con ella
Se adelanto hasta mi y coloco sus rodillas en la arena.
¿Por qué no me dijiste que Caro y Perla han desaparecido?
Me puse tenso, ella no debía saberlo por nada del mundo. Queria protegerla de la angustia que sabia que le produciría esa noticia, sin mencionar, que esto podría provocar que ella se enterara de la verdad. Que yo era un licántropo.
No queria angustiarte. Ve a dormir
Yo podría ayudarte a encontrarlas
No puedes hacerlo hermanita. Ve a dormir- repeti la orden, esperando que la siguiera
Claro que si- insistió- déjame ir contigo
No puedes hacer eso- proteste de inmediato- es peligroso y tu eres humana
¡Oh Dios! Yo y mi bocota. Ese comentario dejaba mucho que pensar
¿Y tu que eres hermano? ¿ Un lobo?- dijo, entre risa y enojo- parece que si, porque ese es el humor que traes. De lobo
Me tense ante sus palabras, pues aquello parecía una indirecta muy directa
A veces lo soy- segui el juego, intentando tomarlo como una simple broma
Dalila sonrio
Ve a dormir- ordene- o empezare a creer que llevas una segunda vida nocturna a mis espaldas
Eres tu quien lleva una segunda vida. Es como si cambiaras de fase
La mire angustiado. Ella aun mantenía una leve sonrisa, por lo que no supe si tomar enserio ese comentario. Dalila me estaba asustando. Se adelanto y beso mi mejilla con ternura
Ten paciencia hermanito, todo estará bien
Su voz era casi inaudible y sus manos tenían una temperatura mucho mas alta de lo habitual. La mire, su rostro poseía su habitual color canela como el mio, no veía en el ninguna señal de fiebre. Alague el brazo y roce su mejilla con mi mano, para encontrarme con una temperatura preocupante en el.
¿Te sientes bien Dalila?- interrogue preocupado
La verdad no Jacob. Me duele la garganta y mi fiebre no ha disminuido.
¿ Desde cuando te sientes asi?
Esta mañana
Para mi alivio, Dalila acaba de confirmarme que era una simple fiebre
Le pediré a Sue que te cuide. Ahora, ve a dormir
Gracias Jake
Se dio la vuelta y camino hacia casa, dejando huellas en la arena.
Minutos después, Seth venia hacia mi a paso veloz y con Leah a su lado, por lo que supuse que pese a los gritos que había escuchado Dalila, todo había salido bien. Me incorpore y apreté la bufanda que tenia en las manos, mientras las palabras de mi hermana rondaban en mi cabeza, despertándome dudas.
¿Y tu que eres hermano? ¿Un lobo?
Eres tu quien lleva una segunda vida. Es como si cambiaras de fase
Ella no lo sabia, no sabia lo que yo era en realidad. Aunque…¿Sera posible que si?
¡Seth!. Esto empeoraba poco a poco, pues no solo no encontraba a Carolina …tampoco encontraba a Perla.
¿Paso algo malo?- interrogo Seth
Debia decírselo, ahora.
Si Seth- respondi- una tragedia
Deja los rodeos hermano, me pones nervioso
Dude en entrar en mi fase humana, pues seria mas fácil decírselo como lobo.
Seth…Caro ha desaparecido y … Perla también- pensé, lentamente- he
encontrado un charco de sangre. Es de mi princesa; no hay mas rastro de Perla.
Luego de algunos segundos de silencio, vi aparecer de entre los arboles, un lobo de pelaje color arena, agitado y con la preocupación centelleando en sus ojos.
¡No! No puede estar pasando- pensó- ¡No puede!. ¡No quiero creerlo!
¡Yo tampoco!- interrumpi de golpe- yo tampoco quiero creerlo, pero tengo que hacerlo, para salvarlas.
La expresión de el rostro de Seth se transformo por completo, ahora olfateaba a pocos centímetros de el charco de sangre, minuciosamente.
¿Qué sucede?- interrogue
Continuo olfateando, cada vez mas despacio, hasta que topo con un aroma que lo hizo estremecer y echar la cabeza hacia atrás con un gesto de desdén.
Peste de vampiro- concluyo, mirándome
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*NARRACION DE BELLA*
- Bella, ve mas despacio- imploro Edward desde su auto, menejando a mas de 80km para seguir mi ritmo
Hasta que no me lo dijo, no adverti la gran velocidad que llevaba, no pensaba mas que en encontrar a Perla y a Caro; la media noche se acercaba. Una figura alta y musculosa me obligo a frenar en seco; era Jacob.
¿Qué paso Jake?- interrogue, asomando mi cabeza por la ventanilla
Ven, rápido
No proteste, me limite a obedecerle. Baje del carro ágilmente al darme cuenta de que el camino que indicaba Jake era por el bosque; Edward venia a mi lado, corriendo al igual que yo. Hubo un momento en el que Jacob se detuvo, observando junto a Seth un monton de hojas secas. No lo comprendia.
Acercate- susurro Jacob, al observar mi rostro de confusión.
El rostro de Seth estaba empapado por el llanto que aun luchaba por retener, y el de Jake estaría igual en poco tiempo. Con el temor apoderándose de la poca tranquilidad que me quedaba, avance hacia aquel sitio, para observar aterrada, sangre
No…no…!No!- grite, al haber pensando en la posibilidad de que esa sangre fuera de ella o de mi niña
No es de Perla- intervino Jacob, adivinando mi expresión- es de Carolina
¿Cómo lo sabes?
Los Quileutes tenemos sentidos agudizados
Aquella respuesta me extraño, pero ahora no me detendia a analizar los detalles. Las pequeñas gotas saladas comenzaron a descender por mis mejillas. No, No ¿Por qué mi hermanita?. Ella toda la vida había sido como una hija para mi, era uno de los seres mas importantes de mi vida.
No esta muerta Bella- dijo Jacob- creemos que alguien se la llevo
¿Como pueden afirmar eso?- conteste con la voz ahogada por el llanto
Si fuera asi- argumento- el asesino se habría encargado de no dejar rastro, y he encontrado esto
Alzo la mano, con una bufanda colgando de ella. Era de mi hermana, estaba impregnada de la loción florar que acostumbraba a utilizar.
Esto no confirma nada- proteste aun llorando
Puede ser- dijo Jacob- pero yo prefiero pensar que la mujer que amo esta viva
El optimismo de Jacob me dejo sorprendida
¿ Y que hay que mi hija?- interrogue
No tenemos rastro de ella- tercio Seth, retirándose las lagrimas- pero lo tendremos. Toda la tribu nos ayudara a buscarlas.
Edward beso mi cabeza y me susurro al oído
Ten fé mi vida
En ese momento, esa era la mejor opción, tener fé en que estuvieran sanas y salvas.
Iremos a la comisaria por ahora- añadió Edward- la policía tiene que enterarse
Me parece bien- convino Jacob
Edward me guio hasta mi auto, yo temblaba aun con lagrimas. Vi a Edward dirigirse al asiento del conductor.
Puedo manejar- intervine- estoy bien
No correré el riesgo
Edward, por favor…
Me miro durante una fracción de segundo, y se resigno finalmente, consciente de que era casi imposible luchar contra mi insistencia.
Ve despacio- fue todo lo que me dijo, antes de cerrar la puerta
Lo hice, maneje despacio, pues iba mas centrada en mis pensamientos que en la carretera. Mi garganta me ardia, tome la botella de agua a mi lado y vacié la mitad de su contenido en mi boca, calmado la sed, mientras nuevas lagrimas volvían a brotar inconscientemente de mis ojos. Mi mundo se iria al suelo si algo les pasaba a mis dos niñas.
<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<
*NARRACION DE JACOB*
Era consciente de que extrañamente, el chupasangre no la había atacado, pues si lo hubiera echo, habria succionado hasta su ultima gota de sangre, y había una cantidad razonable en el suelo. Mi otro consuelo era la bufanda. Si el chupasangre hubiera pretendido atacarla, no dejaría ni el mas minimo rastro, y esta bufanda era un rastro enorme, pues poseía el olor de su victima.
Habiamos vuelto a la Push, a solicitar la ayuda de la única persona con la que era difícil tratar: Leah. Mientras Seth hablaba con su hermana, yo me encontraba sentado en la arena, mirando la bufanda, aspirando su olor mientras lloraba.
¿Qué quieres?- pensé- ¿Por qué te la llevaste? ¿! Porque al amor de mi vida!?.
No dejaba de pensar todo lo que le haría a ese chupasangre si lo llegaba a encontrar, y por otra parte, no dejaba de pensar en mi princesa.
Te amo- susurre contra la bufanda- te amo tanto
Y ella te ama a ti- escuche una voz dulce a mi lado. Al girar, vi a Dalila con los pies descalzos sobre la arena
¿ No deberías estar durmiendo hermanita?- interrogue al ver su pijama, la cual tenia un bello estampado de una enorme luna llena con la silueta de un lobo.
Lo intente- susurro- pero los gritos de Leah entran abiertamente por mi ventana.
Es imposible hablar con ella
Se adelanto hasta mi y coloco sus rodillas en la arena.
¿Por qué no me dijiste que Caro y Perla han desaparecido?
Me puse tenso, ella no debía saberlo por nada del mundo. Queria protegerla de la angustia que sabia que le produciría esa noticia, sin mencionar, que esto podría provocar que ella se enterara de la verdad. Que yo era un licántropo.
No queria angustiarte. Ve a dormir
Yo podría ayudarte a encontrarlas
No puedes hacerlo hermanita. Ve a dormir- repeti la orden, esperando que la siguiera
Claro que si- insistió- déjame ir contigo
No puedes hacer eso- proteste de inmediato- es peligroso y tu eres humana
¡Oh Dios! Yo y mi bocota. Ese comentario dejaba mucho que pensar
¿Y tu que eres hermano? ¿ Un lobo?- dijo, entre risa y enojo- parece que si, porque ese es el humor que traes. De lobo
Me tense ante sus palabras, pues aquello parecía una indirecta muy directa
A veces lo soy- segui el juego, intentando tomarlo como una simple broma
Dalila sonrio
Ve a dormir- ordene- o empezare a creer que llevas una segunda vida nocturna a mis espaldas
Eres tu quien lleva una segunda vida. Es como si cambiaras de fase
La mire angustiado. Ella aun mantenía una leve sonrisa, por lo que no supe si tomar enserio ese comentario. Dalila me estaba asustando. Se adelanto y beso mi mejilla con ternura
Ten paciencia hermanito, todo estará bien
Su voz era casi inaudible y sus manos tenían una temperatura mucho mas alta de lo habitual. La mire, su rostro poseía su habitual color canela como el mio, no veía en el ninguna señal de fiebre. Alague el brazo y roce su mejilla con mi mano, para encontrarme con una temperatura preocupante en el.
¿Te sientes bien Dalila?- interrogue preocupado
La verdad no Jacob. Me duele la garganta y mi fiebre no ha disminuido.
¿ Desde cuando te sientes asi?
Esta mañana
Para mi alivio, Dalila acaba de confirmarme que era una simple fiebre
Le pediré a Sue que te cuide. Ahora, ve a dormir
Gracias Jake
Se dio la vuelta y camino hacia casa, dejando huellas en la arena.
Minutos después, Seth venia hacia mi a paso veloz y con Leah a su lado, por lo que supuse que pese a los gritos que había escuchado Dalila, todo había salido bien. Me incorpore y apreté la bufanda que tenia en las manos, mientras las palabras de mi hermana rondaban en mi cabeza, despertándome dudas.
¿Y tu que eres hermano? ¿Un lobo?
Eres tu quien lleva una segunda vida. Es como si cambiaras de fase
Ella no lo sabia, no sabia lo que yo era en realidad. Aunque…¿Sera posible que si?
es muy buena la historia debes seguirla
ResponderEliminarsigue por favor
ResponderEliminarMe alegra muchisimo que les guste mi fan fic :D!!
ResponderEliminarGracias por su apoyo
Las quiero mucho!! :D Un beso
Att: Carolina (autora)
Me encanto!! Actualiza pronto.... :D
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