Cap 6: Eterno Amanecer

Por DiarioTwilight   Publicado a las  1:36 p. m.   2 comentarios

CAP.6 – LA MUDANZA

Bella POV

La mañana amaneció gris y estaba despierta hace rato. Edward no estaba conmigo. Me encontraba abrazada a su almohada, inundándome con su aroma mientras observaba los árboles moverse empujados por el viento. El otoño se había instalado y todo parecía un poco mas gris que de costumbre.

El día había llegado: nos mudaríamos. Todo lo que Esme deseaba llevar con ella estaba embalado –que no era mucho- y el resto estaba cubierto con sabanas.

Nosotros éramos, tal vez, los que mayor equipaje teníamos con las cosas que habíamos traído de la casa de Edward. Me sentía melancólica y lo acentuaba aun mas el hecho de haber despertado sola.

Sabia que había una buena razón para que el saliera y me dejara, pero no me gustaba. En realidad odiaba amanecer sola. Su presencia era una necesidad, el aire para respirar... sin el me sentía incompleta.

Apareció con su hermosa sonrisa para dedicarme los buenos días y me abrace a el como si no lo hubiera visto en años.

-Que sucede? ...Bella? – y retuvo mi rostro entre sus manos como queriendo encontrar la respuesta en mis ojos.

-Estoy un poco triste porque tenemos que irnos. Y la verdad... me desagrada que no estés aquí cuando despierto. – sonrió y me beso levemente los labios


-No puedo prometerte que estaré siempre que despiertes, pero lo intentare. Y en cuanto a mudarnos piensa que es una forma de acercarnos a concretar nuestros sueños. Nos casaremos pronto! – y acaricie su mejilla

-Y me convertirás en tu compañera por el resto de la eternidad! – y una sombra cruzo por sus ojos que no me gusto – O es que ya estas arrepentido? – y el pánico me invadió – Tal vez...

-Bella, por supuesto que no estoy arrepentido... Como se te ocurre! Tu conversión será la cosa mas inmoral y mas egoísta que haya cometido en toda mi existencia. El solo pensar que estarás conmigo por siempre me brinda una enorme felicidad!

Y me incline para besarlo. Nuestros labios abiertos y serenos se saboreaban, tiernos. Quería aprovechar a besarlo porque no tenia idea cuanto tiempo llevaría nuestro viaje y, tal vez, no tendríamos nuestra sesión de mimos nocturnos.

Enrede mis dedos en su pelo y acaricie su nuca. Tomo las mantas, con las que cerro sus brazos a mi alrededor, y se tumbo para dejarme sobre el, mientras el beso se intensificaba.

Sus manos heladas recorrían mi espalda y odie las estupidas mantas que me separaban de su cuerpo. Me senté sobre el y me volví a inclinar para besarlo una vez mas. Se sonrió sobre mis labios y murmuro "No deberías hacer eso". Yo también me reí mientras besaba su cuello y el lóbulo de su oreja cuando pregunte "Por que no?". Volvió a reir y me respondió en el oído "Porque a pesar de todo, sigo siendo un hombre".

Nos giro rápidamente para dejarme sobre mi espalda mientras me hacia cosquillas. Yo reía sin parar, convulsionando ante sus dedos como plumas mientras el también reía. Amaba escucharlo reir!

Desde algún punto de la casa escuche a Alice llamar a Edward. Nuestro tiempo había terminado. El levanto la cabeza, atento, y asintió. "Debo dejar que te prepares para el viaje. Vístete, que iré a prepararte el desayuno"

Y no pude mas que tomar su camisa y volverlo a besar con toda la pasión que bullía en mi, a la que respondió con las mismas ganas. Como haríamos para aguantar 6 meses? Tal vez pudiera lograr que ese tiempo se acortase. Veremos!

Se despego de mi, riendo con ganas y salio de la habitación. Me vestiría ya para salir de viaje: pantalones cómodos, suéter y mi abrigo seria suficiente. Me bañe y ate mi pelo en una coleta baja.

Mire la habitación y poco quedaba para meter en el baúl. Puse mi camisón, mi bata y mis pantuflas en una bolsa porque es lo que recién me había quitado y lo deje en su interior. Mire en el baño y lo poco que había lo deje en mi bolso de mano. Observe bien el cuarto y encontré que se me olvidaba "Orgullo y prejuicio" sobre la mesa de noche. También a mi bolso. Así que baje tranquila a desayunar.

Mi príncipe me aguardaba y mientras me alcanzaba mi te, lo volví a besar dándole los buenos días. Alice nos reto diciendo que ya eran suficientes mimos por el día de hoy y nos reímos.

La mañana trascurrió rápido, ya que solo restaba ordenar la cocina, guardar en una caja con la comida que aun quedaba y sacar la basura. Eso era todo. Para mi sorpresa, ya estábamos preparados para partir.

A las diez de la mañana los autos quedaron listos, las cosas acomodadas, y Alice y Jasper nos aguardaban ya en su auto. Edward se quedo esperándome mientras daba un ultimo vistazo a la casa. A pesar de que no estuvimos aquí mucho tiempo le había tomado cariño: había sido el primer lugar lleno de paz que habíamos disfrutado juntos en este año, lejos de todos los problemas y los peligros.

Edward tomo mi mano, salimos de la casa y la cerramos. Subimos al auto e iniciamos el viaje hacia nuestro nuevo hogar, que esperaba lo fuera por mucho tiempo.

Tenia muchas expectativas. Cosas importantes sucederían en Forks: terminaría el instituto, me casaría e iniciaría una nueva vida con el hombre que amo. Mi análisis cambio mi humor y pase de melancólica a entusiasmada. Edward lo noto de inmediato y me acaricio la mejilla mientras me regalaba una gran sonrisa.

El viaje no fue tan tedioso. El camino era boscoso y húmedo. Me alegro que estuviera gris y nuboso para viajar de día, y así poder ver los paisajes que nos salían al paso. Me dormí por un momento, pues todo era muy sereno. Me desperté al cruzar un puente. El auto temblequeaba sobre sus tablas y ahí estaba el cartel. Estábamos en Forks!

El pueblo era sencillo y aparentemente de gran movimiento. Por lo visto, la industria maderera era la que movía la economía del lugar. Algunos hombres que conversaban con sus mamelucos y sus camisas a cuadros detuvieron su conversación a nuestro paso. Claro! Los nuevos vecinos serian siempre tema de conversación. Si supieran!

Seguimos al auto de Jasper en todo momento, ya que Alice era la que lo guiaba para llegar a casa. Dejamos la carretera para entrar en un sendero rodeado de bosque. Era muy frondoso y olía maravillosamente. Y a continuación los árboles se abrían para formar un camino que llevaba a una casa blanca y enorme al final de el. Habíamos llegado!

Esme y Carlisle junto a Rosalie nos esperaban en la puerta. Estacionamos los autos enfrente a los garages que tenia la propiedad, contigua a la casa. Wow! Era impactante!

Baje entusiasmada a abrazar a Esme primero y a Rosalie después. El reencuentro familiar fue alegre y ameno, como siempre. Entramos a la magnifica casa y no podía creer su elegancia.

Rosalie tomo mi mano y me llevo de tour. El comedor, la cocina y el primer piso. Vi el despacho de Carlisle, su habitación, la de Esme y Carlisle y la de Jasper y Alice... Pero no estaba la nuestra. La mire extrañada y ella pareció leer mi mente porque se rió y me hizo señas para que la siguiera.

Subimos una escalera mas y en el segundo piso estaba la sala de música: un habitación muy grande, con repisas llenas de libros y discos, un gramófono, un juego de sillones Luis XV y un bellísimo piano de cola. El lugar emanaba armonía.

Me llevo de la mano al final del pasillo y cuando abrió la puerta no podía creer lo que veía. "Esta es la habitación para ustedes" dijo Rosalie. Los ojos no me daban para admirarla

El cuarto era hermoso! La cama de madera tenia unos postes torneados bellamente. Toda la habitación estaba empapelada en un papel claro que tenia un minúsculo patrón en un tono canela. Una bella alfombra enorme cubría el piso y en el fondo un ventanal de varias hojas que daba a un balcón. A los pies de una chimenea enfrentada a la cama había dos sillones de terciopelo verde suave. Eran perfectos para leer y conversar. Aunque lo mejor era el techo: la lámpara de color fucsia iluminaba una roseta pintada, generando en la habitación un leve tono purpúreo. Cerraba el conjunto la ropa de cama clara y los almohadones en los tonos del cuarto. Era una habitación peligrosa para mi porque todo me hablaba de pasión. Pero al mismo tiempo era calida y armoniosa. Sentí unas manos rodear mi cintura y me acurruque en sus brazos. Estaba feliz!

"Debemos bajar, Carlisle necesita hablar con nosotros. Es... urgente" Lo mire preocupada y su rostro me demostraba lo mismo. Bajamos tomados de la mano y toda la familia estaba sentada en el comedor.

Parecía una sala de consejo e imagino que así oficiaría, ya que en esa casa nadie comía... excepto yo y por ahora.

-Bien familia, me alegra que estemos todos juntos aquí. Tengo novedades de todo tipo. Primero las agradables... – dijo Carlisle. Esme se acomodo en la silla y nos observo feliz. La familia había crecido y mucho.

-... Bueno, el lunes próximo iniciaran las clases en el instituto. Este jueves deben presentarse para un examen de nivel para que les asignen sus materias. No tengo que decirles que son, para todos, los hijos adoptivos del Cullen y su esposa, a excepción de Bella. Ella también es huérfana igual que ustedes, pero es la ahijada de Esme. Por eso su apellido no es Cullen... aun – y todos reímos. El aspiro para seguir

-... trabajare en el hospital local ya que no tienen quien cubra las guardias y haga cirugías traumatológicas. Este pueblo tiene una alta tasa de accidentes contuso cortantes. Bueno, eso es lo menos importante para ustedes! Hubiera propuesto a Edward para pediatría, pero se que no le atrae la profesión, así que lo siento, hijo, pero volverás a estudiar! – y todos rieron.

-... Y ahora las noticias no tan agradables: Bella, mañana iras conmigo y con Edward a una reunión muy importante.

Y así nos enteramos de todo el problema con la tribu Quileute. Estaba asustada. En mi caía toda la responsabilidad para que finalmente pudiéramos seguir con nuestros planes, además que afectaba a toda la familia. No podía creer mi suerte... Otro obstáculo a vencer! Me dio terror el fallar y me aferre a la mano de Edward como si no la encontrara. El la acariciaba con su pulgar tratando de darme contención.

-Por que no he tenido una visión de todo eso? –Alice también estaba preocupada.

-No lo se, pero he meditado sobre ello. Se me ocurre que debes evaluar como trabaja tu don y el hecho de que los quileutes se transforman o transformaban en lobos. Tal vez esa dualidad afecte tus visiones. – y ella asintió.

-Carlisle... Que voy a hacer allí? Que les voy a decir? - Pregunte nerviosa.

-Pequeña, no te preocupes! Solo debes ser tu misma y responder todo lo que te pregunten. Ellos no te harán daño.

-Pero les pueden hacer daño a ustedes.- pensé en un minuto y respondí decidida – Iré sola.

-No, bajo ningún concepto... No! – dijo Edward

-Por que tiene que ser en la reserva? Por que no en un lugar neutral? – y mis nervios provocaban que mis preguntas se escaparan de mi boca sin pensar... estaba asustada – En el lugar donde se encontraron, a orillas del río... Ahí es un lugar neutral, no? – todos miraron a Carlisle esperando respuesta.

-No es mala idea! Yo también puedo ir para suavizar el ambiente mientras la presentación procede. Seria solo una precaución!

-Esta bien – respondió Carlisle y suspire aliviada – No esta mal lo que dice Bella. Vaya pequeña, me sorprendes! Creo que hasta ahora no te lo he dicho, pero la ocasión me parece apropiada, estando todos juntos: Bienvenida a la familia Cullen, Bella! – y la sonrisa no entraba en mi cara.

Los hombres se pusieron de pie, alertas. Alice y Rosalie pasaron a tener cara de asco. Algo sucedía. Carlisle se encamino a la puerta, seguidos de Jasper y Edward. El se giro y mirándome fijo a los ojos dijo "Tu te quedas aquí". Y sonó a una orden, cosa que no me gusto. Esme, Alice y Rosalie salieron tras ellos mientras me asomaba a la ventana.

Afuera había un muchacho altísimo, moreno y enorme, vestido solo con unos pantalones a la rodilla de mezclilla oscura y sin camisa. Su cabello era largo y lo llevaba atado en parte, transmitiendo una imagen primitiva. Note sobre su hombro un dibujo... un tatuaje oscuro y circular. El clavo sus ojos sobre mi y me asusto. Eran muy intensos y muy oscuros. Inclino su cabeza al observarme de una forma extraña. Me apresure a salir de la casa y a acercarme a Edward. El clavo la mirada en mi de una forma feroz, pero tomo mi cintura y me aproximo a su cuerpo. El muchacho nos miro aun con mayor intensidad, para luego serenarse y saludar con una inclinación de cabeza.

-Buenas tardes. He venido de parte de Billy Black para acordar el encuentro. El le propone que sea en el día de mañana. Esta usted de acuerdo?

-Buenas tardes, Sam. Si, dile a Billy Black que nos veremos mañana al inicio del crepúsculo. Nos encontraremos junto a la sequoia sobre el río. Si es que le parece adecuado. Si no lo esta, me lo harás saber?

-Si, por supuesto. Nos veremos mañana, entonces. – Carlisle Asintió

-Hasta mañana , Sam!

El corrió ágil y veloz, y se perdió entre los árboles en un instante. Todos entramos a la casa y Edward me soltó automáticamente. No me miro ni me dirigió la palabra. Estaba enojado!

Si... sabia que no había hecho caso pero por que tenia que quedarme atrás? El no tenia intención de hacerme daño... o si? Eso es lo que Carlisle había dicho.

-Me iré a cazar. Jasper... vienes? – Jasper miro a Alice y ella asintió con la cabeza.- Carlisle? – la voz de Edward salía ronca y baja. Me acerque a el y me miro intensamente. Era un obvio rechazo a mi acercamiento.

-Volveremos en un rato – dijo Carlisle, acariciando la mejilla de Esme.

Salieron en un segundo y yo me quede ahí parada, con los ojos llenos de lagrimas. Me desplome en el sillón y las chicas se sentaron conmigo. Todas trataron de consolarme pero no había manera.

Me disculpe y me retire a nuestro cuarto. Me senté junto a la chimenea a llorar cuando a la puerta llegaba Esme con mi baúl y mi bolso. La apoyo junto a la ventana, se acerco y acaricio mi cabeza. "Tienes hambre? Te preparo algo de comer?" A lo que respondí con una negativa con mi cabeza mientras sollozaba. Ella dejo un beso sobre mi coronilla y salio cerrando la puerta.

Saque mi ropa de cama y mis pantuflas y fui a darme un baño. Estaba agotada y dolida por su reacción.

Al salir, encontré la chimenea encendida, tal vez Esme o Rosalie lo habían hecho. Me senté en uno de los sillones frente al fuego a esperar. Se había hecho de noche. Esme volvió a insistir con mi cena y le agradecí pero respondí que no podía comer. Tenia el estomago hecho un nudo. Me acosté y lo espere, pero me dormí sin recordar la hora.

Al despertar, todavía el sol no había terminado de salir, y el cielo comenzaba a cubrirse de tonalidades violetas y moradas. Levante la cabeza y lo descubrí sentado en el sillón junto a la chimenea, vigilando mi sueño como las primeras noches que pase en la casa de Chicago. Salte de la cama y me zambullí en sus brazos.

-Perdóname! Se que tendría que haberme quedado dentro de la casa... Lo siento! – dije mientras acariciaba su nuca y enterraba mi nariz bajo su barbilla. Le llevo unos cuantos segundos devolverme el abrazo. Así de enojado estaba.

-Tu entiendes la dimensión de lo que haz hecho?

-Pero el no quería hacerme daño. Tu reacción...

-No te das cuenta cuanto me asusta que te suceda algo? Como me afecta el que no pueda protegerte como debo? Quien podía saber si había mas hombres ocultos tras el, o tal vez dispuestos a atacarte con un arma? – y se me llenaron los ojos de lagrimas.

-Lo siento... de verdad! – y me dolía profundamente la angustia que me transmitía su voz.

-Bella, te han separado de mi en tres ocasiones y en las tres creí que me volvería loco... No tienes idea como me siento cuando no puedo protegerte! Formalidades o no, tu eres mi mujer, mi compañera... Tu eres mi vida, Bella!

Lo bese de manera voraz y me respondió de igual forma. Era un beso nervioso, exasperado, pero lleno de necesidad, de desesperación. Nos quedamos así abrazados sin decir nada hasta que el sol termino de salir y debíamos estar listos para enfrentar lo que el día nos depararía. La pelea había terminado y era la primera vez que nos enojábamos.

Me cambie y bajamos para que el día transcurriera como cualquier otro. Aunque el nerviosismo en mi interior se hacia cada vez mas intenso.

Cuando llego la hora, Edward me cargo en su espalda y toda la familia concurrió para hacerse presente en el encuentro. Carlisle opinaba que ellos debían vernos a todos para conocernos, y así evitar malos entendidos en el futuro.

La carrera al río caudaloso fue una aventura. El paisaje era hermoso y saltar sobre el río tras la casa había sido divertido. Aunque mi estomago estaba revuelto y lleno de mariposas.

La diversión termino cuando llegamos al punto de encuentro y como fantasmas se corporizaron ante nosotros al otro lado. Su aspecto era similar al de Sam, algunos ancianos, otros mas jóvenes aunque el no estaba allí. Algunos de ellos llevaban como una capa de piel con cabeza de animal.

Carlisle me hizo señas para que me adelantara y a Edward le costo mucho desprenderse de mi mano. Caminamos sobre el increíble puente natural, ancho y áspero que formaba el árbol tumbado. Había sido calado para que contuviera con seguridad a quienes caminaban sobre el.

Carlisle me dejo en el centro y retrocedió unos pasos. Trague sonoramente y creí que me desmayaría por la tensión. Un hombre de cabello largo y con algunas canas se acerco a mi. Su cara era severa pero sus ojos no... reflejaban bondad y curiosidad, pero eran negros como la noche.

-Mi nombre es Billy Black – dijo con voz grave y firme – Como te llamas?

-Mi nombre es Isabella Swan, pero todos me dicen Bella.

-Lo que ellos dicen es verdad? – y me sorprendí al no entender de que hablaba.

-Perdón, pero no se a que se refiere – y el hombre frunció el ceño severo

-Ellos dicen que estas aquí por tu voluntad propia – y esboce una leve sonrisa

-Es verdad

-Por que? Tu sabes que son ellos? – y note que había un silencio agobiante que envolvía mis respuestas.

-Si, se que son y quienes son. Y estoy aquí por voluntad propia. Me casare con Edward y me transformare en uno de su familia, es decir, seré uno de su especie.

-Aun no respondes mi pregunta...

-Cual?

-Por que? – y su mirada se hizo pequeña, evaluando cada uno de mis gestos.

-Vera , en mi vida humana perdí siendo muy pequeña a mi padre primero y a mi madre después. Crecí en un ambiente hostil donde mi padrastro me explotaba y mi infelicidad era enorme. Estaba expuesta a peligros y a ser abusada en mas de una oportunidad. Este ser maravilloso que se convertirá en mi esposo me salvo del ataque de un hombre no solo una vez sino dos, poniendo muchas cosas en riesgo y todo por mi. Jamás me ha hecho daño, todo lo contrario. Solo me ha brindado su protección y su bondad, pero sobre todo su amor. Y respondo ante el y ante ese amor con todo lo que soy... inclusive con mi vida. – el parecía pensativo pero no movía un músculo - Eso responde a su pregunta? – el asintió

-Te comprometerás al igual que ellos a cumplir el acuerdo del que hemos hablado con todo su peso?

-Si, asumo ese compromiso, siempre que ustedes sean conscientes en que sin importar si estamos en Forks o no, yo me convertiré en una Cullen pronto. Y a eso no estoy dispuesta a renunciar. Sin el mi vida no vale nada. Entonces... Que es vivir? Humana o no, nos pertenecemos de una forma que nadie podría entender. Y eso es lo importante!

El no respondió una palabra. Giro su cabeza y el resto de los presentes asintieron. El silencio era aun mas abrumador y la adrenalina que me causaba todo esto habían dado frutos en mi exposición.

-Nos reuniremos con el consejo y enviaremos el acuerdo con Sam. Si lo aceptan, volveremos aquí pasado mañana, el día de la gran luna llena para firmarlo

Así giro sobre sus pies, y en cuanto llego a tierra firme al otro lado, sus cuerpos se volvieron sombras entre la vegetación. Había desaparecido ante mis ojos como si fueran parte del bosque.

Carlisle tomo mi mano y me saco del puente para reunirme con la familia. Todos me abrazaron y cuando Esme se acerco a mi, me dejo un beso en la frente y dijo "Estaré mas que orgullosa de que te conviertas en mi hija". Sus palabras me conmovieron profundamente, lo mismo que su abrazo. Edward se acerco a mi y me envolvió en sus brazos. Mientras me abrazaba solo dijo en mi oído "Te amo".

Volvimos a casa tan rápido como habíamos llegado, pero nosotros nos quedamos rezagados mientras nos sentamos a la orilla del río tras la casa, a mimarnos y a terminar de disfrutar el atardecer.

Hola a todos!


Y que me cuentan? Parece que las cosas van tomando su cauce y volvermos a tener calma. Un poco de paz y romance, verdad?


Mil disculpas porque esta semana nos ha sido imposible contestar comentarios.  Les contamos que para nosotras son muy importantes sus comentarios. Son el termometro que nos indica si vamos encaminadas con esta historia. Asi y todo... Gracias por estar ahi  y a todos aquellos que nos leen y que no sabemos quienes son, pero que son siempre bienvenidos.


Esperamos que les haya gustado, les dejamos como siempre fotos y musica y nos vemos el proximo viernes. Perdon... hoy se hizo muy tarde


Besos


Micky y Alice

Acerca del Autor

Nos dedicamos a brindar información a todos los fans de la Saga Crepúsculo. Desde entonces nos hemos encargado de cubrir premieres, eventos, actualizar día a día nueva información sobre el cast. Después de que terminó la épica Saga en Noviembre del 2012, seguimos los proyectos de cada actor como corresponde.
Lee más en: Conócenos

2 comentarios:

  1. Anónimo3/04/2012

    Cada cuanto suben nuevos capitulos? Saludos desde chile!

    ResponderEliminar
  2. Anónimo3/06/2012

    siiiiiiiiii cuando van a publicar otor capìtulo tambien soy de chile saludhitos Conni

    ResponderEliminar

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