Cap 1: Nuestro Destino Es Estar Juntos

CAPITULO 1

INVITACION

Habían pasado ya dos años desde nuestra boda, nuestra felicidad era inmensa, y nuestro amor desbordaba, Vivia con Edward y mi bella hija: Perla. Quien cumpliría su primer año de vida, pronto, al igual que mi hermana, el 20 de Mayo.

Al haberme yo casado con Edward, me fui a vivir con el en una bella casa ubicada en uno de los mas bellos y pacificos claros de Forks , la cual fue el regalo de bodas por parte de la familia Cullen.

Mi adorada hermana Carolina, tenia ya diecisiete años. Cumpliria su mayoría de edad en solo cuatro meses. Y con el tiempo, termino por acostumbrarse a las compras continuas de Alice y a las locuras y gracias de Emmet, quienes la veian ya, como una hermana.

Su pasatiempo favorito ahora, era visitarme. Le encantaba pasar tiempo con Perla, jugar con ella, pasearla en su coche, cantarle y adornar sus sueños con hermosos cuentos, de esos en los que el príncipe, siempre se queda con la princesa, y viven felices para siempre.
Nuestra vida, era perfecta.

El sol se ocultaba poco a poco, en una tranquila tarde de Jueves. La voz de mi hermana capto mi atención de repente

- Bella - me llamo mientras yo alzaba la vista del grueso libro que tenia en las manos

- ¿Qué sucede?- pregunte cerrándolo

- He estado pensando, que todos conocen a Perla, excepto Jacob- comento recordándome a mi amigo

Hizo una pequeña pausa de segundos y continuo

- Desde la boda, no hemos vuelto a verlo, ¿porque no lo invitamos a cenar y asi de paso, conoce a Perla?

Medite la pregunta de mi hermana durante algunos segundos, llegando finalmente, a la conclusión de que era una excelente idea.

- Tampoco hemos vuelto a ver a Dalila- dijo mi hermana, interrumpiendo de golpe mis pensamientos

Dalila era la hermana menor de Jacob. La cual ahora tendría, dieciséis años teniendo en cuenta, que Jacob debería tener dieciocho.

- Entonces, ¿Qué dices?- interrogo con una media sonrisa

- Me parece una excelente idea bebe.Ten- dije pasándole el teléfono- llamalos

- Bella, ya te lo he dicho- dijo mientras marcaba el numero- deje de ser ya, una bebe

Lo sabia, pero yo siempre había sido con ella, mas madre que hermana, por lo que Caro era aun, mi bebe.

Sonrei mientras tomaba a perla en mis brazos, y la llevaba a su camita, debía dormir ya.

- Buenas noches, quisiera hablar con Jacob, por favor- pidió mi hermana a la persona que estaba del otro lado de la línea. Enseguida sonrio y su poca timidad se esfumo.

- ¡Jacob!- dijo alegremente- soy Carolina Swan, ¿me recuerdas verdad?

Callo durante un momento y volvió a hablar, mas animada que antes

- Pues me parece estupendo que me recuerdes, porque no tengo tiempo de presentarme de nuevo- rio mirando su reloj- Jake, hemos estado tanto tiempo sin vernos, que debo informarte que Bells tiene una preciosa hija. Pero para demostrarte que no te hemos olvidado, queremos invitarte a cenar mañana. ¿Qué dices?

Hubiera conocido el resto de la conversacion. Pero Caro se alejo con el teléfono en mano hasta la cocina, donde sirvió un vaso de agua y volvió al rato.

- Perfecto, recuerda que la invitación es también para Dalila- bebio un poco de agua y hablo de nuevo- Esta bien, nos vemos mañana, te quiero, Adios.







Antes de poder preguntar, Caro me informo

- Vendran mañana a la 1:30

Torci un poco los labios

- Caro, ¿que persona conoces en todo Forks que cene a las 1:30?- comente

Su expresión pensativa me hizo gracia

- Entonces los invite a una cena temprana mejor conocida como…!Almuerzo!- dijo mientras reia

La mire sonriente. Si, definitivamente, seguía sindo mi bebe. Su risa fue interrumpida por




por la llamada entrante en su celular. Lo tomo rápidamente y contesto.

- Hola Alice- hablo sin dejar de sonreir- no tardo mucho…te prometo que en media hora estoy alla, adiós.

- ¿ Te fijaste ya en la hora?- pregunte, sabiendo que era ya, un poco tarde

- La ultima vez que llege a casa a las nueve, Alice confisco mi auto.

Si, mi hermana ya tenia un auto, un bello obsequio de graduación por parte de Alice, quien aparte de habérselo regalado, se lo quitaba en algunas ocasiones. Sabia que lo hacia, por el bien de Carolina.

- Me voy antes de que Alice venga y me lleve cargada- rio.

Se despidió de mi, le dio a Perla un beso en la frente y dejo saludos para Edward. Quien aprovechaba las vacaciones para visitar a sus tios. Eleazar y Carmen.

Arrulle a Perla, que se negaba a dormir, y no paraba de reir con el nuevo juguete, que le había dado mi hermana, un precioso lobo de peluche. La verdad no se quien se durmió primero, si yo o mi hija, solo se que al despertar, me encontraba en brazos de Edward. Me incorpore suavemente para fiarme en el reloj de mi mesa de noche. La 1:00 am. Mientras Perla soñaba tranquilamente en su cunita, me acomode junto a Edward nuevamente y soñé con los angeles, teniendo al mio, a mi lado.