Cap 7: Futura Señora Cullen

¡AVISO!: Esta historia contiene escenas y lenguaje para adultos, si no te gustan ese tipo de cosas o eres demasiado sensible por favor no sigas leyendo.

Capítulo 7: Night of party

EDWARD POV

Iba caminando por las calles de San Francisco agarrado de la mano (FP) del ser más maravilloso de este planeta, llevábamos 2 horas en San Francisco y hacia muchísimo calor, pues estábamos en las horas más calurosas del día, yo me había puesto mis gafas de sol, unas ray-ban wayfarer negras (FP) similares a las de Bella, aunque ella no las estaba usando ahora.

Habíamos visto algunos de los principales monumentos de San Francisco y Bella estaba encantada, le había fascinado ver Union Square, una de las zonas más conocidas de San Francisco, atravesar Lombard Street, admirar las bonitas casas victorianas de Alamo Squarey pasear por Fisherman's Wharf (FP) .

La verdad es que habíamos venido a San Francisco en muy pocas ocasiones pese a tener una casa para veranear muy cerca de aquí, y en las contadas veces que habíamos estados apenas habíamos hecho turismo así que esta vez quería que fuera distinto y que Bella y yo pudiéramos disfrutar un poco de la ciudad porque realmente era hermosa.

Twin peaks (FP) se encontraba a unos cuantos kilómetros de aquí, y Bella había insistido en ver la ciudad desde el mirador así que fuimos a buscar un taxi, el cual nos costó muchísimo encontrar pues casi todos los taxis estaban ocupados, pero con suerte y 1 hora después conseguimos llegar al mirador, y honestamente había merecido la pena, tanto Bella como yo nos quedamos maravillados a ver la belleza de ciudad que era San Francisco.

-¡Wow! ¡San Francisco es impresionante! Nunca pensé que fuera tan grande-dijo Bella haciendo una foto (FP) nunca había observado esta ciudad desde tan alto, y parecía una niña entusiasmada y alegre jugando con su juguete preferido, ¡me parecía tan adorable siempre!-Es una ciudad muy bella.

-Ummmm…..te equivocas preciosa, es cierto que San Francisco es muy bonito, pero créeme ya le gustaría a esta ciudad poseer la belleza que tú tienes cariño-la alague dándome el placer de ver como rápidamente sus mejillas tomaban un tenue color rosado que la hacía parecer aun más hermosa.

Reí abiertamente ante su reacción y la cogí de la cintura para acercarla a mi cuerpo.

-Deja de decir tonterías y ponte que vamos a echarnos una foto-dijo mientras volvía a sacar la cámara digital.

Yo le sonreí y me coloque junto a ella para hacernos la foto, Bella estiró una de sus manos para que la cámara pillara nuestras cabezas por completo, en el fondo salía la ciudad de San Francisco con un cielo anaranjado, pues ya comenzaba a atardecer, justo antes de que Bella pulsara el botón de la cámara y saltara el flash gire mi cara y mordí suavemente su mandíbula, a lo que ella sonrió segundos antes de echar la foto (FP).

-¡Eres un payaso! no tenemos ninguna foto en la que no salgas haciendo tonterías-me acusó riendo mientras observaba la foto que nos habíamos tomado en la pequeña pantalla de la cámara fotográfica.

-No me culpes a mí de eso, tú eres demasiado irresistible cariño, además estas fotos son más divertidas no me lo puedes negar-dije riendo

-ya…ya… tu siempre tienes argumento para todo ¿eh, Cullen?-dijo y yo volví a reír fuertemente- la única fotografía medio decente que tenemos es la de mi graduación (FP), porque por las demás… -sonrió al dejar la frase incompleta, pero sabía que lo decía de broma, todas las fotos que teníamos representaban momento increíbles y divertidos que habíamos pasado juntos.

Sonreí al recordar la foto de su graduación de fin de carrera, ese día iba increíble, deslumbrante, totalmente asombrosa, tal y como ella era, simplemente preciosa.

Inicio flash Back (hace un poco más de dos meses aproximadamente)

Hoy se graduaba Bella, hacia una semana había terminado la universidad y hoy estaba a punto de graduarse en "Filología Inglesa", hoy se cumpliría su sueño y yo estaría a su lado.

Alice, con ayuda de Rose, había organizado una gran fiesta en nuestra casa, yo creí que mis padres se iba a oponer, pero me equivoque ya que cuando Alice propuso la idea mi madre fue la primera que aceptó inmediatamente, todo debía salir bien, Alice había llamado a Renee, Phil, Charlie, Sue, Jacob y Leah,la hermana de Jacob y como consiguiente hermanastra de Bella.

Leah era una chica de piel morena y delgada, se parecía mucho a Jake, sobre todo en la personalidad, su carácter era fuerte pero era un gran persona, pese a todo no la veíamos mucho ya que era modelo, y actualmente trabajaba en Paris, aunque en ocasiones lo hacía en Italia, no tenía un lugar fijo en realidad. Ella era un chica hermosa por lo que tenía un futuro asegurado en esa profesión, por ahora no tenia novio, odiaba las relaciones serias y por eso las evitaba, prefería romper corazones, salir y divertirse.

Según me había dicho Bella en una ocasión, Leah nunca se había enamorado profundamente, y aunque sí había estado en relaciones, muy pocas he de decir, de varios meses no sabía lo que era amar realmente porque ella misma nunca se había dado la oportunidad de hacerlo.

Hoy toda la familia de Bella vendría y ella ni se lo imaginaba, ya que en un principio ella pensaba que solo vendría Renee pues Charlie tenía que trabajar y no había conseguido cambiar su turno, pero Alice no permitió que eso sucediera y se las ingenio para hacer que vinieran todos.

Iba en mi coche camino al piso de Bella para recogerla, ella vivía cerca de Lincoln Park así que solo me tomo 15 minutos llegar a su edificio.

Alice estaba especialmente emocionada porque había diseñado un vestido para que Bella lo usara hoy como regalo de graduación, aunque le había costado lo suyo que Bella lo aceptara pues incluso tuvo que rogarle para que finalmente aceptara ponérselo, ¡ella y su absurda negación a recibir regalos "innecesarios"! Definitivamente ella iba a tener que abandonar esa tonta manía suya cuando se casara conmigo, porque estaba dispuesto regalarle el mundo y más.

Yo vestía por completo de negro hoy, ya que me había puesto un traje negro entero, con una camisa y una corbata del mismo color que también había diseñado Alice para su colección masculina de este año.

Primero iríamos a la universidad, donde el director echaría el discurso de todos los años y daría los diplomas a los graduados en "Filología Inglesa" y más tarde iríamos a cenar todos juntos, tanto la familia de Bella como la mía a un restaurante de Chicago donde papa ya había hecho reserva, y para finalizar la noche iríamos a la fiesta en casa de mis padres y que Alice y Rose habían preparado con tantas ganas.

Aparqué el coche en la puerta del edificio donde vivía Bella y subí hasta la 3º plantas para después tocar el timbre hasta que Ángela, su compañera de piso, la cual también se graduaba esta noche, me abrió la perta.

-Hey Edward, ¿Cómo estás?-pregunto educadamente sonriendo.

Ángela era una de las mejores amigas de Bella, y por lo que había hablado con ella era una chica con un corazón enorme.

-Hola Ángela, bien ¿y tú?-pregunté.

Al parecer Ángela estaba casi arreglada porque llevaba un vestido blanco hasta la rodilla, palabra de honor, con un lazo negro en la cintura, y unos zapatos grises muy claros con tiras negras que combinaban con unos pendientes largos color negro visibles gracias al recogido de su pelo (FP).

-Algo nerviosa-sonrió-pero pasa dentro, Bella está terminando de arreglarse

-Gracias-dije entrando-y no te preocupes Ángela todo va a salir bien-mis palabras sonaron tranquilizadoras.

No entendía por qué todas las chicas se ponían nerviosas en este tipo de cosas. Seguro Bella también lo estaría.

-Eso espero-Angela cerró la puerta de la entrada

-¿Esta mi hermana aquí?-pregunte, ya que ella se había empeñado en venir y someter a Bella y Ángela a sus torturosas sesiones de belleza como solía llamarlas Bella.

-No, se ha marchado hace media hora ya que tenía que vestirse y maquillarse aun.

-¿Y Bella y tu habéis sobrevivido?-bromee caminando por el pasillo seguido de Angela

-Sí-su tono era gracioso- aunque creo que ha faltado poco para que Bella tirase a Alice por la ventana-dejo escapar unas risitas

-Quizá eso le habría sentado bien a Alice-continué su broma mientras llegábamos a la sala de estar y ella volvió a reír

- Voy a terminar de arreglarme yo también, ponte cómodo, ya sabes que estás en tu casa Edward-aseguró desde el umbral de la puerta de la sala de estar

-Gracias Ángela, estaré aquí entonces esperando a Bella.-comenté mientras me sentaba en el sofá y tomaba el mando de la televisión para encenderla y verla mientras Bella terminaba de arreglarse

-Vale-dijo finalmente y entonces desapareció por el pasillo

Estuve viendo TV por un buen rato en el salón, el cual era un salón-comedor , no era muy grande en realidad pero sí que era muy cómodo y sobrecogedor, las paredes eran color azul pálido y las cortinas eran blancas, en un lado había una pequeña mesa para comer rodeada por 4 sillas, en el otro lado, donde yo me encontraba ahora, había 1 sofá tipo chaise longue(*) color blanco con cojines verdes y rojos alargados, en frente estaba el mueble en el que se encontraba la TV y en el medio había una alfombra color naranja sobre la cual había una mesita de de cristal con patas de acero en donde ahora había una taza de café vacía y el ordenador portátil de Bella apagado.

Aquí, en este sofá en forma de "L" me había quedado dormido muchas noches abrazado a Bella cuando quedábamos para ver películas, habíamos tenido tantas conversaciones y tantas risas compartidas en estas cuatro paredes…

Salí de todos esos momentos en los que me estaba perdiendo cuando sonó el timbre, y ya que ninguna de las chicas tenía intención de abrir fui yo a ver quién era.

-Hola Ben-saludé cuando abrí la puerta.

-¡Hey Edward! ¿Qué tal?-preguntó como siempre alegremente Ben. Él era el novio de Ángela y llevaban juntos 2 años.

-Bien y ¿tu?-pregunté palmeando su hombro amigablemente.

-Bien también-sonrió-¿aun están encerradas en la habitación?-pregunto rodando los ojos y yo asentí riendo

Ben era fotógrafo, terminó sus estudios hace un par de meses, y ahora estaba trabajando en una revista como fotógrafo profesional. La fotografía era un arte para él, así que conseguir hacer de cualquier detalle una gran belleza, su trabajo hacia que las personas captaran los pequeños detalles que no vemos día a día.

Hoy llevaba un traje gris, una camisa blanca y una corbata negra, la cual combinaba con sus zapatos negros. Iba muy elegante también.

Ambos estuvimos un rato charlando en el salón sobre deporte, concretamente sobre futbol ya que estaban retransmitiendo un partido de futbol americano, jugaban los "Chicago bears" (*)y eso atrajo nuestra atención ya que ambos éramos seguidores de ese equipo, pues incluso muchas veces solíamos ir a verlos jugar en Soldier Field (*).

Angela apareció un poco después por la puerta

-¿Cuánto le queda a Bella?-pregunte extrañado ya que ella no solía tardar tanto en arreglarse

-No sé, pero al parecer estar teniendo lugar un combate ahí dentro-dijo señalando la habitación de Bella-entre su pelo y ella-dijo sonriendo y yo fruncí el ceño sin entender bien.

-Voy a ver si pongo fin al combate entonces, o llegaremos tarde-me excuse en realidad para dejar solos a Ángela y Ben, ella me sonrió y yo me dirigí hacia la habitación de Bella, de lejos pude escuchar como Ben le decía a Ángela lo hermosa que estaba.

Toque la puerta repetidas veces

-Si eres Ángela puedes pasar, si eres Alice lárgate-gruño al otro lado de la puerta.

-Y ¿si soy Edward?-pregunté, aunque no hubo respuesta, solo pude escuchar como corría de un lado hacia otro.

-Si eres Edward, siento decirte que cuando pille a tu hermana la voy a matar-dijo maldiciendo, y aunque yo intente aguatarme la risa para que no me escuchara creo que no lo legre

-¿Te estás riendo? Porque si es así, tú también saldrás herido, te lo prometo-amenazó

-No, claro que no-dije intentando tragarme las carcajadas que amenazaban con escaparte-y ahora ¿puedes abrir la puerta?

-Un momento-y volvieron a escucharse sus pasos de un lado hacia otro hasta que finalmente quito el pestillo a la puerta y pude entrar, y su habitación estaba umm ¿diferente? La cama ni siquiera se veía, ya que estaba tapada con un montón de ropa, y algunos que otros zapato, había un par de prendas interiores en el suelo, más zapatos y un cepillo para peinar el cabello.

-¿Qué ha pasado aquí?-pregunté. Nunca había visto el dormitorio de Bella tan desordenado y quise reír ¡parecía que acababa de pasar un fuerte tornado por aquí!

-Ha pasado que tu hermana se ha empeñado en ordenarme el armario mientras se me secaba esas cosas asquerosas que se ha empeñado en echarme en la cara-yo ahora no pude evitar reírme por lo que me gane una mirada asesina de su parte.

Ahí fue cuando me quede contemplándola con la boca abierta, ella estaba asombrosa, llevaba un vestido rojo largo con detalles geométricos negros, el vestido se abría por ambos lados dejando ver sus espectaculares piernas, las cuales se embellecían aun más gracias a unos altos tacones descubiertos color negro. El vestido era de cuello redondo y hombreas anchas aunque estas se unían formando una sola que caía por su espalda dejado al descubierto gran parte de esta hasta volver a unirse con el vestido, llevaba dos pulseras negras a ambos lados de las manos, su pelo estaba recogido en un disimulado y desarreglado recogido que dejaba un par de mechones alrededor de su cara la cual estaba maquillada con un maquillaje no muy cargado (FP) ¡Dios mío! ella simplemente se veía hermosa e increíble.

-Cierra la boca Cullen, vas a hacer un charco en la habitación, y ya vamos lo suficientemente tarde como para entretenernos limpiando.-dijo sonriéndome

¡Oh sí! Ella sabía que lucía genial y me encantaba.

-Wow cariño, es que estás jodidamente impresionante-ella sonrió aun más. Diablos quería comérmela a besos ahora mismo

-creo que a pesar de todo Alice ha hecho un buen trabajo, los elogios se lo debes a ella en realidad-hablo mientras se volteaba y comenzaba a buscar algo entre el montón de la cama dándome una agradable vista de su redondo y respingón trasero.

-En parte, pero preciosa tu eres hermosa por naturaleza-murmuré aun con la vista en su culo ¿qué ropa interior estaría usando?

¡Basta Edward! ¡No puedes llegar con una erección a su gradación! Intenté hablar de algo para alejar esos pensamientos

-Bueno, según Ángela, tú y tú cabello estabais teniendo una interesante pelea, pero yo lo veo perfecto.-murmure porque en realidad ella estaba perfecta.

-La culpa es de Alice-volvió a gruñir dándose la vuelta para mirarme- me obligo a echarme como 10 mascarillas diferentes en el pelo y ahora está demasiado suave y mis ondas no se me marcan-dijo indignada

-Estas exagerando, tú, tu pelo y tus tirabuzones estáis perfectos y listos para marcharnos.

-He escuchado a Ben en la puerta cuando ha llegado ¿Ángela y él se han marchado ya?-preguntó recorriendo con sus ojos toda la habitación ¿qué andaba buscando?

-No estoy seguro, antes de venir aquí estaban en el salón.

-Vale, déjame encontrar mi bolso de mano y nos vamos-dijo mientras volvía a revisar en la cama para luego tomar algo que había debajo de todo el montón de ropa.

Al parecer Ángela y Ben ya se habían marchado así que decidimos irnos ,después de cerrar la puerta del piso y tardar más de lo normal en llegar a la universidad debido al tráfico, conseguimos hacerlo, por lo que ahora nos encontrábamos en la puerta de la universidad esperando a mi familia y a la suya.

Cuando llegaron, Bella no podía creer lo que sus ojos veían, rápidamente su madrela abrazo fuertemente

-Bella, cariño, estas tan guapa cielo-dijo mientras se separaba de ella para verla completamente-¡Vaya! Edward, cariño tu también estas muy guapo-dijo dándome un cariñoso abrazo.

-Hola Señora Dwyer-dije saludándola mientras reía, ella era absolutamente afectiva y tierna con todo el mundo.

-¡Oh, dios Edward! te he dicho mil veces que no me llames así, me haces sentir vieja-me regaño sonriendo

-Lo siento Renée, es la costumbre-dije sonriendo mientras me encogía de hombros.

Renée llevaba un vestido color champagne y unos altos tacones color marrón (FP), llevaba el pelo suelto, y un maquillaje suave que resaltaba sus ojos verdes claros, porque aunque parezca increíble Renée era totalmente diferente a Bella, ni siquiera parecía su madre, ya que Bella se parecía muchísimo más a Charlie.

Después de Renée vino su marido Phil, acompañado por Charlie y Sue que llevaba un vestido por la rodilla color lila atado a un solo hombro (FP), también venían mi padre junto con mi madre, la cual llevaba un vestido gris de media manga con un cinturón fino color negro y unos tacones altos también negros (FP), acompañada de Alice que vestía un vestido corto rosa chicle atado a un solo hombro junto con unos altos tacones negros que eran del mismo color que el bolso que llevaba en su mano (FP).

Jasper y Emmett, que vestían traje al igual que mi padre, Jacob y yo, venían detrás acompañados por Jacob y Leah, la cual llevaba un vestido corto color negro muy ceñido con cortes romboidales en la cintura cubiertos por te una fina y prácticamente trasparente tela, acompañado únicamente de un extraño, pero muy a su estilo sin duda, collar plateado en forma de pico junto con altos tacones de igual color gris (FP), llevaba su largo y oscuro pelo suelto, y finalmente Rosalie que iba charlando animadamente con ella y con Vanessa, llevaba un vestido caído estampado, acompañado de un bolso de mano negro, un brazalete negro y unos altos tacones negros (FP), junto con un maquillaje leve y su melena rubia recogida en una coleta despeinada pero que la hacía lucir muy bien, tanto era así que podía ver como Emmett no dejaba de babear por ella.

Por último Vanessa, la novia de Jacob, llevaba un vestido azul estampado con florecillas acompañado por unos tacones dorados y un bolso de mano dorado (FP).

Cuando todos nos saludaron, entramos al gran salón de actos de la universidad y tomamos asiento, Bella se fue junto con Ángela y un par de amigas y amigos, a los que conocía simplemente de vista, para prepararse detrás del escenario. La presentación, nombración de los alumnos graduados y las despedidas más los agradecimientos por parte del profesorado y director duró 2 horas y media, así que cuando todo terminó salí literalmente corriendo a ver a Bella para felicitarla antes de que toda la familia empezara a darle sus felicitaciones y abrazos.

Cuando llegue estaba recogiendo algunas cosas de su taquilla, aún llevaba la toga negra y la banda puesta, sin embargo se había quitado el birrete, el cual sostenía en una de sus manos junto con el diploma que el director había dado a cada uno de los graduados. Me acerque lentamente a ella y la abracé con ternura por la espalda.

-Feliz graduación-dije depositando un beso en su cuello-ya eres licenciada en "Filología Inglesa"- ella se volteó y me sonrió

-Gracias, gracias por todo, que mi familia este aquí es muy importante para mí-dijo-ha sido el mejor regalo de graduación que podría haber tendido-rodeo mi cuello con sus brazos

-Bueno en realidad ha sido Alice la encargada de todo, es a ella a quien debes de darle las gracias, para mi regalo de graduación aun tendrás que esperar unas horas-me incliné para dejar un beso casto en sus labios y ella sonrió.

-Espero que en verdad no me hayas comprado nada caro Cullen… -advirtió sobre mis labios.

-Es un regalo de graduación, no puedes rechazarlo sea lo que sea-susurré antes de besar su labio inferior-si lo haces podría enfadarme

-¿tú? –Preguntó incrédula-soy yo la que debe de enfadarse en todo caso-acarició mi nuca

-¿tú?-repetí su pregunta con el mismo tono de voz, pero con una chispa de burla-una chica no se enfada por recibir un regalo

-No es un regalo cualquiera, es un regalo costoso-refunfuño

-¿Cómo sabes?-esboce una sonrisa y ella entrecerró los ojos

-Porque tus regalos siempre son costosos-dijo segura con voz acusadora

-No es cierto-me defendí-además aunque no sea costoso tú siempre pones el grito en el cielo, es frustrante-

-Supongo que soy diferente a las demás chicas-ella se encogió de hombros y yo acerque mi boca hasta su oreja.

-Lo sé-bese la parte trasera de su oído-y por eso te amo-ella sonrió cuando me aleje para verla-pero esta noche aceptaras mi regalo sin poner pegas, ¿entendido señorita?

Ella abrió la boca dispuesta a seguir protestando, pero no la deje y puse mis labios sobre los suyos de nuevo para silenciarla, sin embargo fue un beso rápido ya que pronto me separe de ella que mantenía los ojos cerrados.

Deslizó su lengua por su labio inferior, parecía pensativa.

-ummm ¿sabes? No creo que ese sea un beso adecuado para felicitar a tu novia por su graduación-dijo seria mientras abría lentamente los ojos, los cuales tenían un brillo divertido y travieso.

¡Ahhh! Creo que la amaba aun más cuando sus ojitos brillaban así.

-Ahh ¿no? ¿Y cómo debería ser entonces?-le continué el juego

-Así-dijo y entonces se alzó sobre la punta de sus pies para poder llegar a mis labios y juntarlos con los suyos, dándome un beso muy dulce.

Automáticamente se formó esa familiar burbuja alrededor nuestro que me alejaba de la realidad cuando la besaba, aunque no duró mucho ya que esta se rompió unos pocos minutos después cuando ambos escuchamos que alguien se aclaraba la garganta y tuvimos que separarnos de mala gana.

-Siento interrumpir chicos, pero vais a tener que dejar eso para más tarde-dijo el padre de Bella sonriendo

-ahora es hora de que felicite a mi hija-murmuro mirando con orgullo a Bella.

Yo me separe de ella dándole acceso a la avalancha de gente que comenzó a felicitar y besar a mi novia, supongo que esta noche me costaría encontrar un rato para estar con ella a solas, quizá me planteara secuestrarla durante la cena.

Tal y como supuse, aquella noche estuvimos rodeados de gente en todo momento, primero durante la larga cena que duró como 2 horas y más tarde en la fiesta, donde creía que podríamos estar solos, fui imposible puesto que siempre había alguien a nuestro alrededor, todo el mundo quería a Bella para una foto, incluso mi madre nos fotografió como cien veces, pero cierto es que pese a todo lo pasamos en grande.

Cuando todo terminó, era demasiado tarde por lo que los padres de Bella junto con sus parejas aceptaron la invitación de mis padres para quedarse en casa a dormir ya que ni mama ni papa permitieron que fueran a un hotel, excepto Jacob y Vanessa que se empeñaron en no molestar y se fueron a un hotel, aunque más bien creo que fue porque ellos también necesitaban estar solos.

Así que por todos esos motivos finalmente Bella vino a dormir a mi departamento, después de que Renée insistiera a Charlie para quedarse a dormir en casa de mis padres en vez de en el piso de Bella, como en un principio se había planeado, agradecí interiormente a Renée por ser perceptiva y querer darnos intimidad esa noche, lo que más quería era que Bella durmiera conmigo aunque aquella noche hicimos de todo menos dormir, por lo que al fin y al cabo mereció la pena…

Fin flash Back

-Sí, ese día ibas absolutamente hermosa y radiante- recordé sonriendo aun su rostro de aquel día

- creo que realmente Alice hizo un buen trabajo conmigo-rio- además lo preparó todo tan bien, la fiesta, la organización… tengo recuerdos tan buenos de aquel día… y de aquella noche-murmuró con picardía y yo reí con su comentario.-Puse nuestra foto en la sala de estar, antes la tenía en mi dormitorio, me gustó tanto que la mande sacar.

-Pues recuerdo que esa foto la eche yo, lo que quiere decir que soy mejor fotógrafo que tú y que mis fotografías son mejores-la pique-

-Tú no tomaste esa foto, lo hizo Esme, y cariño tu eres un pésimo fotógrafo, todas las fotos que has echado son embarazosas-dijo señalándome con un dedo

-No son embarazosas, son sexys-dije recordando todas las foto que le había echado mientras dormía o por las mañanas cuando caminaba por mi departamento en ropa interior…

-Más te vale que las tengas bien guardadas y que no las vea nadie, me moriría de la vergüenza-dijo tapándose la cara

-Claro que no las va a ver nadie, esas foto me pertenecen a mí, yo soy el único que tiene derecho a verlas-dije poniéndome un poco celoso con tan solo imaginarme a algún otro hombre que no fuera yo ver esas fotos tan intimas de Bella y yo, solamente yo podía ver a Bella en ropa interior, o sin ella, solamente yo.

-¿Ni siquiera yo las puedo ver?-bromeo al percibir mi estado de animo

-Me lo pensaré-dije relajándome y siguiendo su broma-quizás contigo haga una excepción y te las muestre solamente porque eres tú-dijo acariciando su mejilla con la punta de mi nariz.

-Por lo menos deberíamos cambiar las fotos grandes que hay en el salón-dijo haciendo un puchero

-¡Ahh, no, no! Nada de eso Swan, ya te dije que esas fotos se van a quedar ahí de por vida, me encantan esas fotos-dije riendo, y es que en la sala de estar de mi departamento había un gran marco alargado que contenía 3 fotos de Bella y yo my divertidas en blanco y negro(FP), esas fotos tenían 3 años y eran especiales porque fueron las primeras fotos que nos echamos como novios, el día de aquellas fotos, también fue el día que le dijimos a mis padres oficialmente, porque en realidad ellos ya sabían algo, que Bella y yo estábamos juntos.

-Algún día conseguiré que las quites-dijo riendo e intentando imitar una mirada peligrosa, que a mí me pareció tremendamente provocativa.

Ella amaba también esas fotos, eso yo lo sabía, pero decía que nos veíamos ridículos e infantiles, y justamente por eso yo no las quitaría nunca de mi sala de estar, ¡las adoraba!

- sabes que no preciosa, soy más cabezota que tú-dije y me acerque a besarla. A veces sentía que no podía estar más de 10 minutos sin rozar sus labios.

-quizá pueda hacerte cambiar de opinión-susurró contra mis labio-ya sabes, tengo mis truquillos-y paso su lengua perfilando mi labio inferior, no aguante mas la tentación y me tire a devorar esos labios que tanto me encantaban.

Saboree sus labios todo el tiempo que pude hasta que finalmente tuve que sepárame de ella si no quería quedarme sin sentido por la falta de oxigeno. Ambos nos quedamos unos minutos en callados, sumergidos en un cómodo silencio mientras nuestras miradas se conectaban y se demostraban el amor que se tenían sin necesidad de hablar.

-¿Cómo crees que se lo tome tu padre?-pregunte de repente cambiando totalmente de tema, pues ahora sí que me estaba metiendo en temas serios, e incluso peligrosos.

-¿El qué?-dijo confundida

-La boda, que tú y yo nos casemos, que nos vayamos a vivir juntos….

- Edward no te preocupes por eso cariño, estoy segura de que Charlie se pondrá feliz porque nosotros somos felices con esto-me sonrió para darme seguridad pero yo no logre que sus palabras me tranquilizaran

-No sé Bella, es cierto que lo de nuestro noviazgo se lo ha tomado bien al fin y al cabo, pero sé que no soy el hombre que Charlie quiere para ti, nunca le caí bien y no es para menos después de lo mal que me porte, es más creo que aun no me ha perdonado-dije tristemente al recordar aquello

-Charlie sabe que me haces feliz, y con eso es suficiente, además guapo no tienes nada por lo qué temer, te prometo que no te disparara, yo te protegeré con mi vida-dijo bromeando para quitarle un poco de hierro al asunto

Pero yo no estaba tan seguro, es más me atrevería a jurar que Charlie no estaría de acuerdo con la boda, porque simplemente él siempre había pensado que yo no merecía a una mujer como su hija, y en el fondo tenía razón, me había portado demasiado mal con ella para merecerla, pero era demasiado egoísta para alejarla de mí.

-Hey, cariño, Edward mírame-yo baje la vista para poder mirarla a los ojos-Charlie estará feliz ya lo veras, a pesar de todo él te ha perdonado y lo hizo el mismo día en el que se dio cuenta de que tú y solamente tú eras el único que me podía hacer sonreír. Mi padre no es rencoroso, y por eso estoy segura de que ha dejado el pasado atrás, como lo hemos hecho nosotros.

Ella tenía razón pero yo aun no podía evitar recordar aquella vez que me hecho de su casa…

Inicio flash back

No había visto a Bella desde que había salido prácticamente corriendo de la casa de mis padres para irse a Florida con su madre a pasar el resto de vacaciones, aunque cuando me entere de que pasaría unos días en Forks con su padre, el Jefe Swan, antes de irse a Florida no me lo pensé dos veces y decidí coger el primer avión que saliera a Seattle y venir, a pesar de que Alice me rogó que la dejara en paz no le hice caso pues yo necesitaba hablar con ella y explicarle lo sucedido.

Así que cuando llegué a Forks fui a casa de Bella, ya que necesitaba hablar con ella y aclararlo todo. El pueblo era muy pequeño por lo que no me supuso mucho problema encontrar la casa, solo fue cuestión de preguntar por el jefe Swan para conseguir la dirección.

Era una casa muy sencilla (FP), blanca y con un garaje junto a un pequeño jardín que daba cara al inmenso bosque que rodeaba a este pueblo, cuando estuve justo delante, toque la puerta un par de veces hasta que me abrió un hombre vestido con uniforme de policía y un grueso bigote, sus ojos me resultaban extremadamente familiares ya que eran de un color marrón achocolatado que me recordaban a los de….Bella ¡Claro aquel debía de ser su padre! ¡Además llevaba un uniforme de policía! Sin duda sería él.

-Buenas tarde señor-salude educadamente-¿es usted el jefe Swan?-

-Buena tardes jovencito-dijo serio-Si, ese soy yo ¿Te puedo ayudar en algo? ahora mismo no estoy de servicio, pero si vas a la comisaria encontraras a alguien que te pueda ayudar-dijo

-No, no he venido por eso, ¿puedo hablar con Bella?-dije, y al parecer esto le tomo por sorpresa.

- ¿Bella? ¿Y, se puede saber quien la busca?-dijo frunciendo el ceño

-Eh, si claro lo siento, soy Edward Cullen-dije tendiéndole mi mano, aunque él no me correspondió el saludo

-¿Tú eres Edward Cullen?-dijo algo ¿enfadado? Esto me confundía, ¿por qué lucía enfadado? yo no había hecho ni dicho nada ofensivo, creo.

-Sí, el mismo, ¿se encuentra Bella? Necesito decirle algo-dije, por lo menos Charlie había me conocía y puedo que eso me felicitara las cosas para hablar con Bella.-Es algo bastante importante y…

No me dejo seguir hablando

-Mi hija no está, ha salido con unos amigos-dijo con voz áspera hacia mí.

Un momento… ¿amigos? Qué clase de amigos serían, ¿estaba generalizando y hablaba de chicas y chicos?, ¿o solo de chicos? Ug, sería mucho mejor si fueran amigas simplemente…

-¿Y cuándo va a volver? Realmente es urgente que hable con ella, no insistiría tanto si no fuera ese el caso jefe Swan.

Vamos, vamos, necesito verla, necesito que me escuche y que me crea…

-Para ti Bella nunca va a estar, no pienso permitir que mi hija vuelva a derramar una sola lágrima por un desgraciado como tú.-deje de respirar, y la sangre huyo de mi cara al escuchar sus tajantes y duras palabras.

Mierda esto estaba saliendo muy mal

-Señor Swan… por favor déjeme hablar con su hija, esto es importante.

-No vuelvas a pisar esta casa nunca, y por tu bienestar físico deja a mi hija en paz, no sé como tienes cara de venir aquí, nunca había visto a Bella llorar tanto por alguien y espero nunca volver a verla-gruño mientras muy enfadado me cerraba la puerta en las narices, genial ni siquiera había podido hablar con Bella y para colmo su padre ya me había puesto como el número 1 en su lista negra.

Vaya mierda de día fue aquel, volví a Seattle para pasar la noche y al día siguiente regresé a Chicago, a casa, totalmente decaído y lo único que pude hacer fue desahogarme con Alice, que lo único que repetía una y otra vez es que me lo tenía bien merecido…

Fin flash Back

-Sí, definitivamente Charlie y yo no empezamos con buen pie…

-Tú y yo tampoco empezamos con buen pie, y mira ahora vamos a casarnos-dijo mostrándome el anillo de compromiso a lo que yo no pude evitar sonreír como el estúpido enamorado que era.

-En eso tienes razón-acaricié el dorso de su mano-quizá Charlie también me dé una oportunidad-dije deseando que así fuera, y que realmente me aceptara como el futuro marido de su hija e incluso el futuro padre de sus nietos…

-Charlie ya te ha dado una oportunidad mi amor-dijo con voz dulce Bella acunando mi rostro entre sus manos mientras se alzaba para besar mis labios.

Yo le correspondí gustoso al beso, intentando transmítele todo lo que sentía en ese momento, intentando transmitirle todo mi amor, mi gratitud, porque sinceramente no sé lo que había hecho para merecerla, era el ángel que alumbraba mi vida y sin ella yo no sería nada. Sus palabras me hicieron recordad aquella charla que me dio Charlie cuando finalmente entendió que yo amaba a Bella y que no tenía intención de jugar con ella…

Inicio flash Back (Unos meses después del primer encuentro con Charlie) (*)

Nos encontrábamos sentados en el salón de la casa del jefe Swan, Bella se encontraba a mi derecha y cuando Charlie desviaba la vista, la cual fijaba en nosotros cada 5 minutos, acariciaba mi mano transmitiéndome tranquilidad y seguridad.

-Así que… -se aclaró la garganta-…estáis juntos-dijo mientras disimuladamente cerraba sus manos en puños con fuerza

-Sí papa, Edward y yo estamos saliendo-dijo Bella, y rápidamente note como su cuerpo se tensaba esperando que su padre pusiera el grito en el cielo justo en ese momento

-¿saliendo? ¿Con él?...umm sí, algo me sospechaba- se paso una mano nervoso por el pelo y rascó su nuca-por eso te escuchaba hablando por teléfono hasta altas horas de la noche, y tu sonrisa por las mañanas me decía que algo nuevo estaba pasando en tu vida, estos dos días has pasado demasiado tiempo junto a él para como para que no sospeche nada Bella-dijo apuntándome con un dedo de forma acusadora. Su mirada era nada simpática conmigo.

¡Ug! Definitivamente no, yo no le agradaba nada a Charlie Swan

-está bien-bufó Charlie no muy contento-lo mejor será tomármelo con tranquilidad-dijo mientras intentaba acompasar su respiración

Creo que en cualquier momento se lanzaría a golpearme.

-Papá, por favor intenta tranquilízate-dijo Bella ya que Charlie comenzaba a ponerse morado. No era difícil saber que estaba tratando de tragarse una gran bola de insultos nada agradables, y que por supuesto, iban todos dirigidos hacia mí.

-Bells, podrías traerme un vaso de agua de la cocina-dijo su padre

No entendía, ¿no me iba a golpear?

-Claro papa-y rápidamente se levanto para después dirigirse a la cocina dejándome a mi solo en la boca del lobo.

Mierda, no, no, no ¿Por qué me dejas solo con él, Bella? ¡Vuelve!

-Bien Edward, voy a ser claro-dijo levantándose y acercándose a mi mientras que con su mano derecha tocaba el mango de su arma guardada en el cinturón de su uniforme

-Si le haces daño, le tocas un pelo en contra de su voluntad, te sobrepasas con ella o simplemente le haces derramar una sola lágrima de nuevo….te los corto- dijo con voz grave señalando mi entrepierna, yo trague en seco haciendo un ruido con la garganta y poniendo cara de dolor al imaginarme eso…

¡Ah! Dolía con tan solo imaginarlo…

-¿Lo has entendido? No pienso pasarte el más mínimo error que tengas con ella.-joder, él hablaba muy en serio

Intenté que mi voz sonara firme, segura y decidida, aunque creo que solo se quedo en eso, en un intento.

-No tiene por qué preocuparse señor Swan, lo único que quiero es hacer a Bella feliz-dije aun temblando literalmente. ¡Diablos! Intentaba por todos los medios no aparentarlo pero estaba muy nervioso y Charlie imponía mucho respeto.

-Mas te vale que sea así, y espero que me lo demuestres-dijo tomando asiento nuevamente-estas a prueba Cullen-dijo muy serio.

En ese momento apareció Bella con un vaso de agua en su mano que segundos después entrego a su padre

-Gracias Bells-dijo con un tono totalmente amigable y muy diferente al que había tenido minutos antes conmigo.

-¿Estás bien papa?-dijo Bella algo preocupada

-Sí-bebió un trago de agua y después nos miro en silencio-de acuerdo no puedo hacer nada en contra de eso, así que no me queda más remedio que intentar aceptarlo y si tú decisión es estar con él, la voy a respetar-dijo-solo espero que cuando llores no sea por él de nuevo-esto último lo susurró en voz baja aunque todos pudimos escucharlo

-Papá voy a estar bien-dijo Bella levantándose y acercándose a su padre poniéndose de cuclillas en frente de él para quedar a la altura de su cara

-Edward me hace feliz, yo confió en él-dijo cogiendo la mano de su padre-para mi es importante que tú y mamá estéis de acuerdo con esto, por eso necesito que olvides el pasado y le des el beneficio de la duda, por favor, hazlo por mí-murmuró Bella

-Está bien Bella, tienes mi apoyo en esto, y le daré a Edward el benefició de la duda, pero a la mínima te juro que lo perseguiré hasta encontrarlo y le pateare el trasero-masculló

Bella sonrió y le dio un beso en la mejilla a su padre susurrándole un "gracias".

-¿Renée lo sabe?-preguntó Charlie

-Sí, mama lo sospechaba desde hace tiempo

-¿Y cómo se lo tomó?

-Bueno, sabes cómo es ella, simplemente es algo que se esperaba-dijo Bella, y la verdad es que Bella me había dicho que Renée siempre le dijo que acabaría enamorada de mi, y que acabaríamos juntos pues era demasiado evidente que nos atraíamos y que teníamos mucha química, Bella me dijo que al principio no le creyó pero olvidó que su madre era muy perceptiva y casi nunca se confundía en estas cosas, y no, no se equivocó.

-Ya, supongo que Renée se lo habrá tomado mejor….-

¡Dios! sí, definitivamente se lo tomo mejor, a pesar de saber que le hice daño a Bella salto de alegría al saber que por fin nos habíamos dado cuenta de que nos amábamos y que ya no nos haríamos daño estando separados, Renee era un gran persona, ella estaba casada con Phil, un hombre de su edad que era jugador de béisbol profesional en una liga menor , el cual también era un buen hombre que hacia feliz a la madre de Bella

- ¿Cuándo comienzas la universidad?-preguntó Charlie a Bella, supongo que para cambiar de tema y poner distracción más para él mismo que para nosotros, sabía que no había sido una noticia bien recibida para Charlie así que cambiar de tema sirvió para que inmediatamente el ambiente se sintiera más relajado, y yo, admito que, sentía que me había quitado 1000Kg de encima después de haberle dicho a Charlie que Bella y yo estábamos juntos.

La peor parte, al menos, ya había pasado.

-El 23 de Septiembre empiezan las clases del 2º año, así que supongo que me iré un par de días antes para organizar el piso, tendré que llamar a Ángela.

-Bien me alegra que este año puedas pasar tu cumpleaños en Forks, el año pasado las clases empezaron muchísimo antes…-en ese momento sonó mi móvil, me disculpé un momento y me dirigí a la puerta para contestar, en la pantalla ponía el nombre de mi hermana

-Enana ¿Qué quieres?-dije a modo de saludo

-¿Y bien? ¿Cómo ha salido todo? ¿Ha intentado disparate Charlie y has salido corriendo?-dijo riendo

-Muy graciosa-dije con notable ironía

-Se podría decir que ha salido bien, si quitamos que en cuanto ha tenido oportunidad Charlie me ha amenazado con córtame los huevos si la vuelvo a cagar-al otro lado solo puede escuchar la escandalosa risa de Alice

No debí haberle dicho esto, ahora se estaría mofando de mí por días.

-¡Dios! hubiera dado lo que fuera por ver tu cara-habló aun riendo

-Vete a la mierda Alice-solté un bufido y lo único que logre fue que ella riera más y más.

-Bueno me vas a decir para que me has llamado o ¿vas a seguir riéndote?-mascullé

-No, bueno quizá sí que me siga riendo, pero te he llamado porque mamá y papá han decidió salir a cenar a un restaurante, han hecho reserva en Seattle y dicen que le digas a Bella, a Sue y a Charlie que vengan a cenar con nosotros.

Mis padres habían alquilado una casa a las afueras de Forks, papa había estado trabajando durante todo el verano, y apenas ahora tenía una semana libre para disfrutar de unas merecidas vacaciones, así que después de escuchar a Bella hablar sobre este pequeñito pueblo de Washington mi madre terminó enamorándose de sus palabras y convenció a mi padre de que sería una buena idea venir a pasar unos días tranquilos y agradables dentro de este paisaje verde, que a mi aun me seguía pareciendo demasiado frío.

Alice había decidió acompañar a mis padres, Emmett sin en cambio prefirió quedarse en Chicago y yo al saber que Bella estaría en Forks al menos hasta el 16 de Septiembre decidí venir también, además el principal motivo de Bella por venir a ver a su padre había sido para hablarle sobre la relación que habíamos empezado ella y yo, y ese era un momento en el que yo debía estar presente, a pesar de que la idea de tener a Charlie Swan a dos metros de mi me intimidaba demasiado.

A mama y a papa les gustaba mucho salir a cenar fuera siempre que podían o bien para pasar un rato juntos o bien para compartir con nosotros así que sabía que ella quería que Alice y yo los acompañáramos, por eso y a pesar de que tenía unas ganas enormes de quedarme con Bella acompañaría a mis padres y a mi hermana a cenar esta noche.

Sentía que en estos meses de verano habían pasado demasiadas cosas y había estado un poco alejados de ellos, cuando Bella estuvo en Florida prácticamente me encerré en mi mismo, a veces me molestaba cualquier persona que estuviera a mi alrededor y eso a mama no le había gustado nada, así que tenía que recompensar eso de alguna forma.

Me había comportado de forma muy estúpida estos meses atrás, pero realmente saber que las cosas entre Bella y yo estaban peor que nunca, y que ella ni si quiera quería hablarme me hacía querer encerrarme todo el día y no ver absolutamente a nadie. Me dolía, me dolía mucho pensar que ella me odiaba y solo sentía desprecio por mí.

La idea de que Bella y su familia nos acompañaran me parecía tan tentadora y buena, pero demasiado precipitada, no quería llevar las cosas rápido, ni mucho menos asustarla, quería que todo sucediese poco a poco y en su justo tiempo, no quería saltar de nivel cuando tan solo llevábamos unas semanas saliendo porque ¡Nos encontrábamos a principios de Septiembre! Es decir, ella y yo no llevábamos ni un mes saliendo, así que no, no me parecía una buena idea llevarla a cenar con mi familia, al menos no aun.

-Alice creo que no sería lo mejor, Charlie esta asimilando la noticia, sería como forzar la suerte si lo invitamos a una de esas cenar "familiares"-dije después de reflexionarlo

-Bueno está bien, pero de todas maneras mamá quiere que vengas cuanto antes.

-Está bien, voy a despedirme de Bella y regreso a casa, hasta ahora enana.

-Adiós, y ten cuidado no vaya a ser que Charlie te quite tu orgullo de macho-dijo y se puso a reírse de nuevo, así que corte el teléfono, genial cuando Emmett se enterara se reiría de mí no durante días, sino ¡durante meses…!

Entré de nuevo a la casa y me encontré a Charlie y a Bella hablando animadamente.

-¿Quién era?-me pregunto Bella

-Era Alice, tengo que irme a casa-dije mirándola a los ojos, en los cuales vi tristeza, la misma que sentía yo, ya que quería estar con ella, pero Esme se entristecería si no los acompañaba y además lo mejor sería darle tiempo a Charlie y a Bella y dejar que ellos hablaran.

-Ah, vale, está bien saluda a todos de mi parte.-me sonrió y yo grabe esa sonrisa en mi mente hasta que volviera a verla.

-Claro, ¿nos vemos mañana entonces?-pregunté con cierta timidez e incomodidad, pues Charlie estaba presente, pero con esperanza de que dijera que sí.

-Sí, además mañana tengo que ir a ver a Alice para… -y se quedó pensado-…para que me ayude con… algo-dijo, yo sonreí, porque sabía que era mentira, solo lo decía para que Charlie no supiera descaradamente que Bella iría a verme.

-Claro, Alice estará encantada de ayudarte, estoy seguro-quise guiñarle un ojo, pero me contuve.

Me voltee para decirle adiós a su padre.

-Buenas noches señor Swan-dije educadamente

-Buenas noches Edward, y puedes tutearme-dijo, a lo que Bella sonrió muy, muy ampliamente, y ¿para qué negarlo? Yo también tenía muchas ganas de sonreír, esto podía parecer una tontería, pero que Charlie me permitiera tutearlo ya era un gran paso para mí. Al parecer algo tendría que haber sucedido mientras yo hablaba con Alice.

-Claro, Charlie-dije para después dirigirme a Bella-Buenas noches, que duermas bien-dije sonriéndole, sonrisa que ella me devolvió.

Me acerque para darle un beso en la mejilla, porque honestamente me daba algo de corte besarla delante de su padre, me acerque hasta ella y deposite un pequeño beso en su mejilla, para después disimuladamente susurrarle al oído…

-espero que no te duermas pronto, solamente mantén la ventana abierta, te amo-y me separé de su rostro rápidamente.

Después me marche a casa, y salí con Alice y mis padres a cenar a Seattle, estuve un rato charlando con mi familia, y claro aguantando las carcajadas de Alice que no paraba de reírse de mi, la cena se alargo bastante, puesto que a las 1 a.m. cuando regresamos a la casa (FP)que mis padres había alquilado.

Cuando papa, mama y Alice se fueron a dormir, yo fingí hacer lo mismo, pero pocos minutos después salí con pasos silenciosos de la casa y fui a casa de Bella, dirigiéndome a la parte trasera de esta, donde se encontraba la habitación de mi novia.

Como supuse su ventana estaba abierta así que me las ingenia para subir gracias a un gran árbol que había pegado a la ventana, cuando logre subir sin carme, gracias a dios, Bella se encontraba acuclillada dándome la espalda y revisando unos cajones de su armario, llevaba una camiseta de manga corta azul oscuro junto con unos diminutos culottes negros (FP), y llevaba el cabello recogido en una coleta.

Al parecer no se percató de mi presencia cuando entre completamente en la habitación hasta que le di un leve beso en el cuello, ella se sobresaltó asustada y se puso en pie.

-Hola-dije riendo al ver el espasmo que había pegado

-¡Hey!, me has asustado-dijo dándose la vuelta para encararme

-Se te veía muy concentrada-murmure pasando mi mano por su cadera y ella sonrió

-Has tardado mucho-dijo haciendo un adorable puchero con los labios

-Lo siento, la cena se ha alargado un poco, Esme me ha hecho un interrogatorio interminable- dije, pues a pesar de que mi madre fue una de las primeras personas en enterarse de que Bella y yo estábamos juntos a los pocos días que arreglamos las cosas, ella esta noche, y con ayuda de las estúpidas bromas de Alice que esta noche parecía superar a Emmett en idiotez, había estado especialmente interesada sobre lo que había pasado con Charlie.

-además tenía que asegurarme de que Charlie se encontraba roncando-susurré

-No te preocupes, Charlie ya está en su quinto sueño-murmuró también

-Eso me gusta, así podre besar a mi novia con total libertad-dije mientras me acercaba a sus labios y comenzaba a devorarlos.

-seguro-musitó con voz melosa en mis labios para luego rodear mi cuello con un brazo mientras que el otro se deslizó a mi cintura dejando su mano apoyada en mi espalda, desde donde agarró mi camiseta.

Aquella noche me quedé hasta muy tarde con ella, nos quedamos abrazados hablando y besándonos, aunque no pasamos de eso, porque honestamente ambos sabíamos que no era una buena idea que Charlie nos pillara haciendo algo, de hecho no quiero imaginar si tan solo Charlie llega a encontrarme esa noche allí con Bella…

Fin flash Back

Y pese a haberme amenazado con colgarme de los huevos si le hacía daño a su hija, la relación con el padre de Bella fue mejorando hasta que finalmente aceptó que Bella y yo íbamos en serio, pero a pesar de eso tenía miedo de que no aceptara que Bella y yo nos casaríamos, porque sé que para Bella era importante el apoyo de su padre al igual que el de Renée, aunque estoy seguro de que su madre estaría realmente contenta con esta noticia e incluso apostaría que estaría encantada de ayudar con los preparativos, porque Renée era así de sencilla, sabía que yo le había hecho daño a su hija, pero nunca me tuvo rencor, y aunque también mantuvo una larga conversación conmigo, nunca fue tan tensa e incómoda como la que se dio con Charlie.

Renée siempre me puso las cosas más fáciles que Charlie.

Ahora solo faltaba rezar para que la suerte estuviera de nuestro lado y Charlie no se pusiera difícil esta vez y con esta nueva noticia.

Estuvimos un rato mas contemplando la ciudad de San Francisco hasta que finalmente nos dimos cuenta que era demasiado tarde y que ambos estábamos muy hambrientos después de haber estado en un lado para otro durante toda la tarde por lo que decidimos que cenaríamos en San Francisco.

Buscamos un restaurante en pleno centro pero todos estaban llenos, así que encontramos uno cerca de mar, era un restaurante terraza, solo quedaban un par de mesas libres así que sin pensarlo entramos en ese y pedimos mesa.

El restaurante (FP) era bonito, nos encontrábamos en una mesa cuadrada para dos personas pegada a la terraza del lugar, se escuchaba el mar y se veían las luces de la ciudad reflejadas en el agua de esta, era relajante. En el centro de la mesa había una lámpara redonda iluminada por una vela, corría una leve brisa proveniente del océano que hacia la estancia y el ambiente aun más cómodos.

-Después de cenar podríamos ir a alguna discoteca, hace tiempo que no vamos a bailar-comenté acomodándome en la silla

-No es cierto, la semana pasada salimos con los chicos y si no recuerdo mal pillamos una buena resaca cariño-dijo riendo.

Sí, recordaba eso, ¿cómo olvidarlo cuando Bella y yo llegamos a mi departamento diciendo puras incoherencias y terminamos haciendo el amor en el suelo del recibidor? Fue épico, sin embargo la resaca que ambos teníamos a la mañana siguiente fue putamente molesta y fastidiosa, pasamos todo el día en cama…

-No podría olvidarlo-sonreí, ella apoyó los codos en la mesa descansando la barbilla sobre sus manos-pero me refiero a que hace tiempo que no salimos tú y yo…solos… a bailar-dije

-Eso es porque usted señor, prefiere quedarse en el departamento haciéndole mimitos a su novia-habló con felicidad y yo empecé a reír

-pero preciosa, si a ti te encanta que te mime-dije mientras miraba la carta del restaurante que el mayordomo nos había entregado minutos después de sentarnos en la mesa.

-No te lo niego-admitió sonriendo-y sí, creo que estaría bien salir esta noche, aunque no conocemos ningún lugar aquí, ningún pub, discoteca…

-Ya lo encontraremos, aunque te aviso que lo importante no es el lugar, sino la compañía, y creo que esta noche voy a disfrutar de buena compañía-dije sonriendo de lado cuando ella dejo su carta sobre la mesa.

-¿en serio?-alzó una ceja

-Por supuesto, y tengo la esperanza de que esa chica termine también acompañándome en la cama esta noche, tengo grandes planes para ella-reí al ver que estaba a punto de gritarme lo descarado que era, sin embargo yo estaba seguro de que nadie nos estaba escuchando

-Shhhhhh…. -rió-es usted un atrevido Cullen-sonrió con un leve rubor en sus mejillas

Iba a responderle algo para ponerla más colorada, porque amaba cuando se sonrojaba y no podía hacer nada para evitarlo, pero en ese instante vino el mayordomo de nuevo, pero esta vez para anotar nuestro pedido.

Cenamos tranquilamente, hablando y riendo mucho mientras disfrutando de las vistas al mar, cuando terminamos de cenar pedimos un taxi para que nos llevara al centro de San Francisco para buscar una buena discoteca, tras 30 minutos caminando por las calles de San Francisco encontramos una que nos gusto, había buen ambiente, no era muy grande ni muy pequeña, se estaba realmente bien a pesar de que estaba bastante llena de gente ya que eran pasadas las 1 de la madrugada (FP).

Estuvimos un rato bailando hasta que me entraron ganas de beber algo.

-Ven, vamos a la barra a pedir algo-le dije muy cerca de su oído ya que la música estaba muy alta y no me escuchaba a pesar de estar a centímetros de distancia.

-¿me quieres emborrachar tan pronto?- elevó la voz sobre la música para que la escuchara

-Bueno en realidad quiero hacerte muchas cosas, pero creo que no estamos en el lugar apropiado y tampoco me dejarías-dije riendo en su oreja, no pude resistirlo y deje un húmedo beso en su cuello.

-pervertido-dijo golpeando mi pecho juguetonamente y yo volví a reír-anda vamos a la barra-me susurró después.

La agarre de la mano y la guíe hasta la barra ya que había muchísima gente, pedimos un par de bebidas con vodka, las cuales estaban bien cargadas, y luego seguimos bailando y bebiendo.

Cuando se hicieron las 4 de la mañana llevábamos bastante alcohol metido en el cuerpo, la cabeza comenzaba a darme vueltas y para colmo Bella bailaba muy, muy pegada a mi cuerpo, ¡mierda! me encantaba verla así, era extremadamente sexy cuando bailaba de esa manera, cuando se movía su trasero rozaba sin querer mi miembro, el cual reaccionaba ante su toque, la agarre por la cintura y comencé a darle besos en el cuello, a apartarle el pelo y besar su hombro y el lóbulo de su oreja así que ella se dio la vuelta y atacó mis labios, mi lengua entró en su boca y acaricio su lengua con desesperación mientras mis manos se posaban en su culo.

Tenía unas ganas enorme de hacerle el amor, pero por desgracia no estábamos en condiciones debido a que nos encontrábamos rodeados de gente, pero aproveché para dejarle bien claro a los idiotas que habían estado mirando a Bella durante toda la noche de que Bella era mía, y que tenia dueño, por lo que devoré con mas ardía sus labios hasta que nos falto el aire.

Bella seguía moviéndose de esa manera que me volvía loco, y mi amiguito estaba despierto desde hacía rato por lo que no puede aguantar más, baje mi cabeza hasta la altura de la suya.

-Acompáñame al baño-sugerí con un tono de voz que claramente mostraba que mis intenciones no eran nada inocentes, ella percibió mi estado de ánimo, aunque creo que eso lo hizo hace rato porque podía sentir que ella estaba igual o peor.

-No pienso hacerlo en un baño-protestó riendo, el alcohol realmente comenzaba a pasarle factura-es asqueroso

-No sería la primera vez que lo hacemos en un baño preciosa-dije rozando sus labios, ummm su aliento olía al dulzón y fuerte, pero delicioso, licor de caramelo que se acababa de tomar

Ella sonrió y volvió a besar mis labios con pasión, el simple gesto de morder mi labio antes de separarse completamente de mi hizo que terminara enloqueciéndome

-vamos-murmuró provocativamente, lo cual hizo que mis ansias por ella aumentaran, ¡necesitaba un buen polvo con ella urgentemente!

La tomé de la mano y busqué como un loco los baños del local, el primero que vi fue el baño femenino, pero cuando íbamos a entrar escuché voces por lo que abrí la puerta del baño masculino que estaba completamente vacío así que guie a Bella hasta uno de los cubículos, que por suerte no eran muy pequeños, abrí la puerta y ambos nos metimos dentro, una vez estuvo la puerta cerrada y con el pestillo echado, acorralé a Bella contra la puerta e inmovilice sus manos sobre su cabeza y metí una de mis rodillas entre sus piernas.

-Nos van a pillar-medio gimió medio rió

Yo negué con la cabeza y me lancé a su cuello, el cual mordisqueé y besé con deseo, la piel de su cuello era tan suave y tentadora, la necesitaba, por lo que bese sus labios con fuerza dejándolos rojos e hinchados a causa de la pasión con la que estaba cargada el beso.

Con una de mis manos sujeté los dos brazos de Bella que tenia inmovilizados sobre su cabeza y con la que me quedó libre comencé a acariciar sus caderas, delineando sus perfectas curvas hasta llegar a su culo para comenzar a masajearlo, gimió audiblemente cuando presioné su cuerpo contra el mío apretando sus nalgas y clavándole mi erección en su vientre, a lo que yo sonreí satisfecho.

No había tiempo de juegos preliminares, la necesitaba, necesitaba sentirla, así que solté el agarre de mi mano sobre las suyas y con urgencia subí la falda blanca que llevaba, ella rápidamente bajó mis pantalones y mis bóxers a lo que yo bajé con desesperación sus bragas.

La cogí de las nalgas con mis manos para sostenerla y ella en respuesta enrosco sus piernas en mi cintura y rodeó mi cuello con sus brazos, segundos después la penetré de una sola estocada y sin darle tregua empecé a penetrarla aun más rápido.

Nuestros gemidos eran callados con besos, ya que podía entrar alguien y escucharnos.

-E-Edward… -susurraba entrecortadamente y con algo de dificultad una y otra vez en mi odio cuando note que sus paredes comenzaban a apretar mi miembro, lo cual me provocaba más placer aún, si es que eso era posible.

Yo aceleré el ritmo, quería que explotara de placer, quería ver que disfrutaba.

-A-ahh… mmmm… ¡Edward!-susurró clavando sus uñas en mi espalda cuando se corrió alcanzando el orgasmo, eso me encendió aun más por lo que seguí moviéndome en su interior hasta alcanzar mi propia liberación

-B-bellaaa… -gemí cuando me corrí en su interior, la sensación después de un orgasmo era genial, sobre todo en Bella que ahora mantenía sus ojos cerrados mientras su cabeza descansaba apoyada en mi pecho.

Las piernas me temblaban y los brazos me pesaban, tuve que hacer un gran esfuerzo para seguir manteniendo a Bella y que no cayera, tras unos minutos salí de su interior y ella deshizo el nudo que formaban sus piernas alrededor de mi cintura para apoyarse sobre el suelo.

-Ha sido uno de los mejores polvos que hemos echado-sonrió y luego respiró profundamente, estaba notablemente agitada, borracha, sexy y adorable.-increíble, ¿por qué follas tan jodidamente bien?-preguntó y ambos reímos, vaya realmente estábamos muy borrachos, porque no era solo ella, yo no me quedaba atrás tampoco, mañana tendríamos un gran dolor de cabeza.

-Impresionante-dije también con voz agitada, después de limpiarnos, y mientras subía mis bóxers y pantalones, a la vez que ella hacía lo mismo con sus bragas y bajaba su falda para después acomodársela bien.

-Vamos a tomar unos tequilas con limón-propuse de buena gana, me sentía un poco cansado, pero aun no tenía ganas de irme a casa, y Bella parecía que tampoco tenía esa intención.

-Edward hemos bebido demasiado, ya ni siquiera me acuerdo de mi segundo nombre… -frunció el ceño de forma muy graciosa, cómo si realmente estuviera pensando su nombre, como si estuviese rebuscando ese pequeño detalle dentro de su cabeza.

-Marie, tu segundo nombre es Marie-murmuré besando su nariz, ella comenzó a reírse tontamente

-Me haces cosquillas… - arrugó la nariz, pero sus risas pararon cuando en ese momento se escuchó como la puerta del baño se abría, para después escucharse voces graves.

-Te dije que nos iban a pillar-musitó juguetona Bella

-Shhh… -dije poniendo un dedo en su boca, aunque ella me ignoró, pues aparto mi mano de su boca y comenzó a morder mi cuello, y a mi cada vez me costaba más evitar los jadeos, hasta que fue demasiado tarde y gemí más alto de lo que me hubiera gustado.

Pero al parecer los tipos que estaban en el baño por suerte no lo escucharon ya que minutos después la puerta volvió a cerrarse, supuse que se habrían ido, pero por si acaso abrí la puerta con cuidado y miré a ambos lados, tras verificar que no había nadie ambos salimos hasta volver a mezclarnos entre la gente y el bullicio de la discoteca como si nada hubiera pasado

-Bueno, y ahora ¡vamos a por esos tequilas!-exclamó Bella sonriendo

-¿No decías que habíamos bebido mucho?-dije burlándome de ella

-Sí, pero he cambiando de opinión-y sonrió con malicia-¡vamos!-dijo agarrándome de la mano y tirando con fuerza para dirigirnos a la barra de bebidas nuevamente.

Así que así pasamos toda la noche, bebiendo, bailando y besándonos, ya que como al día siguiente no teníamos que trabajar disfrutamos al máximo, cuando eran cerca de las 6 de la madrugada, estábamos demasiado cansados como para seguir bailando así que decidimos que era hora de volver a casa, y la verdad es que no recuerdo cómo, pero logramos encontrar un taxi que nos llevo a la casa de la playa, cuando llegamos pague el taxi, aunque no sé por qué tengo la sensación de que le pagué más dinero del que debía…

En fin, lo último que recuerdo es que aquella noche volví a hacerle el amor a Bella, aunque esta vez lo hice lentamente y disfrutando de cada parte de su cuerpo y de cada poro de su piel, porque sí, desde que conocí a Bella, deje de tener sexo, ya que con ella lo que siempre hice, fue hacer el amor, unas veces con pasión y fuego, otras con cariño y dulzura, unas veces lentamente, otras veces rápido, pero fuera de la forma que fuera al fin y al cabo siempre era demostrándole lo que sentía, porque hacer el amor con ella era la más pura y verdadera muestra de amor que teníamos…

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(*) Aclaración importante: A ver, aquí igual os perdéis un poco (sobre todo porque ha pasado mucho tiempo y porque los flash back están desordenados), así que yo aclaro, cuando Bella encuentra a Edward en la cama con Tanya (principios de Junio) ella decide irse a pasar el resto del verano con Renée a Florida, sin embargo antes va a Forks a visitar a su padre (esto tienen un porqué pero aparecerá en próximos capítulos) y es aquí cuando Edward va a buscarla (este es el primer encuentro que tienen Edward y Charlie, es decir, el que habéis leído en este capítulo) luego cuando Bella vuelve de Florida (es decir de estar con su madre) es en Agosto, y es ahí cuando perdona a Edward y empiezan la relación (ese flash back aparece en el capítulo 6), un poco después Bella viaja a Forks nuevamente para hablar con Charlie y para pasar unos días más con su padre, aquí es cuando ella y Edward le dicen que están juntos.

chaise longue (*): Se trata de un sillón largo, tal y como su propio nombre indica. Es un sofá con una prolongación para apoyar las piernas y mantenerlas totalmente estiradas.

Chicago bears (*): Es un equipo de fútbol americano de la NFL ("Nacional Fotball League" o lo que es lo mismo pero en español "Liga Nacional de Fútbol Americano") de Chicago

Soldier Field (*): Es un estadio de Fútbol Americano ubicado dentro del Burnham Park en Chicago, en el que actualmente juegan los "Chicago bears"

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Tenéis los lugares que Edward y Bella visitan en San Francisco en mi perfil también y en la página de facebook, además de las nuevas imágenes también :)

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Respecto al capítulo quería aclararos que cuando Edward dice que Renée le facilito las cosas más que Charlie, no quiere decir con esto que a Renée le preocupara menos su hija, y el hecho de que Edward la dañara, no, no es así, pero Renée es mas perceptiva que Charlie (que es mucho más protector y desconfiado, y por eso mismo no acepta a Edward en un principio) y sabe que la felicidad de Bella es Edward, por eso ella decidió no ponerle las cosas difíciles a Edward, porque al fin y al cabo era él el hombre que Bella quería. Hasta aquí os digo, de todas formas voy a aclarar esto en el capítulo en el que Bella le diga a Renée que se casa con Edward, para que podáis saber más de Renée y de su punto de vista, al igual que voy a hacer con Charlie :)

Nika.