Cap 8: Seras Tú .. Siempre

Por DiarioTwilight   Publicado a las  10:00 p. m.   1 comentario

CAP.8: El Amor es para siempre

Edward POV

La guardia se me hizo eterna. Entraron varias urgencias durante la tarde - noche: un accidente de transito, un accidente casero, donde un señor se atravesó un dedo con un clavo, y el que ocupo mi tiempo, una apendicitis en un nene de 10 años. Por suerte todo salio bien, pero la noche se me hizo interminable.

Hice mi ronda, visite al paciente recién operado y hable tranquilizando a la madre del pequeño. A las cuatro de la mañana, Julia, que era la jefa de enfermería en mi turno, me dijo que tenia libre un catre en el primer piso. Que descansara un rato, que me llamaba si me necesitaba.

Subí la escalera como si cada pierna me pesara una tonelada y me tire en la cama sin mirar quien mas estaba. Tendría más o menos dos horas y debía aprovecharlas. Aunque no podía dejar de pensar en Bella.

La buena noticia del día era que el Dr. Marshall había decidido pasarla a una habitación común. Pero lo malo es que tendría que tener mas cuidado al momento de las visitas. Aunque el determino que era mejor que fuera por periodos cortos, para que estuviera tranquila, y fijo horarios. Eso estaba a mi favor, pero necesitaría ayuda. Papa y yo arreglamos con el Hospital que le diera una habitación para ella sola, así sería mas fácil que tuviera un ambiente mas relajado.




Me dormí y soñé con ella, como siempre. Volví a recrear la noche del baile de graduación. El sabor de su boquita en la mía, en esa noche tan especial. A eso de las 6 y media, Julia me vino a buscar. Me lave la cara, me moje el pelo, me peine y baje corriendo.

Me encontré sentada en la camilla a una jovencita que no tendría más 20 años, tomada de la mano de un muchacho de la misma edad, llorosa y compungida. Ambos me recordaron a como nos veíamos Bella y yo, a esa edad. La cara de el reflejaba una sonrisa amable mientras la miraba, pero en cuanto la torno hacia mi, transmitía una enorme preocupación.

A primera vista, no parecía herida, así que trate de darle ánimos. Acerque el taburete alto que había contra la pared, tome unos pañuelos descartables y se los extendí con una sonrisa. Ella lo agradeció.

-Bueno, que es lo que ha sucedido... En que puedo ayudarlos. –pregunte, sentándome.

-Vera doctor –dijo el- salimos de casa hacia el trabajo y pasamos por la cafetería. Íbamos a salir del local y aparentemente alguien había derramado algo y ella resbalo, cayendo sentada pesadamente y contra el marco de la puerta – sobre las mejillas de ella rodaban lágrimas y me desconcertaba, porque no podía creer que doliera tanto. – Nuestra preocupación doctor, es que Millie esta embarazada. Estamos muy asustados! - Y ahora entendía.

-Bueno, Millie. Vamos a revisarte. Preguntare si en obstetricia hay alguien, sino tendré que hacer la ecografía yo. Está bien? – y ella asintió.

Le pedí a el que quitara su abrigo y revise sus brazos y piernas para verificar si había algún corte, o esguince. Verifique sus articulaciones, y la zona lumbar. Estaba dolorida pero parecía estar bien. Le consulte si tenia algún dolor abdominal y me dijo que no. A pesar de eso la ausculte y todo parecía estar en orden.

Le pedí a Julia que llamara a ver si había alguien disponible en obstetricia, pero el equipo tenía una cesárea de urgencia y no había nadie disponible. Hice traer el equipo y me puse manos a la obra. La hice recostar en la camilla, que recline un poco, para que estuviera cómoda. Ella nunca soltó al muchacho y tampoco dijo una palabra.

Puse el gel sobre su abdomen y se estremeció. El sostuvo con más fuerza su mano y le beso la frente. Encendí el ecógrafo y allí estaba: se veía perfectamente su cráneo, su abdomen, y su corazón titilaba. Gire para mirarlos y se veían tan emocionados, que me conmovieron. Encendí el interruptor y el loco latido de su corazoncito inundo la sala. Ellos sonrieron y se besaron.

-Millie, estas de 12 semanas?

-Si, doctor. Esta bien el bebe? – y una sonrisa asomo de su boca, junto con su voz y sus lagrimas.

-Si, esta bien. Ha sido un susto nada más. Te recomiendo que hoy te quedes en casa y estés tranquila. No porque pueda pasar algo, pero creo que el stress que te ha causado la situación es mayor que el golpe - y los tres nos sonreímos. – Si tienes algún dolor fuerte o alguna perdida, vuelve a vernos o consulta con tu medico.

Los despedí en la puerta de la sala y pensé en nosotros. Cuanto me gustaría que tuviéramos hijos y una vida juntos. Debía trabajar en ello firmemente.

Julia me sonrió y me aviso que se había cumplido la guardia, y que los doctores que me reemplazaban ya habían llegado. Me cruce con Brad y Lilian. Nos saludamos y les entregue el turno.

Baje corriendo a pegarme un baño y cambiarme de ropa. Para cuando termine, eran más de las 8. Me senté esperando mi mensaje de texto y no llegaba. Habíamos ideado un sistema de avisos con las enfermeras que atendían a Bella y ellas se cercioraban si alguien vendría cada mañana.

Mi móvil vibro y enseguida abrí el mensaje: "Luz verde. El padre llamo. Llegan a las 11 de la mañana. M". Tome la mochila y salí con prisa. El camino hasta el 4º piso me pareció eterno.

Al dejar el ascensor y encarar el pasillo, vi a Marie que se asomaba de la oficina, saludándome con la mano y confirmando el mensaje. Bella estaba en la habitación 419.

Era una habitación amplia. Las cortinas aun estaban cerradas, pero dejaban entrar tenuemente la luz del día. Ella estaba hermosa como siempre. Me acerque a besarle la frente y tomar su mano.

-Buen día, mi amor! Estas muy hermosa hoy. Tienes muy buen semblante – Estire la mano y mire el chart. Como siempre, los estudios estaban perfectos.

-...Ayer busque en casa algo de nuestra música para traerte y apareció un disco que no escucho hace muchos años. Es que no soportaba escuchar esto y no tenerte a mi lado. Pero hoy me parece que es tiempo que ambos recordemos el momento mas hermoso de nuestras vidas. O por lo menos, recuerdo que en nuestra conversación días después, habíamos decidido que era así.

Gire dándole la espalda para acercar la silla y sacar el reproductor de música de la mochila. Me pareció escuchar un movimiento suyo en la cama. Me di vuelta y estaba igual que antes. Tal vez, mis ganas de que despertara. Encendí el reproductor y "Seal" empezó a cantar.

Flashback

Me levante esa mañana muy temprano. Era sábado. Tenia el campo libre porque mis padres se fueron a Seattle, y no vendrían hasta mañana en la noche.


Podría haber preparado mi cuarto, pero quería que fuera un lugar especial, con cierta magia. Alice me ayudo toda la semana a juntar las cosas para arreglarlo. Así que hoy cargaríamos todo en la camioneta de mi padre e iríamos para allá a toda prisa a trabajar.


Fue gracioso, porque tuve que estar poniendo excusas a Bella para dejarla temprano en su casa. Hasta que el miércoles, me arrincono en su cuarto y me torturo a besos para que le dijera en que estaba metido. La tortura fue increíble, pero no quería arruinarlo.


"Es una sorpresa para nosotros. Cenaras conmigo el sábado por la noche? Te llevare a un lugar especial". Y sus ojos brillaron como nunca, seduciéndome aun mas, acompañados de un beso como nunca me había dado antes. Esta mujer era mi perdición y nunca podría sacarla de mi corazón. Eso era seguro.


Así que hoy era el gran día. No se si terminaría como lo recreaba noche tras noche en mi cabeza, pero lo intentaría. El tema estaba hablado y la conclusión fue que deseábamos que fuera sin planear demasiado. Por eso, ella sabía que tal vez, cena un sábado podría significar un cambio rotundo en nuestras vidas. Me quedaba en cierta forma tranquilo, porque Bella ya había cumplido, igual que yo, sus 18 años.


Me bañe y me puse un traje gris oscuro con camisa celeste sin corbata. Alice me regalo un perfume para que usara, aunque me indico como, para que no fuera demasiado invasivo. Ella me reviso con la mirada al salir de casa y me dio su visto bueno. Me entregó una rosa blanca para que le llevara, y así me monte al auto camino a su casa.


Al llegar, Bella estaba hermosa como siempre. Se había puesto un vestido sencillo sin mangas color natural. La falda tenía algo de vuelo, pero llegaba a la mitad de sus largas piernas. En la parte superior era transparente, dejando ver sus hombros a través de la tela y desde el escote hasta el ruedo, tenía unos bordados grises en diagonal. Extendí la rosa hacia ella y se inclino sobre mi dándome un beso, breve pero sentido.


-Hola, Amor!


-Hola, Amor! – Y sonrió burlona - gracias por la rosa. – y paso sus manos por mi cintura.


-Estas sola?


-Si, ellos fueron al cumpleaños de una amiga de Rene en Port Ángeles. Y además, son negocios porque tienen un vivero. No se quienes son. Pero parece que se mudaran allí a fin de año. Nos vamos? – y me dejo otro dulce beso.


-Si, claro.


Salimos de allí y yo estaba nervioso. Estaba callado porque no sabia que decirle y eso parecía divertirle. Prendió la radio y puso su mano sobre la mía. Ladeó la cabeza como preguntando y yo le sonreí. Se inclino sobre mí, seco una gota de sudor de mi frente y luego beso mi mejilla.


Cuando llegamos a casa, seguimos el sendero para internarnos en el bosque, y tomamos el camino secundario, que se volvió tortuoso. Ella no dijo nada porque noto mi nerviosismo. En el crepúsculo de la tarde, todo tenía un tono diferente.


A los pocos minutos, un claro se abrió y dejo ante nosotros una pintoresca cabaña de piedra con techo a dos aguas. En la parte exterior no decía mucho, porque en un lado de la casa, se veían los materiales de construcción muy ordenados. El incipiente jardín salvaje no tenia flores, solo se veía verde, mientras una enredadera trepaba por la pared, haciéndola parte del paisaje. Ella se sorprendió cuando la vio. Me miro y me sonrió. Respire mas aliviado.


Bajamos del auto y puse mis manos sobre sus ojos. Quería ver su reacción. Ella protesto y surgió la típica discusión entre nosotros, donde yo decía que si y ella que no, hasta que la abrazaba y besaba su cuello. Entonces empezaba a ceder. Así que finalmente logre que entrara a la casa de esa manera. Di un paso al costado, para tener una perfecta visión de su cara cuando retirara el obstáculo sobre sus ojos.


Su carita valió mil veces haber trabajado tanto. No dijo una palabra al principio y tardo por lo menos un minuto sin hablar, hasta que se giro para zambullirse en mis brazos y agradecerme con un beso tierno.


Como no había un solo mueble, con Alice tratamos de sacar la mayor cantidad de polvo posible y cubrimos los materiales apilados por sectores con pesadas cortinas de terciopelo color borgoña, que mama tenia guardadas en el desván. Deberé pagar la tintorera después para sacarles el polvo. Y colocamos una enorme alfombra en los mismos colores.


Luego conseguimos dos candelabros de pie de hierro para 5 velas, largas y blancas, haciendo que tuviera un encanto especial. La chimenea estaba prendida con enormes troncos ardientes. Pétalos de rosas color rosa y vasos con velas anchas blancas también, en los rincones. En un costado, un antiguo baúl, con un mantel bordado blanco con nuestros platos y las cosas para cenar. El ambiente olía a rosas, madera y bosque.


-Amor, esto es bellísimo! Estoy sorprendida. Has trabajado mucho.


-Cuanto me alegra que te guste! Alice me ayudo. – Y rodee con mi brazo su cintura. Ella hizo lo mismo y apoyo su cabeza en mi hombro. –Madame desea cenar ya o puedo invitarla a bailar? - Su sonrisa fue increíble.


-No por favor, deseo bailar. Tenemos música también?


Extendí mi mano, tome el control remoto dejado estratégicamente cerca de la puerta y encendí el equipo portátil que trajimos, donde Seal empezó a cantar "I've been loving you too long".


La tome de la cintura y ella extendió sus brazos rodeando mi cuello y apoyando su cabeza en mi pecho. Todo era maravilloso. El suave vaivén del baile junto a ella me había relajado. Ya nada importaba, solo quería que pasáramos una noche maravillosa.


Ella bajo sus brazos y los paso por debajo de los míos, apretándose todavía mas contra mi. Yo pase mi mano por su brazo como hacia siempre y ella levanto la mirada hacia mí. Nos miramos por unos minutos mientras la música seguía.


Baje mi cabeza y la bese. Nuestro beso al principio fue tierno y en un segundo, se volvió exultante. Enrede mis dedos en su pelo, y nuestros labios y nuestras lenguas festejaron el encuentro.


Ella me sorprendió porque se separo un poco de mi, y subió sus manos por la solapa de mi saco. Cuando pude darme cuenta, estaba haciendo que resbalara por mis brazos mientras nos besábamos. Desabrocho los botones de mi camisa y también me la quitó, mirándome intensamente. Éramos conscientes de lo que estaba sucediendo y no nos detuvimos. La música se volvía a repetir una y otra vez.


Ella sin quitar su mirada de la mía, paso sus manos por mi pecho, acariciándome y haciéndome vibrar. La acerque nuevamente a mí y bese su cuello. Lleve mis manos a su espalda y empecé a bajar lentamente el cierre de su vestido. Lo deslice por sus hombros y cayo al piso de una vez. Su ropa interior de color natural y de un delicado encaje, me indicaron que la había elegido especialmente.


Ella tomo mi cinturón, lo abrió y deslizo mis pantalones que también terminaron el suelo, sobre la alfombra de tonos borgoña. Tome la ropa y la corrí con mi pie, aprovechando para descalzarme. Me agache, quite sus zapatos de a uno y bese sus piernas hasta llegar a su abdomen. Ella emitía hermosos "Mmm..." que derretían mi alma y me motivaban todavía mas. Me arrodillé y la tome de la mano para que ella hiciera lo mismo.


Frente a frente, la acerque a mí y la bese nuevamente mientras deslizaba los breteles de su corpiño. Su piel cremosa y suave parecía intangible bajo mis manos. Ella lo desabrocho y me maraville de su belleza.


Terminamos deshaciéndonos de lo que quedaba de nuestra ropa, para estar así, arrodillados frente a frente, como Dios nos trajo al mundo.


-Bella, yo te amo mas que nada en este mundo. Nunca lo dudes.


-y yo... no podría amarte mas. En mi corazón, serás tú... Siempre


Y nos besamos apasionadamente. Nos tendimos en la alfombra para disfrutarnos mutuamente. Recorrí su cuerpo y me maraville con el.


Era un sentimiento tan feroz y tan sublime, el tener la libertad de amarse como uno lo siente! No hizo falta aclaraciones ni pedidos. Parecía magia, porque encajábamos el uno en el otro, con una perfección sin igual.


Había previsto el tema de la protección, y trataría de que el trance fuera lo mas delicado posible. Sentí su quejido, pero era inevitable. Cuando estuve dentro de ella, espere unos instantes a que se acostumbrara. La bese y la acaricie para contenerla y así no opacar la ocasión. Pero cuando ella tomo mi cara y me beso en forma demandante, entendí que era el momento.


La danza en la que nos involucramos fue maravillosa. Al principio lenta, para luego encontrar el perfecto compás que nos guió al clímax. Enredados entre si, logramos alcanzar la cima del amor físico, solo como una forma mas de afirmar nuestros sentimientos.


Ya no podíamos hablar de corazones, de cuerpos... Aquí hablábamos de almas. Y entendí que nunca mas mi vida tendría sentido sin ella.

Fin del Flashback

Alguien golpeó la puerta, despertándome de mi ensoñación. Se abrió lentamente, y era Lucy.

-Doctor, faltan 10 minutos para las 11 y en cualquier momento llegaran sus padres. Por favor, no nos haga sufrir! – asentí y trate de meter el reproductor en la mochila con prisa.

-Amor, debo irme. Lo único que puedo decirte es que nunca te olvide. Siempre serás la única mujer a la que yo amo con el alma.

Me incline sobre ella y me tome el atrevimiento de besarla en los labios. Esos labios que siempre saben a dulce y que son tan míos.

Salí de la sala y deje al pendiente a Lucy, para que me llamara ante cualquier novedad. Estaba yéndome por las escaleras, cuando antes de cerrar la puerta, vi llegar a Rene y a Charlie con un gran ramo de rosas blancas.

Charlie POV

Entramos en la habitación y estaba en penumbras. Ella seguía tendida en su cama y me estrujaba el corazón verla en ese estado.

Me senté en la silla junto a la cama, a apoyar la frente entre mis manos y reflexionar. No quería demostrar flaqueza, pero esta situación me superaba. Vivía preguntándome que iba a hacer para resolver esto.

Rene se dirigió al otro lado de la habitación y corrió las cortinas. La luz se filtro en forma indirecta, iluminando la habitación. Tomo las flores viejas del florero y las tiro, acomodando las nuevas.

-Papa... –escuche y no daba crédito a mis oídos. Su voz era ronca y aletargada, pero era mi niña. Mi niña que habría los ojos a la realidad nuevamente.

Acerca del Autor

Nos dedicamos a brindar información a todos los fans de la Saga Crepúsculo. Desde entonces nos hemos encargado de cubrir premieres, eventos, actualizar día a día nueva información sobre el cast. Después de que terminó la épica Saga en Noviembre del 2012, seguimos los proyectos de cada actor como corresponde.
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1 comentario:

  1. SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII, 8 CAPITULOS ESPERANDO A QUE DESPERTARA Y YA LO HIZO OH YEAHHHHHHHHHHH YERSEY SHORE, PARTY TIME IN THE JACUZZI, BABY

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