Cap 15 - 16 AC

Capitulo 15


Descubrimientos


Ellie Pv


Tenía mucho miedo. Estar encerrada no es algo lindo, y menos cuando los dos extraños que se te secuestraron se están gritando como locos.


-¡NO ENTIENDES QUE NO LE PUEDO HACER NADA, NO LA PUEDO DEJAR IR!- Grito el señor, y luego escuche como algo de vidrio se rompía contra la puerta. Me apresure a poner el seguro para que no me hicieran nada.- ¡YO NO SOY EL ASESINO, ESE ES TU PAPEL!


-¡DEBEMOS DESHACERNOS DE ELLA, QUIERO EL DINERO!- grito la bruja con voz chillona


No entendía absolutamente nada, pero estaba muerta de miedo. Esta vez, me escondí en el armario y me acurruque abrasando mis piernas en un rincón.

Bella Pv


Al llegar a Juneau, nos alojamos en un hotel. Ya tenía nueve meses de embarazo, y Sophie podía nacer en cualquier momento. Ahora, sin Ellie, no era igual, pero trataba de no derrumbarme por Edward, porque se lo mal que lo paso.


Todos los días despertaba con la esperanza de encontrar a mi hija. Ya habían pasado cuatro meses desde que desapareció, y las esperanzas que albergaba se iban acabando. No volví al trabajo, Edward no me lo permitía. El embarazo se me hacia mas difícil sin Ellie. Para mí, la vida no era nada sin ella, mi angelito, pero ahora tenía a otras dos personas que me ayudaban a levantarme cada día.


Edward no estaba mucho mejor que yo. Todo el tiempo hizo lo posible para encontrar a nuestra niña, sin ningún éxito. Cuando me propuso ir a Juneau, la ciudad donde había nacido Ellie, lo dude un poco, ¿Qué ganaba viajando al otro extremo del país? Nada, absolutamente nada.


Hoy nos estábamos preparando para ir a la casa de los Denali, unos familiares de Edward. El insistía en ir aunque no sé exactamente para qué, pero lo acompañe. Cuando llegamos a la gran casa, en la puerta estaba una mujer mayor de cabello castaño oscuro y a su lado, un hombre alto. Los dos estaban sonriendo a nuestra llegada, pero me di cuenta que en sus rostros se veía el dolor. Edward me ayudo a bajar del auto, ofreciéndome su mano para sostenerme. Nos dirigimos al porche de la casa, donde nos recibieron.


-Edward, cariño. Me encanta verte- lo saludo la mujer con un abrazo, luego lo abrazo el hombre y Edward hacia su mejor intento de sonrisa.


- Es un gusto estar con ustedes. Quiero que conozcan a mi novia, Bella.- Me presento.- Cariño, ellos son Carmen y Eleazar, mis tíos- le di la mano al hombre, pero la mujer me abrazo maternalmente, recordándome a Esme. Probablemente, los tíos de Edward no se dieron cuenta de que Edward ya podía ver, pues en este momento llevaba unos lentes de sol, como antes.


Nos invitaron a pasar, y al entrar, una chica rubia sonrió hacia Edward y los dos se fundieron en un abrazo. Edward se quito los lentes y vi como las lagrimas se comenzaban a acumular en sus ojos, la chica también parecía llorar.


-Oh Edward- sollozo ella.- No sabes cuánto la extraño.


-Yo también la extraño.- cuando se separaron, Edward se limpio sus lágrimas y seco las de ella. Sentí como la sangre se acumulaba en mis mejillas, por alguna razón, tenía ganas de apartarla de mi Edward ahora mismo. Me tranquilice cuando Edward camino hacia mí y me tomo de la mano. La chica me sonrió y me abrazo.


-Gracias- susurro en mi oído. Al separarme, la mire confundida.- Lograste que Edward se operara. Eso es genial.- Sonrió de nuevo, era bastante amable.- Soy Tanya.- Se presento.


-Bella, es un placer.- Edward me miraba con ternura y me abrazo por detrás, poniendo sus manos sobre mi vientre y descansando su mentón en mi hombro.


La tarde fue amena con los Denali, una familia realmente unida. Estaban felices porque Edward podía ver otra vez. Carmen era hermana de Esme, por eso su actitud maternal conmigo. Eleazar era un hombre muy reservado pero bastante amable, y Tanya era adorable, la prima de Edward me hizo sentir un poco mejor. Todo se puso tenso con la pregunta de Edward.


-¿Dónde está Irina?- El rostro de Carmen se descompuso, Eleazar dejo de comer y Tanya hizo una mueca, parecía enojada.


-Nosotros…no lo sabemos-. Edward abrió sus ojos a más no poder y enterró su rostro entre las manos.


-No queremos que pase otra vez.- Susurro Eleazar, mirando a Tanya.


-Nada le va a pasar- dijo antes de levantarse de la mesa y azotar la puerta de la que supuse, sería su habitación, dejándonos a todos perplejos.


Después de un rato, Tanya asomo la cabeza por la puerta y nos llamo a Edward y a mí. Al entrar a la habitación, lo primero que vi, fue la foto de cuatro niños pequeños sonriendo. Mis ojos se abrieron cuando me di cuenta de que una de las niñas era igual a Ellie. Me contuve en preguntar, pero Edward se debió dar cuenta, por que inmediatamente me respondió.


-Es Kate- Sonrió.


-Edward, Irina no aparece hace cuatro meses, aunque yo ya sé donde esta- dijo Tanya tratando de contener su enojo.


-¿Por qué no les dices a tus padres?- le dijo Edward


-Esta con James, Edward.


-Oh por dios, ¡Tenemos que buscarla!- respondió Edward.


-No Edward, ella está con James como pareja, creo que esta antes de que Kate…- Se cayó. Estaba perdida, no entendía nada, y no entendía por qué Tanya quería hablar conmigo. Cruzaron una mirada, y después Tanya asintió. Edward suspiro y luego comenzó a hablar.


-Bella, amor- tomo una de mis manos- cuando me di cuenta de que todo encajaba, decidí venir contigo. Tanya me ayudo en mucho, y ahora estoy casi seguro de que Kate es la mama de Ellie.- abrí mi boca tratando de buscar las palabras, por estaba bloqueada. No podía entender por completo.


Ellie Pv


Se seguían gritando, y estaban discutiendo sobre mí. Yo no podía hacer nada, seguía oculta en el armario. Comencé a mirar para todos lados, empezaba a sentirme mareada y ahogada ahí dentro, pero no iba a volver a la habitación. Gatee hasta el otro lado del armario y me di con algo en la frente. Me la frote tratando que el dolor pasara, y cuando ya no me dolía, cogí lo que descubrí que era una perilla que rápidamente gire. Cruce la puertita y llegue a otro armario. Excelente. En este había más luz y pude ver un montón de vestidos y abrigos. También había una maleta rosa de bebe. La curiosidad me pico, cogí la maleta y salí del armario, esperando encontrar un lugar donde no estuvieran esos dos. Para mi suerte, llegue a una habitación blanca bastante bonita. Las paredes estaban cubiertas con papel decorativo azul cielo, y el resto era blanco. Me fui a la cama y tire todo el contenido de la maleta en ella. Habían biberones, mantas, chupos, juguetes…todo lo que un bebe necesitaba. Sonreí y volví a guardar todo, tal vez eso le serviría a Sophie.


Cuando ya estaba terminando, encontré una carta que abrí rápido. Abrí los ojos al ver la foto que había en ella.


Bella Pv


La mama de Ellie… ¿Era Kate? Edward entendió mi silencio, y tomo mi mano.


-Todo coincide. -Comenzó- Las fechas, los registros del orfanato, las pruebas que hemos practicado, todo coincide.- Suspiro.- No hace falta más prueba que ver el parecido de Ellie a Kate.


-James Witherdale es el padre- continuo Tanya.- Practicamos pruebas con Victoria, su hermana, y todo dio positivo.


-¿E-ese hombre me la va a quitar?- dije asustada. No me podían quitar a mi hija.


-Bella, no te la puede quitar legalmente, no le darían la custodia de un niño a un asesino.


-¿Qué?- me entro pánico.


-Kate, Irina y yo estábamos terminando la universidad cuando sucedió todo.- Relato Tanya.- En la universidad conocimos a James. Irina fue la primera que se intereso en el, pero por alguna razón, James se "enamoro"- marco las comillas- de Kate. Ellos se fueron a vivir juntos con el permiso de mis padres. James mostraba ser el hombre perfecto. Pero cuando Kate no volvió a aparecer por acá ni contesto nuestros llamados nos preocupamos. Irina también estaba algo perdida, pero por lo menos sabíamos de ella. Kate comenzó a llamarme, lo hacía llorando y rogando que fuera por ella.


''Cuando fui, James estaba borracho y a punto de darle una bofetada a Kate. Intervine y termino pegándome a mi- cerro los ojos, conteniendo las lagrimas.- En eso llego Irina, también estaba muy borracha. Me saco de esa casa a patadas. No pude volver allí, pero estaba preocupada por Katie- dijo con cariño.- Lo que paso después fue devastador. Encontraron a Kate muerta en esa casa. Estaba golpeada a más no poder. Al parecer la ahorcaron, no lo sé. Se llevaron a James a la cárcel, pensamos que se había hecho justicia.- Tomo aire.- Irina estaba ahí cuando James la ahorco, fue cómplice.


-Hace poco, James revelo que antes de que Kate muriera, había dado a luz. 30 de noviembre, las fechas coinciden. Aun no sabemos porque Kate dio a la niña en adopción, pero hizo bien. Quién sabe dónde estaría ella en este momento.- Me di cuenta que estaba llorando cuando Edward acaricio mi rostro, no quería que le pasara nada a mi pequeña.


Ellie Pv


-¡ERES UN MALDITO IDIOTA!- Ugh...eso me irritaba. Se seguían gritando bastante, aunque a mí ya no me importaba mucho. Seguía sorprendida al ver a una mujer bastante parecida a mí sosteniéndome en sus brazos.


Sabía que era yo, por que en mis fotos de bebe, yo salía con los ojos bien abiertos, y ese raro azul no se olvidaba. Me mordí el labio, una maña que había adquirido de mi mami. La extrañaba tanto. Igual que a mi papi.


Comencé a observar toda la habitación y me acerque a un mueble que había allí. Mire todo, libros y cuadernos. Algo en el tercer estante me llamo la atención.


-Un celular- casi grite.


Escale el mueble para alcanzarlo, y cuando tuve el celular en mis manos, desdoble el papelito de los números de emergencia que tenía guardado en mi libro de dibujos.


Bella Pv


Tanya, Edward y yo seguimos hablando de Kate. Al parecer, era una mujer bastante agradable, una buena persona que no merecía nada de lo que paso. Edward decía que tal vez James era el que tenía a la niña, cada vez me sentía con más esperanzas de encontrarla aquí. El sonido de mi celular me sobresalto, lo cogí y el numero era desconocido. Conteste con cautela.


-¿Hola?


-¡Por fin!- Exclamo una vocecita que yo conocía muy bien.


-¡Ellie!- Grite, la respiración se me acelero y Edward tuvo que sostenerme para que no callera.- Mi amor…bebe… ¿Cómo estás? ¿Estas bien? Oh por dios….Ellie, cielo ¿Dónde estás?- las palabras salían atropelladas, pero sin duda, ella me entendería.


-Estoy bien mami.- Susurro.- Ven por mí, estoy asustada- Su voz se comenzó a ahogar, se notaba que estaba a punto de llorar.- Encontré una foto…creo que es mi mama biocologica.


-Tranquila bebe… ¿Dónde estás?- musite, tratando de tranquilizarme.


-Aquí hace frio y hay nieve por todo lado. Estoy en una casa verde. Enfrente hay un edificio que dice Juneau….o algo así- Lo puse en alta voz, seguramente Tanya conocía la ciudad.


-¿Que mas ves, nena?


-Hay un café…la peluquería de una tal Rubí- soltó una risita.- un almacén de ropa bastante fea…muchas casas…mami- sollozo. Escuche como algo se caía y el grito de una mujer.- ¡DEJAME EN PAZ JAMES!- chillo-. Sé que tú no fuiste el que mato a Kate, pero allá afuera te consideran como tal. Si sales, la policía te encontrara- siguió gritando. Ellie sollozaba.


-Bebe… ¿estas bien?- susurre.


-Si mami, estoy escondida debajo de la cama.- de nuevo, se escucho el grito de aquella mujer- ¡ERES UN COBARDE!- luego, James hablo.- ¿COBARDE YO? ¡Tú fuiste la que escapo después de ahorcar a Kate! Eres una…desalmada. No entiendo cómo pudiste hacerle eso a Katie…ella era tu hermana, Irina.- me lleve la mano a la boca mientras veía como el rostro de Tanya se contraía y Edward halaba su pelo con desesperación.


-Están en esa casa- susurro Tanya.


-Ellie, hermosa. Escóndete bien, que no te encuentren, por favor. Cuídate mucho. Edward y yo vamos por ti en seguida. Si sucede algo, no dudes en volver a llamarnos. Te amo bebe. Por favor ten cuidado.


-Te amo mami. Gracias. Te extraño mucho y estoy muy asustada. Dile a mi papi que lo amo, y a Sophie también.


-Nos vemos más tarde.- colgó, y después de eso, me desmoroné y llore todo lo que me contuve durante la llamada. Si lloraba, Ellie se desesperaría, y eso era lo que no quería.


Lo más rápido que pudimos, nos subimos al ostentoso Audi de Tanya. Manejo como loca por toda la ciudad, y cuando llegamos a la casa, recordé el sueño que tuve antes de que Ellie desapareciera. Instantáneamente, puse mis manos en mi vientre. Rece para que nada le pasara a mi bebe.







- Algo que se me olvido decir en el capitulo anterior. Al principio del Fic, Bella adopta a Ellie en Aspen, y aqui Ellie nace y es adoptada por Bella en Juneau. Esto fue un error mio. Corri Aspen de Colorado hasta Alaska. Me di cuenta al ver un pograma en la tele, hehehe.


-Con respecto a las "Pruebas" Son pruebas de ADN. Cuando no estan los padres del menor, se le puede practicar las pruebas al pariente mas cercano de los padres y asi tambien se puede determinar el parentesco. En este caso, Tanya se hace la prueba para ver si Kate es la mama biologica de Ellie (Tambien hay algo de muestras oseas, pero me parecio feo hehehe) y Victoria (Hermana de James) se hace esas prueblas







Capitulo 16


La llegada al mundo de una nueva vida, ¿o Dos?


Edward Pv


Al escuchar la vocecita de Ellie al otro lado del teléfono, me volvió el alma al cuerpo. Aun seguía conmocionado por la discusión que termino revelando tanto. La verdadera asesina- y aunque me costara decirlo- era Irina. Bella estaba bastante nerviosa desde la llamada de Ellie, por eso, cuando llegamos, le pedí que se quedara en el auto.


-No Edward, iré también.- insistió después de una pequeña discusión. Era su hija y la quería con ella, pero tenía miedo que le pasara algo.


Tanya iba adelante, y cuando comprobó que no había nadie en la casa- Como había dicho Ellie en una segunda llamada- entramos. La casa era de dos pisos, estaba sucia y desordenada. Había varias botellas de vino y de cerveza tiradas por todo lado, una casa realmente descuidada.


Buscamos con calma en la planta baja, pero Ellie no estaba por ningún lado, así que decidimos buscar en la segunda planta. Bella estaba sudando, así que la detuve y la senté en un sillón pequeño que había en uno de los pasillos.


-Bella, por favor descansa un momento. Cuando salgamos de este pasillo podrás pararte.- Bella se mordió el labio pero esta vez no se negó, sabía que era lo mejor para Sophie.


Tanya abría las puertas de forma brusca por todas las habitaciones, mientras yo buscaba dentro del armario y debajo de la cama.


-Edward- llamo Tanya.- esta puerta tiene seguro.- Corrí a su lado y forcé la puerta, pero al no poder abrir, comencé a patearla. Escuche el grito de Ellie al otro lado.


-¡Son Insoportables!... ¡Los odio!- escuche como tiro algo contra la puerta. Tal vez nos confundió con Irina y James.


-¡Ellie!- grite, pateando la puerta aun más fuerte. El rostro de Bella se ilumino, la habíamos encontrado. Lo más rápido que pudo, vino hasta nosotros sosteniéndose el vientre.


-¡Papi!-grito.- ¡Sácame!


-Retrocede, voy a tumbar la puerta.- Escuche sus pasitos y entonces, con toda la fuerza que tuve, pateé la puerta. Tanya también el pateo, así callo más rápido.


Bella sollozo al ver a Ellie. Tenía el cabello largo y enmarañado, su carita estaba sucia y se podía distinguir el camino de sus lágrimas. La ropa que llevaba estaba rasgada y sus ojitos azules estaban rojos e hinchados. Bella no se contuvo y corrió a abrazar a Ellie.


-Bebe….te extrañe mucho- Las lagrimas descendían por sus mejillas sonrojadas, pero su sonrisa aclaraba que el llanto era de pura felicidad.


-Yo también te extrañe mami.- Sonrió la pequeña, luego se agacho y acaricio el vientre de Bella.-Hola Sophie- susurro. Cuando me acerque, Sonrió y salto a mis brazos.- Papi, eres mi héroe….gracias por salvarme.- comenzó a llenar mi cara de besos. Sonreí y tome a Bella de la mano. Las conduje hasta la cama e hice que se sentaran ahí. Tanya miraba todo desde la puerta y sonreía. Le hice un gesto con la mano para que se acercara, y lo hizo.


-Ellie, ella es Tanya, mi prima. Nos ayudo- La pequeña sonrió y abrazo a Tanya.


-Gracias.


Estuvimos un rato los cuatro, disfrutando de la compañía de Ellie. Estaba feliz, satisfecho. Ellie por fin estaba con nosotros. Lo único que se me hacia raro, era que ni James ni Irina aparecieran, no contaban con que nosotros llegáramos por Ellie.


Bella había recobrado esa sonrisa, la sincera. El brillo de sus ojos se había intensificado, haciendo que fuera la misma Bella que vi por primera vez. En un momento, se quejo, pero insistió que eran las pataditas del bebe.


-Creo que mejor nos vamos ya- dije después de que Ellie recogiera todas sus cosas. Había logrado llevar todo el tiempo su libro de dibujos y su muñeca. Delicadamente, le dio una maleta de bebe a Bella, quien sonrió por tan tierno gesto. Cuando ya estábamos por cruzar la puerta, se escucho un disparo. Cubrí a Bella y a Ellie con mi cuerpo al ver que Tanya caía, pero no estaba inconsciente, había sido un disparo en su pierna. Con desespero, Bella volvió a la cama con Ellie, y de pronto vi a Irina apuntarme con el arma.


-¡Oh! ¿A quién tenemos aquí? El ciego inútil vino al rescate.-dijo irónica.


-No vuelvas a decir eso en tu maldita vida- escupió mi novia enfadada, Bella odiaba que me llamaran así, odiaba que me insultaran con la incapacidad que había tenido toda mi vida.


-Ya no soy un ciego inútil. Baja el arma y deja de apuntar a mi familia.


-Ohh….que tierno. Pero no, tu esposita merece morir, ¿Sabias que insultarme tiene sus consecuencias?- se rio, y luego disparo. Inmediatamente me voltee, pero ellas estaban bien. La bala había cruzado la ventana.- Oh… ¿Te asustaste?


-Irina…eres una loca. Una maldita loca- empezaba a enojarme cada vez mas.- ¿En qué mierda estabas pensando cuando mataste a Kate?- Ellie estaba llorando y Bella trataba de taparle los oídos.- ¡Era tu hermana! Por dios…No me lo creería de ti, pero después de esto, no hay dudas… ¿Qué ganabas quitándole la vida tan cruelmente como lo hiciste?


-El amor de James…eso ganaba.- el arma comenzaba a temblar en sus manos. Las lágrimas comenzaron a caer, pero no me importo.- Todo el mundo amaba a Kate y a Tanya, yo era un cero a la izquierda. Pude soportar la preferencia de mis padres, de mis amigos, de mi familia, pero no la de James.- Comenzó a sollozar pero no bajo el arma.- James era mío, y esa maldita zorra me lo quito. El la amaba, pero debía amarme a mí, y lo obligue a hacerlo.


"Cuando esa tipa murió, James estaba destrozado. Pero me tenía a mí, no se por que se preocupaba tanto por la mocosa de su hija y por una muerta. Las amaba. – miro a Ellie despectivamente que la pequeña se asusto. Me percate que la camisa de Irina estaba manchada de sangre- Odiaba que todos los días me restregara en la cara lo mucho que quería a ese par, aunque no estuvieran con el.- siguió.- ¿y sabes qué? Estuve a punto de matar a ese pequeño engendro, pero él la amaba….el que murió fue otro.


-¡¿Mataste a James?- grite a todo dar.


-Lo merecía, el no me…


-¡Cállate! ¡Después de todo lo que hiciste, mataste a la persona que supuestamente amabas!


Eres una…das vergüenza.- otro disparo y un dolor punzante se apodero de mi brazo. Lo sostuve para contener la hemorragia.


-¡Edward!- grito bella, y luego un sollozo salió de su garganta- aun no…- susurro con su voz ahogada.


-¡Ves lo que puedo hacer con esto, idiota!- Ahora no sabía dónde mirar. Si me distraía, Irina podría volver a disparar, pero Bella seguía sollozando.


Bella Pv


El dolor era fuerte y constante. Sophie quería nacer y Edward estaba herido. Respiraba pausadamente tratando de calmarme, pero entonces sentía ese dolor de nuevo.


Edward e Irina seguían insultándose, pero en este momento yo estaba pendiente de que Sophie esperara un poco.


-¡Ya me canse! Di tus últimas palabras, Cullen- dijo Irina, enojada. Mire a Edward, que estaba haciendo de escudo para mí y para Ellie. Sostenía su brazo tratando de calmar la hemorragia.


Escuche el disparo y mire a Edward, pero él estaba bien. Mire a todos lados tratando de entender lo que sucedía, entonces vi a Tanya con un arma en sus manos mirando a Irina, que estaba quejándose en el piso, le había disparado en el pie, así que perdió el equilibrio.


En ese momento, el sonido de las sirenas fue un canto de ángeles para mí. De nuevo, el dolor me invadió de nuevo, pero ahora era más seguido. Palpe mis pantalones y estaban mojados.


-Oh Dios…-me queje cuando sentí otra contracción. Ellie insistía en que respirara, contaba de uno a diez para que yo me guiara.- Edward…Sophie ha decidido nacer...ahora.


Luego sentí como me levantaba y me ponía en una silla de ruedas. También pude ver como subían a Tanya y a Irina a unas camillas.


-No se preocupe, cuando la señorita Irina Denali salga del hospital, la pondremos tras las rejas.- le dio un oficial a Edward, el solo asintió y cargo a Ellie, dejando que uno de los paramédicos de la ambulancia empujara la silla. Edward iba a paso rápido, tratando de seguirme.


Me subieron a la ambulancia, con Edward y Ellie a mi lado.


-Mami… ¿La bebe va a salir ya?- pregunto inocente mi pequeña hija. Asentí como pude, mientras trataba de controlar la contracción que llego.


Esas fueron las catorce horas más largas y difíciles de mi vida. Al principio, Edward no estuvo a mi lado porque le estaban extrayendo la bala y cerrando la herida. Gracias a Dios, fue superficial y no fue nada grave. Edward había llamado a Carmen y a Eleazar y ahora estaban cuidando a Ellie. A Tanya también le habían extraído la bala y ahora estaba afuera distrayendo a mi hija mientras esperábamos el nacimiento de Sophie.


-Creo que ya es hora de pujar- dijo la Dra. Sue al ver que ya había dilatado lo necesario.


-Ok…aquí viene.- Edward estaba detrás de mi apoyándome. Sonreía como tonto.-Puedes hacerlo.- Susurro.


-Ok Isabella, tienes que pujar cuando sientas una contracción.- La doctora estaba preparada para recibir a mi hija. Sentí una contracción bastante intensa y puje con todas mis fuerzas. Edward hacia la cuenta regresiva y me dejaba descansar hasta la siguiente contracción.- Veo la cabeza, un poco mas Isabella -Repetí la misma secuencia otras tres veces y las lagrimas que se estaban acumulando en mis ojos cayeron cuando escuche el llanto de un bebe. Sonreí satisfactoriamente y Edward me beso.- ¡Felicitaciones, es un hermoso niño!


¿Qué?


-¿Un niño?- pregunte confusa.


-Es un niño hermoso.- alago la doctora.-Papa, ¿Quieres cortar el cordón?- Edward fue y corto el cordón umbilical del bebe. Aun no podía entender como tenía un niño cuando durante todo el embarazo me decían que iba a tener una niña.


-Doctora…no comprendo. Yo…se supone que tendríamos una niña. Durante todo mi embarazo nos aseguraron eso, incluso las ecografías lo demostraban… no sé como…-Me calle cuando tuve a esa pequeña criaturita entre mis brazos. Era tan pequeño. Estaba limpio y tenía su ropita, el color rosa me hizo reír. Acaricie con mi dedo su frente, su nariz, sus mejillas. Era perfecto.


-Se parece a ti- susurro Edward, sonriendo mientras acariciaba su poco cabello castaño.


-Yo quiero que tengan tus ojos, como cuando eras niño- Sonreí mirándolo.


-¿Cómo quieres que se llame?- pregunto curioso.


-No lo sé…tal vez Edward- bromee.


-¿Qué tal Thomas?- sugirió


-Suena lindo, pero quiero Edward.


-¿Thomas Edward?- rio.


-Edward Thomas-Sonreí, aunque sonara extraño, me gustaba.


-Ellie Kate, Edward Thomas…te gustan los nombres extraños.- Sonreí y deje que Edward cargara a Thomas.


En ese momento, volví a sentir ese dolor punzante y una necesidad de pujar. Todo fue tan repentino que me tomo por sorpresa.


-Oh- dijo la Doctora- creo que ya sé que fue lo que paso.


-¿Q-que pasa?- Volvía a sudar y el dolor llego, de nuevo.


-¿Te decían que había algo detrás del bebe?- pregunto y yo asentí.- Suele suceder, aunque es raro. Creo que si tendrán una niña. Son mellizos.


-Oh por Dios-Edward sonrió y le entrego a Thomas a una enfermera. Se acomodo detrás de mí y comenzó de nuevo con su cuenta regresiva. Estaba por rendirme, no podía pujar más.


-Vamos Isabella, solo una vez mas y descansarás, es imposible que tengas trillizos- se burlo la doctora. De nuevo, contracción, pujar, contar, descansar, llanto.- Una hermosa niña.


-Pensé que Sophie no vendría- Bromee


-Eres una caja de sorpresas, Bells.


Y después de tanto sufrimiento y dolor, tenía en mis brazos a dos hermosos bebes, nuestros hijos, de Edward y míos. Este sin duda, entraba en la lista de los mejores días de mi vida, compitiendo con el día en que tuve a Ellie entre mis brazos, el día en que conocí a Edward y el día en que por fin estuvimos juntos.


-Te amo- susurro Edward- Los amo- beso la cabecita de los bebes y mi frente.


-Tanto como yo a ti- sonreí